¡Se sube el telón!

Una funambulista en la Plaza de la Villa. | Efe

La Noche de los Teatros

Jesús Ossorio | Madrid

Se abre el telón y se ve una cola que casi rodea el edificio de la Casa Árabe en la calle Alcalá. Son los aspirantes a ver 'Harragas' de Marina Bollaín. Lo de aspirantes es porque muchos se han quedado sin la entrada (gratuita) para disfrutar de esta obra que narra el viaje de varios actores marroquíes para llegar a la península a buscarse la vida.

El teatro está en la calle y Madrid no se lo ha querido perder. Por cuarto año consecutivo, la capital ha celebrado La Noche de los Teatros, una excusa perfecta para promocionar las artes escénicas entre autóctonos y visitantes; la oportunidad perfecta para convertir las aceras y los parques de la ciudad en tablas en las que representar teatro alternativo, 'performance' o cuentacuentos para los más pequeños.

María, una valenciana afincada en Madrid, es una de las que se ha quedado sin billete para ver el viaje de 'Harragas', pero no ha desistido y ha probado suerte en otra cola, la de Casa América en la que esta tarde se representaba 'La tempestad' de Shakespeare. Cómo María, miles de madrileños han salido a la calle para disfrutar, o al menos intentarlo, de las más de 170 actividades que han inundado de teatro 100 salas, teatros e instituciones de la región.

"Otros años el programa era mejor y los descuentos en los grandes teatros se quedan cortos, se ha echado de menos más actividad en la calle, en algunos sitios era cómo un sábado cualquiera", cuenta María.

También ha habido hueco para la reflexión y el debate sobre el mundo teatral, para el cine y para la música, protagonista del cierre de la noche en el teatro Circo Price, dónde una suerte espectáculo teatral con música folk fusión como 'leit motiv', 'Fiesta Balcánica', lo llaman, a cargo de Cíngaro Drom cerrará la noche.

Poco antes de caer la noche, el mismo escenario acogía 'Sienta la cabeza', una extravagante peluquería que recreaba en las cabezas más atrevidas peinados imposibles a base del reciclaje y la transformación de objetos cotidianos. Todo con música electrónica y psicodélicas imágenes.

El respetable ha acudido masivamente a los escenarios, especialmente a los urbanos, aprovechando que el tiempo en la 'platea' invitaba a disfrutar de las propuestas escénicas al aire libre, las menos dentro de un amplio programa en el que ha primado la promoción de las obras y musicales actualmente en cartel en el 'West End' madrileño.

Eso sí, el ambiente 'todo incluido' del eje Quevedo, Bilbao o Tribunal no ha contagiado a las grandes salas que han programado sesiones especiales de sus obras pero sin evitar el paso por taquilla, aunque con descuentos.

Fuente: El Mundo