martes, 30 de diciembre de 1997

La Dote

1997 | Videodanza
Teatro Argentino - BsAs.
Performance ALEJANDRA CERIANI
Música DIEGO MADOERI
Vídeo MARIO CHIERICO


jueves, 11 de diciembre de 1997

LA ESCENA INDEPENDIENTE MUESTRA SUS MEJORES PRODUCCIONES DEL 97 Termina el Festival de Teatro Off

Hasta el domingo se ofrecen en El Vitral obras que ya merecieron la aprobación de crítica y público.

MABEL ITZCOVICH

El escenario independiente porteño está presente en el Festival de Teatro Off que se está realizando en El Vitral, de Rodríguez Peña al 300. En 85 funciones ofrecidas entre el 14 de noviembre y este domingo, están presentándose las 15 mejores producciones de 1997, algunas de las cuales ya merecieron en su momento la aprobación del público o la crítica. Tal es el caso de Sardinas ahumadas, dirigida por Kado Kostzer, o Potestad de Pavlovsky, con dirección de Elio Gallipoli. El repertorio abarca diferentes géneros que van desde el sainete (El duende del conventillo) al humor negro (Las hermanas Tatín) o la presentación del Grupo Integrado de Teatro, formado por discapacitados.También se exhiben diferentes búsquedas expresivas como es el caso de Los siete locos, por el Teatro Físico, donde la coreografía expresionista se constituye a la vez en coro y escenografía. O como los dos trabajos presentados por Nora Moseinco: Cosa de varios, una recreación del tema de solos y solas realizada con desopilante desprejuicio por un grupo de avezados actores adolescentes, y Anteboda, que logra aliar la acrobacia, el mimo y la magia con sorprendente plasticidad y rara perfección.Cada vez se les hace más difícil a los grupos de teatro independiente, llegar a montar un espectáculo. Y no sólo por problemas de producción sino por la imposibilidad de realizar promoción y publicidad, dice Jorge Guada, secretario de la Asociación de Teatros Independientes (ATI), organizadora de la muestra.¿A qué se llama hoy teatro independiente? En lo técnico, y según una vieja ordenanza municipal, son salas de no más de 300 localidades. En la práctica es el teatro que carece de sponsor o productor. Para un montaje -sólo en publicidad y prensa- hay que pensar, por lo menos, en 30 mil dólares. Y aquí los recursos son mínimos. Quizá por eso se logra a veces una síntesis de ideas y renovación.¿Qué resultados esperan de este Festival?Bastaría con que de aquí surgiera un actor o un director para que fuera positivo. No podemos esperar ayuda más que de nosotros mismos. El Vitral tiene 17 años de existencia y nunca pisó el teatro ningún funcionario de cultura. Así que preferimos confiar en nuestro propio esfuerzo.¿Cuál es la situación del teatro independiente?En los últimos años se abrieron de 70 a 100 teatros, pero se cerraron otros tantos. La permanencia es cada vez más corta, se hace difícil subsistir. Pero hay gente con voluntad y amor al oficio y algunos logran montar un escenario y hacer su aporte al desarrollo teatral.

Fuente: Clarín