sábado, 23 de diciembre de 2006

Julio Chávez: "La locura del actor es tan obvio"

VARIAS BATALLAS. Al actor le parece natural abrir las puertas de los varios frentes que ofrece el oficio del teatro. Es actor, maestro, dramaturgo y director. Además, en los pocos ratos libres, pinta.

A treinta años A treinta años de su protagónico en "No toquen a la nena", Julio Chávez se atreve a su primer unipersonal: la multipremiada "Yo soy mi propia mujer". La obra cuenta la vida del célebre travesti y coleccionista de antigüedades Charlotte von Mahlsdorf. Lo dirige su primer maestro, Agustín Alezzo.

Treinta años atras, este hombre era Willy, un hippie que en No toquen a la nena de Juan José Jusid decía —un poco borracho y deslenguado— que él tampoco era el padre de la criatura. Ahora, habla en voz baja, en un rincón del Multiteatro, con Agustín Alezzo, uno de sus maestros. Entre una y otra cosa, el joven se ha convertido en un actor de más de cincuenta años que ha tocado todas las cuerdas y que se ha vuelto, él mismo, también maestro. Parece distendido a pesar de lo que se le viene encima: su primer unipersonal, Yo soy mi propia mujer, la vida del célebre travesti y coleccionista de antigüedades Charlote von Mahlsdorf, una obra de Doug Wright que, entre muchos premios, ganó el Tony como Mejor Obra y el Pulitzer como Mejor Drama en el año 2004.

Te has probado como actor, director, dramaturgo, maestro. Ahora viene este unipersonal: tiene su lógica preguntarse por qué tantas cosas...

Es mi ocupación. El teatro es el espacio que he elegido para crecer, desarrollarme, pensar. Este oficio, por suerte, no tiene una sola puerta, ofrece muchas vías de acceso. Y los que estamos ocupados en navegar en este espacio autónomo, creo que tenemos el derecho de utilizar todas las herramientas para contar, traducir la realidad. Por eso, que un actor investigue sobre el espacio escénico, no me parece nada raro; que pretenda averiguar ciertos secretos de la dramaturgia, no puede ser extraño. En mi rol de entrenador, además, debo estar despierto en todas esas cuestiones. Más que peligroso, todo eso me parece un derecho del oficio. El derecho a indagar, a equivocarme.

¿Es lo primero o lo último en que pensás cuando encarás un trabajo?

El temor a la equivocación es inevitable. No se puede aprender y estar siempre bien. Hay espectáculos en que no estás muy bien pero que te ayudan a aprender. Otros en los que te podés lucir y no aprendés nada. Incluso, (se ríe) hay algunos en los que no estás bien y no aprendés nada. No todo depende de uno. Estamos expuestos ante la mirada de los otros: las estrellitas u hombrecitos que aparecen en una crítica. La tensión es inevitable. Me gusta la imagen de Séneca: es imposible expresarse y al mismo tiempo pretender que el otro esté siempre de acuerdo. Mientras tanto, templanza y algún día serás un guerrero.



¿Cómo surgió el proyecto de la vida de Charlote von Mahlsdorf?

Es un material sumamente particular. El personaje real, que murió en el año 2002, era un travesti con características muy diferentes a lo que tenemos en la cabeza. Porque un personaje que se travestiza para parecer una tía abuela de casi ochenta años no es la idea de un travesti que, para nosotros, es alguien que vuelve excesivos los atributos femeninos. Pero además tiene otra particularidad: el autor, Doug Wright, presenta a un sujeto y escribe una obra. Pero sobre todo lo presenta para que el espectador comprenda por qué se enamoró. No es que en el escenario aparezca Charlotte sino que, por un juego de espejos, aparece el personaje que presenta el autor. Un autor enamorado. Y como además cuenta su vida, aparecen —desde Charlotte— las personas que rodearon su existencia.

¿Pero cómo te llega el material?

Buscaba algo para hacer en teatro y me llama Ricky Pashkus, que es como mi hermano, desde Nueva York. "Hay una obra que es para vos", me dice. Lo más gracioso es que Ricky nunca la vio, pasó por el teatro y tuvo un golpe de intuición. Leí el texto y me gustó mucho pero faltaba algo...

¿Qué?

Un conductor paciente sereno, conocedor, con oficio y con espíritu joven al mismo tiempo: apareció entonces el nombre de Agustín Alezzo. Para mí, tiene las características de una persona joven.

¿Cuáles son?

Tiene siempre en la paleta colores nuevos y eso que tiene más de cincuenta años de teatro. Es alguien que sabe resguardarse para que la vida lo toque, lo conmueva. No era fácil. Hacía mucho tiempo que él no dirigía, estaba muy interesado en seguir en su estudio, pero leyó la obra y por suerte estamos trabajando juntos. Lo conozco desde hace más de 30 años. Tenía 16, casi 17 años y era mi primer día en el Conservatorio. Me acuerdo perfecto: Alezzo subió las escalera y yo estaba ahí, sentadito, y me dijo: ¿De qué año es?. "De primero", le dije. ¿Y cuántos años tiene?. "Dieciséis", respondí. El me miró y me dijo: Falta mucho....

Mirando el archivo, parecería desde el medio que el cine te ofreció personajes que aún el teatro te debe...

No es mi experiencia. Lo que sucede es que el teatro tiene otro tipo de repercusión que el cine. El medio nunca me ha limitado, ni restringido, ni menos me ha negado algo que, sentía, me he merecido. Jamás. Al contrario. Intento ser un artista en el interior de un espacio que tiene algo que se llama el medio, pero hay cosas que han sido importantes para mí y que no dependen del medio: mis lecturas, mi posibilidad de pensar. Y no me quejo de nada porque hasta yo mismo me he detenido cuando en ciertos momentos el medio se llenaba de voces: aprovechá, es tu gran gran momento.

Tu primer trabajo unipersonal...

Y vamos a ver cómo sale. En ese sentido, me interesa lo que dice Umberto Eco: hay dos maneras de hacer un safari. Está el de Africa: puede salir el hipopótamo, o puede no salir; podés cruzarte con una tribu o no; podés encontrar el cementerio de elefantes o no encontrarlo. Esa es una posibilidad. La otra es ir a Disneylandia, porque a las doce y cuarto el hipopótamo sale.

Seguís pensando que los locos, más que en el teatro, están en la calle...

No hablo —cuidado— de la locura grave. Pero sigo pensando lo mismo respecto al lugar común de los actores, qué locos. No, en absoluto. Loco es el taxista que se baja del coche y le revienta con un palo el auto al de adelante porque le sacó un pasajero. Una escena extraordinaria, acerca de lo que el hombre es capaz de hacer. Loca es la chica que sale a la calle con una minifalda, tapándose todo el tiempo, enojada porque le dicen cosas. Ese es un suceso extraordinario. Uno piensa: mirá todas las historias que produce el ser humano. Armamos situaciones increíbles, en el que un mantel de mejor calidad lleva a que un café cueste tres pesos más. Por eso, al contrario, el teatro es el lugar para reflexionar acerca del drama del ser humano. Además, la locura del actor es tan obvia, tan ingenua. Es hasta inofensivo. El actor es un ser de lo más normal: es el especialista en observar la escena humana.

Eso transmitís como maestro.

Más que transmitir, acompañar. Siempre pienso, al final de cada año, que si logro que tres alumnos terminen metidos en la pileta del problema, me doy por satisfecho. Si lograste preocupar a alguien, vas bien. Yo les digo a mis alumnos: dejen de mirar desde el borde de la pileta con un Martini en la mano mientras el otro chapucea por un poco de verdad.

Fuente: Clarín

viernes, 15 de diciembre de 2006

Jessica Rabbit en Playboy

Playboy-Jessica

Viernes… día de femme fatales. Y esta vez le toca el turno a una femme fatal “animada”: JESSICA RABBIT… aunque, animada de modo realista. O no, si tomamos en cuenta sus medidas… pero A QUIÉN LE IMPORTA??!… Sé que los visitantes masculinos de 2clicks no quieren perder el tiempo leyendo lo que pueda poner sobre esta diosa de curvas pecaminosas, así que solo dará unos datos:

• Su voz se la puso Kathleen Turner (que no aparece en los créditos de la película, pero sí lo hace luego en los cortos animados que le siguieron).

• Su voz para la canción “Why Don’t You Do Right?” fue interpretada espléndidamente por Amy Irving (quien por aquel entonces fuera la esposa de Steven Spielberg -productor del film-.

• La muchacha de la portada es Laura Richmond (buena foto ¿no?)… Todavía recuerdo cuando vi esa tapa en alguno de los puestos polvorientos del viejo Parque Rivadavia (donde había una feria de revistas usadas). Sí, era pequeño… pero ya sabía cuando una mina estaba buena! (el detalle era que por aquel entonces no sabía PARA QUÉ estaba buena.. ^_^ )

• La portada es de la Playboy de Noviembre de 1988.

• Y la chica de la foto de abajo, se llama Heidi.


Jessica-Heidi

Fuente:todopor2clicks.com.ar/

jueves, 30 de noviembre de 2006

Si somos una familia muy normal

La familia como tema es recurrente en las obras teatrales de los últimos quince años. En este momento coinciden seis en la cartelera de teatro porteña, sin contar las que tienen los conflictos familiares como eje o metáfora de otras temáticas. Claves para entender este fenómeno.

Susana Villalba ESPECIAL PARA CLARIN

Hay de todo, como sucede en la época: ocultamientos varios, padrastros, cuñados amantes, secretos deschavados, paternidad y maternidad ausentes, cruces incestuosos, una deriva por donde despunta algún afecto. En el teatro de estos tiempos, hay algo de cuestionamiento y a la vez de nostalgia respecto de la familia tradicional. Ya desde los '90 la familia es un tema recurrente en teatro: La escala humana (Spregelburd, Daulte y Tantanian), Cachetazo de campo (Federico León), Mujeres soñaron caballos (Daniel Veronese), La escuálida familia (Lola Arias), Zooedipus (El periférico de objetos), Lengua madre (Mariana Oberztern), Trío para madre, hija y piano de cola (Ignacio Apolo), por nombrar sólo algunas. Además de los Biodramas, como Nunca estuviste tan adorable; variantes como La chira (Ana Alvarado) y actualmente El montañés (Guillermo Arengo), cuyas familias son preguntas por los desaparecidos y exiliados; o Los hijos de los hijos (Inés Saavedra) sobre nuestras raíces inmigratorias.


La patria es la familia

Ricardo Bartís irradió la idea de "la anécdota como excusa para generar teatralidad, fuerzas en acción más que personajes". No atarse a un texto es para él como no someterse al discurso establecido sobre la realidad. Aun así, sus obras siempre dejan pensando. En De mal en peor, una familia patricia se endeuda para no perder sus privilegios, entrega una hija y roba la indemnización a una de las maestras traídas por Sarmiento. Adictos, jugadores, golpeadores e incestuosos, los personajes mantienen las tradiciones patrias y las apariencias. Así como antes recreó a Shakespeare, Discépolo y Roberto Arlt, ahora Bartís partió de Florencio Sánchez, "el Strindberg rioplatense", de sus núcleos y procedimientos más que de la letra. "Como él, llevamos los conflictos de clases al seno de una familia y los hacemos estallar en su patetismo", dice. Aunque también aclara que "siendo once actores en un ámbito cerrado, nos convenía una estructura familiar para dar rápidamente anclaje a la improvisación".

Flia es producto de un año de improvisaciones del grupo La Fronda. Su directora, Ana Sánchez, detalla que "no se trataba de representar vínculos y roles sino de tomarlos como punto de partida y llevarlos al límite en que se revelan múltiples, confusos y movibles. Probábamos hasta dónde aguanta un vínculo sin virar a otra forma de relación. Y cada actor pasaba por todos los roles. Lo familiar se fue imponiendo porque es lo más primario y porque acota y da un marco a lo acumulado en ensayos. Además, cuando ya había que definir personajes, se perfilaban mejor dentro de una estructura". El título —Flia— es también por el achicamiento, "ya no hay esos familiones que eran red de contención, en este caso ni siquiera hay madre. A pesar de haber tres mujeres en el grupo, ninguna eligió encarnar una madre —cuenta Sánchez—. Es un signo, es difícil cubrir ese rol porque también se ocupan otros; incluso las abuelas ya no pueden suplirlo".


La hora del replanteo

Para Claudio Tolcachir, director de La omisión de la familia Coleman, "siempre conformamos redes de tipo familiar. Por un lado es necesario pero a la vez nos estereotipa: replantearse los vínculos es replantearse la vida, elegir". La omisión se generó a partir de improvisaciones, con la familia como consigna pero "con el foco puesto en cómo se relaciona cada uno. Empezar a improvisar se parece a la familia en que no se sabe para qué esa gente está ahí junta —dice Tolcachir—. Pedí a los actores que no forzaran conflictos ni situaciones interesantes, en la obra lo único que sucede son esas relaciones. Y es uno de los problemas, que no pasa nada, esta familia no tiene proyecto. También desarrollamos contradicciones, ningún rol es lineal. El hermano más marginal es a la vez el protector, el más loco dice la verdad, la más legal es adúltera". También los actores de Flia definieron los personajes por sus contradicciones, "nadie es un rol solo ni de una sola manera", dicen en grupo.

Santiago Gobernori es dramaturgo además de actor y director y anteriormente montó textos propios; sin embargo tuvo necesidad ahora de partir de improvisaciones, de lo que surgió otra familia disfuncional: Reproches constantes. Un viaje de regreso a la infancia para encontrarse en un país en el que, de adulto, se es extranjero. Pero Gobernori encuentra diferencias con la generación que lo antecede: "las obras de Spregelburd o de Daulte tienen estructuras e hilaciones complejas, una obra mía se va completando y corrigiendo en la siguiente, además intento lograr lo máximo desde una puesta despojada y una situación mínima". En sus obras se repite una pregunta por la paternidad responsable y por el paso del tiempo que se expresa en los cambios de una familia. Gobernori recurre a Chejov para decir que "hay que escribir sobre lo que uno sabe"; y confirma que parte de la búsqueda es sobre el lenguaje teatral, en su caso poner en cuestión los axiomas de la dramaturgia ortodoxa. "Los procedimientos me interesan más que los resultados", dice. En cuanto a no encarar "los grandes temas sociales", la familia es la mínima expresión de la sociedad, la parte por el todo, "Chejov armaba el mundo desde lo que parecía nimio", dice, pero agrega que su generación viene de padres militantes y es reactiva a lo que vivió como padecimiento o imposición. Sánchez coincide en que lo social se deduce, los personajes están impregnados de un entorno, que en Flia tratan de salvar con emprendimientos absurdos y herencias magras. En La omisión...



La parte por el todo

La pregunta por la familia es también por la historia y el futuro. Una tragedia argentina se montó en base a un texto escrito por Daniel Dalmaroni. Es una obra dura, un enchastre de sangre logrado con mecanismos de prestidigitación. "Clavamos un cuchillo y luego pedimos perdón, no nos hacemos cargo de consecuencias irreversibles, individualmente y como sociedad. Me interesa el humor negro y la sátira roja, el gran gignol de esta mezcla de razas pasionales, con pasados aventureros, de rapiñas o exilios —agrega Casavalle—. Es bastante sintomática la pregunta que se hace el público al salir de la sala: ¿cómo van a limpiar tanta sangre?"

En La medida de la normalidad la falta de códigos se suple con Las bases de Alberdi, que una familia repite sin comprender. Graciela Camino dirigió al grupo Denei en improvisaciones que se basaban en vínculos más que en situaciones. Se inspiraron en textos literarios fundacionales que "con una mirada nacional-sanitaria diseñaron una política familiar higiénica como la del Estado". La familia surgió una vez más "porque es el primer lugar de identificación y porque hay edades y vínculos distintos en un ámbito cerrado", dice Camino, y agrega que "la familia es como un patria, un lugar tanto de asilo como de conflicto, con mitos y sobreentendidos que hay que discutir". Coincide con Casavalle en la diferencia entre el país que somos y el que decimos ser y en la violencia para encajar en ese imaginario. En la obra, la mujer es india y sierva o una madre que deja de serlo cuando la gana su erotismo, mientras los varones sacrifican al que no da la talla de la normalidad.
por ejemplo se percibe que los Coleman derivan en un naufragio general y circundante. hace evidente la pertenencia a una clase, es una parodia que podríamos llamar Schoklender o García Belsunce, la violencia política y económica, secretos y perversiones familiares que reproducen conductas del poder. "Más que una metáfora —prefiere su director, Alejandro Casavalle— la familia actual es un signo. Siempre armamos clanes, si uno va a Florianópolis, vamos todos; y expulsamos al diferente. Pero no tenemos códigos o los rompemos constantemente".

Fuente: Clarín

Cuando el escenario se vuelve cabaret

TEATRO › JOSE MARIA MUSCARI Y “KAGARET”

La puesta fue realizada junto al grupo La Cochera, que dirige Paco Giménez.

Por Cecilia Hopkins

A partir de su exitosa Shangay, de su participación en la anteúltima Fiesta Nacional del Teatro, el trabajo de José María Muscari se está haciendo conocer en las provincias. Allí, cada vez con mayor frecuencia, actores y directores lo solicitan como docente en talleres de actuación, aunque sea por unas pocas jornadas. El año pasado, en cambio, de Córdoba capital recibió la propuesta de producir un montaje a lo largo de todo 2006. Los intérpretes serían quince actores de La Cochera, el grupo que desde hace dos décadas dirige el inefable Paco Giménez. Como la idea consistió desde el vamos en montar un espectáculo de cabaret –un género que el actor y director cordobés conoce al detalle–, Muscari no debió partir de cero, ya que su anfitrión había comenzado a producir material por las suyas para que contase con una base previa. Kagaret –pulsión por exhibirse–, la obra resultante de esa experiencia de cruce, se presentará en El Portón de Sánchez (Sánchez de Bustamante 1034), en doble función este sábado y el domingo 3, a las 21 y 23, el primer día, y a las 19 y 21, el siguiente.

–¿Desde qué ideas concretas se inició el trabajo actoral?

–Paco Giménez convocó a actores de su grupo y les dio pautas concretas de trabajo relacionadas con la idea de entretener, de ser divertidos o de presentar alguna particularidad escénica determinada. Me mostraron casi seis horas de material. Sin embargo, a mí lo que menos me interesó fue la zona del humor o el virtuosismo. El trabajo, en cambio, me despertó un universo muy concreto sobre el patetismo que implica la exposición del actor cuando tiene la necesidad de entretener. Entonces, con el grupo fuimos generando ficciones muy contundentes, pero sin componer personajes. Todos jugaron a exponer las propias debilidades, sus zonas oscuras, perversas, relacionadas con lo sexual.

–¿Por qué se pensó en un cabaret?

–Porque siempre me pareció una zona hostil, donde los cuerpos son expuestos para calentar y entretener. Esa relación que se entabla con un público que mira como un voyeur siempre me resultó muy decadente. Entonces jugué con ese vínculo entre el que muestra y el que mira, profundizando en la pulsión por el exhibirse y en todo tipo de fetichismos escénicos. Así, los actores se convirtieron en iconos del sexo patético. Por otro lado, de entrada, lo musical atravesó los trabajos de los actores. La música siempre forma parte neurálgica de mis puestas.

–¿Cuál es el tratamiento del erotismo que propone el espectáculo?

–Divertido, en primer lugar. Siempre que uno tiene la posibilidad, la decisión y la inteligencia de reírse o de tener una mirada un poco distorsionada de la simple representación de la realidad, el humor aparece casi sin proponérselo. Por otro lado hay una intención deliberada de búsqueda entre sexual, erótica, patética y desfachatada del cuerpo y la desnudez de los actores. Durante una hora se mantiene en vilo al espectador, fluctuando entre la decisión de mostrarle todo y no mostrarle nada, sin recurrir a un relato escénico “convencional”. Lo que buscamos fue generar un instante fugaz, mágico, particular y erótico de encuentro con el espectador.

–¿Qué rasgos estéticos o temáticos acercan su trabajo al de Paco Giménez?

–En primer lugar, tengo por él una admiración que comenzó de adolescente, por haber visto al grupo La Noche en Vela (grupo que dirigió Giménez en Buenos Aires, viajando periódicamente desde Córdoba). Desde entonces descubrí una concepción desacartonada del teatro.

–¿Cómo se puede definir esa idea?

–El hecho escénico puede ser un momento único y festivo a la vez. Y el trabajo actoral puede basarse en la arbitrariedad y en lo metafórico. Se puede indagar en un tema, pero sin la necesidad de relatar una historia. Estéticamente, el trabajo de Paco y de La Cochera siempre tuvo que ver con el desmadre, con lo explosivo, lo expansivo y lo poco “clasificable”. Creo que Kagaret revisita esos lugares y tópicos escénicos, pero con una violencia mayor que la que suele manejar el grupo. No en vano fue la violencia escénica que recorre mis propuestas una de las razones por las que Paco decidió convocarme para generar esta cruza.

Fuente: Página 12

Publicidad Coca Cola filmada en el Estadio Unico de La Plata

De Santo para Coca Cola: "Invasión" la mayoría de los extras son ciudadanos de la ciudad de La Plata y alrededores.

miércoles, 29 de noviembre de 2006

TEATRO : COMIENZA HOY Un paneo del teatro porteño

CRAVE La obra de Sarah Kane se presenta mañana


Se elegirán tres obras para la próxima Fiesta Nacional de Teatro que se desarrollará el año próximo.

Juan José Santillán ESPECIAL PARA CLARIN

Con El aprendiz, una obra de Pablo Shilton, arrancará hoy la Fiesta del Teatro de la Ciudad de Buenos Aires. Se trata de una función homenaje para familiares y amigos del director fallecido recientemente en un accidente automovilístico.

De esta fiesta —que se extenderá por distintas salas de la capital hasta el 3/12— se elegirán tres obras para representar a la capital en la próxima Fiesta Nacional de Teatro. Además, los mismos trabajos seleccionados integraran la grilla del VI Festival Internacional de Buenos Aires, que comenzará en setiembre del año que viene. La selección estará a cargo de Nelson Castro Alvarado, Beatriz Labatte, Jorge Ricci, Kado Kostzer y Víctor Bruno.

La fiesta es una oportunidad para revisitar el panorama de la actividad teatral porteña de este año. La grilla contempla tres obras por cada día; es decir, quince espectáculos que darán cuenta de las variadas búsquedas de los directores porteños.

Hoy, a las 21 en ElKafka (Lambaré 866), será el turno de 4.48 Psicosis, una obra de Sarah Kane protagonizada por Leonor Manso y dirigida por Luciano Cáceres. Luego, a las 23 en Espacio Callejón (Humahuaca 3759), se verá Kuala Lumpur, de Gustavo Tarrío y el Grupo Sanguíneo.

Mañana, a las 19 en Patio de Actores (Lerma 568), Mariano Moro presentará su unipersonal Quién lo probó lo sabe, basado en textos de Lope de Vega. Mientras que a las 21 en el Estudio La Maravillosa (Medrano 1360) Inés Saavedra y Damián Dreizik están al frente de Los hijos de los hijos. A las 23, en Elkafka, Cristian Drut otra obra de Sarah Kane: Crave.

El viernes se abrirá la jornada a las 19 en el Camarín de las Musas (Mario Bravo 960) con Opera Anoréxica de Andrés Binetti. Luego, a las 21 en el Teatro del Abasto (Humahuaca 3549), habrá función de Un amor Chajarí, de Alfredo Ramos. Mientras que Beatriz Catani y Mariano Pensotti presentarán, a las 22.30 en el Camarín de las Musas, Los muertos.

El sábado, a las 19 en el Teatro Payró (San Martín 966), habrá función de Un mismo árbol verde, dirigida por Manuel Iedvabni. A las 21, en el teatro La Carbonera (Balcarce 998), se verá Todos hablan con dirección de Gabriela Izcovich. Mientras que a las 23, en el C. C. de la Cooperación (Corrientes 1543), Enrique Dacal cerrará la jornada con Procedimientos para inhibir la voluntad de los individuos.

El domingo, a las 18.30 en el C.C. San Martín (Sarmiento 1551) Teresa Duggan realizará Cuatro poemas. A las 20 en Corrientes Azul (Corrientes 5965), Hugo Alvarez dirige una versión de El jardín de los cerezos, de Antón Chéjov. La despedida será con Del otro lado del mar, de Omar Pacheco, a las 23 en La Otra Orilla (Urquiza 124).

Fuente: Clarín

viernes, 17 de noviembre de 2006

Agenda Teatro 2006

Programación de Noviembre
Salas de teatro independiente asociadas a ATEPLA ASOCIACIÓN TEATRISTAS DEL PLATA
http://www.atepla.org/ / atepla@yahoo.com
Centro Cultural El Núcleo ( calle 6 n°420)


VIERNES 10, 17 Y 24, 21 HS.
SÁBADO 18, 21 HS
Grupo Barataria presenta

"LOMBRICES"
(Estreno)
de Pablo Albarello
Humor negro
"Dos "inocentes viejecitas" que harán llorar...(de risa)"
Consuelo..........Omar Musa
Martirio.........Nicco Vanni
Vestuario: Nina Rapp
Escenografía: Maxi Panizza
Dirección general y puesta en escena: Nina Rapp
Entradas $8 y $6.


SÁBADOS 4, 11 Y 25, 21 HS.
Compañía Hermanos Luro presenta

"EL FANTÁSTICO VIAJE DE CARLITO EN LA ISLA SIN MAR"
Con Roberto Maroscia, Carmela Rucci y Luciano Valle
Escenografía y vestuario: Carolina Vinocur
Diseño gráfico: Verónica Mateu
Diseño y puesta de luces: Gustavo De Marcos
Idea, producción, lubro y dirección: Compañía Hermanos Luro
Entradas $8 y $6


SÁBADOS 23 HS.
Grupo Barataria presenta

"CORAZÓN DELATOR"
Versión libre de Gabriel de la Canal sobre el cuento homónimo de E. A. Poe
"Un ojo de buitre, un ojo celeste"
Con la actuación de Nicco Vanni
Secuencias coreográficas: Cecilia Arreseygor
Maquillaje: Ana Sargentoni
Luces: Gustavo De Marcos
Dirección general y puesta en escena: Gabriel de la Canal
Entradas $8 y $6


DOMINGOS 21 HS.
Pisando Piegos presenta

"LA CONTRADICCIÓN DE LAS LÁGRIMAS"

de Jorge Zanzio y Mercedes Falkemberg
"...a la verdad no se la esconde, porque el mar siempre la devuelve a su orilla..."
Intérpretes: Solange Gañet y Adriana Falkemberg
Gráfica y fotografía:Jorge Zanzio
Escenografía e iluminación: Máximo Panizza
Dirección: Mercedes Falkemberg
Entradas $8 y $6


Teatro La Hermandad del Princesa
Diagonal 74 N° 874 entre 3 y 4 Te: 4835464
http://www.teatroprincesa.com.ar

El GRUPO DE TEATRO INDEPENDIENTE BUSCALUNAS presenta

"SOBRE EL PECHO DE UNA MUJER".
Dramaturgia y dirección Olga Anzolini.
Con las actuaciones de María Inés Uro, Fernanda Alessandro, Luz Andrade y Germán Reimondo. Música en vivo a cargo de la cellista Marina Arreseygor, la pianista Natalia Salinas y el percusionista Pablo Santos.
La escenografía y el vestuario están a cargo de Laura Melgar. La iluminación, de Alfredo Nuñez. La música está compuesta por Alejandro Dinamarca, con la inclusión de obras de Saint Saens, Mendelssohn y Dvorak.
Viernes 10, sábado 11 y sábado 18 de nov, a las 22 hs. en el teatro La Hermandad del Princesa.,
dg. 74 e/3 y 4.


Teatro La Fabriquera
calle 2N°477 - 0221 421 2575/ fabriquera@sinectis.com.ar
http://usuarios.advance.com.ar/fabrique

Domingos 20,30hs.

Sodería Espósito. creación colectiva
Federico Aimetta, José Pollo Canevaro, Diego Cremonesi, Gustavo Parola, Gustavo Senese, Hernán Tomeo
Dramaturgia: Hernán Tomeo
Iluminación - Escenografía - Vestuario: Luis Manuel Mendiburu Elicabe
Fotografía: Enzo Brutti
Asistencia de dirección: Elián Gallese
Dirección: Lucas Finocchi, Hernán Tomeo, José Pollo Canevaro


Sábado 25 de noviembre 21hs/ Domingo 26 de noviembre 19 hs.

Naturaleza Artificial - Danza Contemporánea
Bailarines Intérpretes:
Sofía Diotto, Esteban Irigoyen, Salomé Dascón, Soledad Belén y Yamila Cruz Valla.
Colaboradores: Gabriel Liverani, Ana J. Diaz.
Coreografía y Dirección: Yamila Cruz Valla.
Asistente coreográfica: Fernanda Ranguileo.
Video: Eduardo Camera
Fotos: Guillermo Genitti
Diseño de iluminación: Yamila Cruz Valla
Dirección coreográfica: Yamila Cruz Valla


sábado 4 y 25/23,30hs

Solos, Alejandro Catalán
Sábado 4 de Noviembre- 23:30hs:
Estrella - Malena Moffatt
El Service - Julia Catalá
In Corpus Christi - Patricio Aramburu
Llamá - Mauricio Morando
El Oso Peralta - Verónica Bustos
Fiebre - Eduardo Pérez Winter
Sábado 25 de Noviembre - 23:30hs:
Odette - Natalia López
Mario Rodriguez - Edgardo Castro
Thelma - Irene Sexer
Asesinas - Federico Liss
Bajo el Par - Felipe Llach
O Tío - Gabriel Zayat


Viernes 10 función despedida/ 23hs

Copetines deliciosos
COPETINES DELICIOSOS II - AUTORES DE POR ACÁ.
Sobre textos de Julio Cortazar, José Hernandez, Samuel Eichelbaum, Roberto Arlt, Laura Valencia, Luz Rubio, Sara Gallardo y Luis Gusmán
Presentación gral: Mariana Paccotti

Transmutación, Luz Rubio
El secreto, Mónica Fernandez y Delia Aguinaga
Cosas extraordinarias, Adriana Causa
Casa de Tucumán, María Laura Albariño
Exupery, Delia Aguinaga
La Frontera, M. Amelia Pena, Patricia Rios
Las gemelas, Laura Valencia y Luz Rubio
María Kodama; Adriana Ibarra
El ancla, Laura Valencia y Chiche Salerno
Un guapo del 900, Graciela Bertero y Guillermo Vicente
Dirección: Omar Fantini


Sábado 11 - 21hs: - P U N T U A L

Música - Mister América presenta su sexto disco: "Superacion", una obra intima y profunda con el sello inconfundible de Mister America

sábado 18

LETRAS DE MEDIANOCHE
Ciclo destinado a la difusión de textos y autores de escasa difusión en los ámbitos tradicionales. Textos literarios diversos, teatro leído y semimontado
24: 00 es la hora/Bono Contribución $2


Salas de la Asociación Amigos Taller de Teatro UNLP
Calle 10 Nº 1076 entre 54 y 55

Asociación Amigos del Taller de Teatro U.N.L.P.
PRENSENTA:

Teatro Poquelin
El espectáculo teatral ANITA GARIBALDI, un unipersonal sobre la vida de la mujer de Giussepe.
Martes 21 de Noviembre a las 20,30 Hs
Unica funcion
SELECCIONADA PARA REPRESENTAR A MISIONES EN LA FIESTA REGIONAL DE TEATRO NEA- Noviembre 2006.


EL PROCESO de Franz Kafka – Adaptación Alberto Mediza
40 actores en escena – Dirección: Norberto Barruti
NUEVO HORARIO – SABADOS 21:00 Hs
8 ULTIMAS FUNCIONES
Taller de teatro U.N.L.P
Calle 10 N 1076 e/ 54 y 55 Entrada General: $ 5

Reservas ( desde el miércoles a las 14 hs): 423-2283 /425-7203


Biblioteca Teatral Alberto Mediza presenta:
RAPIDO NOCTURNO, AIRE DE FOXTROT- Una obra de Mauricio Kartun
Con: Walter Zuleta, Laura Laxague y Pablo Pawlowicz
Escenografia: Agustina Bianchi
Dirección: Norberto Barruti
SABADOS – 23:30 Hs – Entrada general $ 5
Reservas a partir del Jueves de 14 a 19 hs.: 423-2283 / 425-7203


EL ALTILLO DEL SUR CASATEATRO
1 nº 1693 esquina 67 La Plata

SÁBADOS 22 HS.

"NO HAY QUE LLORAR" de Roberto "Tito" Cossa
Elenco: Daniel Almirón, Gloria Antonelli, Martín Beluardo, Silvina Librande, Osvaldo Stagnaro y Mimi Torreta
Dirección: César Palumbo
Entrada general $ 6, estudiantes, docentes y jubilados $ 4.-


Sala 420
Calle 59 Nº 886 entre 12 y 13
Reservas: De lunes a viernes de 10 a 14 hs. al tel.: 483-1952. De lunes a viernes de 17 a 21 hs. al tel.: 489-3636

DOMINGO 19 hs y 21 hs. (dos funciones)

NARCISO
Obra de Danza Teatro basada en el cuadro de Salvador Dalí titulado

Viernes – 23 hs.

MENOS PAUSAS. Espectáculo de humor escrito y dirigido por Ruben Monreal.
Elenco Carolina Katz (Bebé) María Virginia Naón (Akira) Alejandro Orduna (Orduna) Actores invitados: Teby Giménez Belén Soldi Agostina Zagaglia Equipo Técnico: Edición musical: Sebastián Aceto Diseño escenográfico y luces: David Figueroa Vestuario: Eugenia Kubli, Olivia Grioni, Mayki Hatrick Fotos: Mario Ruiz / Gráfica: Planeta 6

no more_drama
Funciones: Viernes 17 de noviembre – 20.30 hs.
Sábado 18 de noviembre – 20.30 hs.
Domingo 19 de noviembre – 20.30 hs.
Obra de carácter experimental que propone un espectáculo dramático y emotivo que articula dos temáticas: el Teatro como oficio y su rol social.
Dramaturgistas: The Federal Company (Chile).
Una obra abierta, que se enriquece en su propio devenir. De carácter experimental, no more_drama propone vivenciar el teatro como experiencia ritual. Las escenas se suceden a través de un desarrollo fílmico y fotográfico en el que el público es vital.
Espectáculo dramático y emotivo que articula dos temáticas: el Teatro como oficio y su rol social.
Dramaturgismo:
Compañía “The Federal Company” de Chile.
Intérpretes: Daniela Miranda Daniel González Christian Zamora
Composición Musical: Álvaro Pacheco
Diseño Integral: The Federal Company Giselle Angellotti

Fuente: Diario El Día

jueves, 16 de noviembre de 2006

De cómo traducir los excesos

MUJERES SOÑARON CABALLOS. Foto de la versión de la obra de Veronose cuando se dio en Buenos Aires.

TEATRO : "BUENOS AIRES IN TRANSLATION", EN NUEVA YORK
asón Zinoman THE NEW YORK TIMES Y CLARIN

Women Dreamt Horses (Mujeres soñaron caballos) de Daniel Veronese, es una de las cuatro obras del festival Buenos Aires in Translation (Buenos Aires en Traducción) que se desarrollará en el P.S.122 de Nueva York hasta el domingo. Una mujer de aspecto frágil (April Sweeney) abre la boca para hablar y vomita, ensuciándose de arriba abajo. Los otros cinco personajes con ropa informal que están en escena la miran inexpresivamente mientras se recompone y vuelve a vomitar. Después de correr al baño, se lava la boca, vuelve y repite el mismo repugnante proceso unas doce veces.

Este tipo de exceso absurdo debería preparar al espectador para el resto del festival, que incluye tres familias disfuncionales, dos relaciones incestuosas, múltiples asesinatos, una chica retardada con los pechos al aire, hermanas que forcejean, hermanos que se pegan trompadas, algunas llaves de cabeza y al menos dos personajes que pierden el almuerzo.

Se despliega una variedad de estilos, que van de lo burlesco (Panic, Pánico) al ensueño melodramático (Women Dreamt Horses), de un drama multimedia en donde el pasado se inmiscuye una y otra vez en el presente (Ex-Antwone) a un cuento de hadas futurista (A Kingdom, a Country or a Wasteland, in the Snow, Un reino, país o baldío, en la nieve). Estas obras tienen en común una visión del mundo oscura y a menudo violenta expresada en una puesta agresiva, cruda y con fuerte acento en lo físico. Jean Graham-Jones tradujo las cuatro piezas, y su verboso trabajo en ocasiones puede sonar fuera de tono. Uno tiene la sensación de que los directores a menudo tratan de superar las barreras del idioma y la cultura con puestas desenfrenadas. La idea sería: no se necesita un traductor para explicar el vómito.

Women Dreamt Horses es una obra cáustica sobre tres hermanos y la fracasada empresa familiar, que se desarrolla durante una cena que termina mal. En manos del director Jay Schreib, se convierte en una noche de box. Y los agresivos (y agredidos) actores no juegan a boxear con su propia sombra precisamente. Sus golpes dan en el blanco. Bettina (Zishan Ugurlu) abofetea tantas veces la cabeza calva de su marido, Roger (Jorge Alberto Rubio), que suena como un aplauso, y este le devuelve el favor con una embestida de toro que le debe haber cortado la respiración.

A Kingdom, a Country or a Wasteland, in the Snow, de Lola Arias, drama pos-apocalíptico so bre un terrible secreto familiar, también empieza con una sesión de lucha cuerpo a cuerpo. Las hermanas Lisa (Andrea Moro Winslow) y Luba (Hayli Henderson), que viven en un fría tierra baldía con sus padres, se lanzan por el aire una a la otra por todo el escenario con desenfreno. La rivalidad entre ellas sube de tono cuando, mientras cazan conejos, encuentran a un huérfano a quien ambas ven como posible marido. Este acontecimiento preocupa al padre (James Lloyd Reynolds) cuya cara de culpa indica que sabe algo sobre el huérfano. Arias introduce imágenes de fetos y débiles mentales que se ahogan para prepararnos para los horrores que vendrán.

Ex-Antwone, el sueño fragmentado de una obra de Federico León, a quien en el programa se califica de protegido de esa leyenda del teatro experimental que es Robert Wilson, transcurre en el presente, pero apenas. Antwone, interpretado caprichosamente por Miguel Govea, parece no poder deshacerse de sus sueños, que irrumpen contínuamente durante el día mientras está con su novia, Stella (interpretada con ingenua calidez por Liz Dahmen), que constituye su único consuelo en la vida. Ninguno de estos dos personajes cobra vida en la misma medida que la mujer que aparece en la pantalla del televisor que cuelga sobre ellos, la madre de Antwone (Corrine Egerly), regañona y paranoica.

La pieza quizá más decepcionante fue Panic de Rafael Spregelburd, una tediosa farsa de dos horas producida con el Theater of a Two-Headed Calf (y dirigida por Brooke O'Harra), sobre una familia inculta que revuelve toda la casa buscando la llave de una caja fuerte que perteneció al patriarca que acaba de morir. Comienza como una prometedora parodia de una película de terror, con violines y austera iluminación de rigor, pero rápidamente amplía su mira a prácticamente cualquier cosa en pos de la extravagancia. Podría haber una sátira mordaz sobre los valores familiares burgueses pero, si la hay, se ha perdido en la traducción.

Traducción: Elisa Carnelli

Fuente: Clarín

miércoles, 15 de noviembre de 2006

El aprovechamiento del espacio


DIRECTORES. Lola Arias hace "El amor es un francotirador" y Luciano Cáceres, "Agua 1/407". Luciano Suardi, ausente con aviso.
TEATRO : "INVERSION DE LA CARGA DE PRUEBA"
El ciclo del C.C. Rojas hace trabajar a tres directores distintos sobre un mismo espacio.

Juan José Santillán ESPECIAL PARA CLARIN

Inversión de la carga de prueba" es un término extraído del derecho penal que se vierte como estrategia de una representación teatral. En esta segunda entrega del proyecto curado por Mariana Obersztern, el espacio escenográfico es el punto de partida desde el cual se desarrollan los trabajos dirigidos por Luciano Cáceres, Lola Arias y Luciano Suardi. Cada pieza reelabora el sentido de una instalación —que sirve como soporte escénico de las tres obras— realizada por el artista visual Leandro Tartaglia. En este proyecto, los directores no pueden agregar ni quitar ninguno de los objetos distribuidos en el lugar; deben desarrollar una instancia de experimentación surgida desde el espacio y sus dispositivos.

La primera entrega del Proyecto "Inversión de la carga de prueba", organizado por el C.C. Rojas, se llevó a cabo en setiembre del año pasado. El ciclo, además, formó parte de la grilla del Festival Internacional de Teatro. Participaron los directores Matías Feldman, Guillermo Arengo y Ariel Farace, quienes trabajaron a partir de una escenografía realizada por el artista plástico Miguel Mitlag. Este año el ciclo comenzó con una obra de Luciano Cáceres que realizó en colaboración con el Grupo TintoBa. Se trató de Agua 1/407 (ver recuadro). El director de 4.48 Psicosis y Criaturas de aire, desarrolló la obra a partir de la palabra agua, escrita en una de las cuatro láminas que ubicó Tartaglia en el espacio. "Tuve varios problemas —cuenta Cáceres—, porque me costó muchísimo desarrollar algo a partir del espacio sin un texto previo. Entonces trabajé con las habilidades y los recuerdos que cada actor tenía en referencia a la palabra agua. Es la primera y no sé si la última vez que hago una experiencia de este tipo. "

El ciclo continúa mañana con El amor es un francotirador, co-dirigida por Lola Arias y Alejo Moguillansky. En esta pieza, Arias retoma la actuación y se suma al derrotero sentimental de un grupo de personajes, cuya construcción se entremezcla con componentes biográficos de los actores que los interpretan. "Es una especie de ruleta rusa de corazones rotos —explica Arias—, donde seis personajes se reúnen con una nena de siete años que organiza un sistema de azar. Cada actor pone muchos componentes biográficos para construir su personaje." Arias, que acaba de viajar a Nueva York para presentar su obra La escuálida familia dentro del programa Buenos Aires in Translation, inicia con El amor... una trilogía que estrenará el año que viene.

Luciano Suardi filma entre Madrid y San Luis Tres corazones, la próxima película de Sergio Renán basada en el cuento El taximetrista, de Juan José Saer. Por esta razón el director no estuvo en la sesión de fotos. Suardi, a principios de diciembre formará parte del proyecto con Jálei. "La morfología del espacio —explica el director— me llevó a pensar en una trama policial, a un crimen y su reconstrucción ligado a la manipulación de la verdad. En mi primer contacto con el dispositivo, pensé que era sencillo atravesarlo, pero en el proceso me di cuenta que te impone sus propias reglas, y adaptarse a ellas fue un gran ejercicio". Para Jálei —inspirado en el cometa— Suardi convocó a Mariana Chaud, Elvira Onetto, Fernando Rubio y Laura López Moyano.

Fuente: Clarín

miércoles, 1 de noviembre de 2006

Alejandro Tantanian: "No quería especular con la violencia"

A los 40 años, el autor y director se lució en el teatro oficial con dos obras. Dirigió a Alfredo Alcón y Elena Tasisto en "Recital Ibsen" y acaba de estrenar "Cuchillos en gallinas" en el San Martín, con una tonelada y media de juncos y una alfombra de 200 kg de maíz...

Susana Villalba ESPECIAL PARA CLARIN

En el principio fue el verbo: la luz apareció cuando Dios dijo "hágase la luz". Luego el hombre conquistó —o un Prometeo puso a su alcance— esa posibilidad del lenguaje que es lo que lo hace un hombre: ese animal que también puede ser un semidios. Sofía, la sabiduría intuitiva, oral, se unió al conocimiento racional y masculino, y generó la ley escrita. Pero a medida que se establecieron jerarquías que cifraron y organizaron la distribución del conocimiento, otra mujer, la transgresión, tuvo que bucear en los misterios del lenguaje para volver a encontrar las fuentes que fluyen para todos.

Cada vez que se hace insoportable la tensión entre la ley de una lengua en común y las sensaciones individuales que la desbordan, surge la poesía. De esto habla o calla Cuchillos en gallinas. Un labrador, su mujer, y el molinero, una fábula simple, tan simple como decir la vida, el amor, la muerte, todos sabemos lo que es eso: eso de lo que no sabemos nada.

Podemos hundir el cuchillo en la gallina y no encontraremos el secreto de los huevos de oro, sólo sabremos que lo que parecía estar ahí no está. "La obra cuenta la formación de una poeta —dice Alejandro Tantanian—; el personaje femenino, al heredar la palabra escrita empieza a ser la creadora de las cosas y entonces a separarse de Dios. El autor cuenta una historia y a la vez no, no es un thriller pero lo es; el acento está puesto en el poder de la palabra y qué le pasa a cada personaje con ese descubrimiento. Al final los tres devienen otro, el labrador se hace uno con la naturaleza y el molinero se aleja del lugar cristalizado en que lo habían puesto."



Hay algo bíblico.

Puede ser una parábola bíblica sobre la expulsión del Paraíso, ella es como Eva comiendo del árbol del conocimiento del bien y el mal. Cuando pierde la inocencia y toma conciencia de sí y del otro, ya no es una costilla de su marido. Si la obra pegó en tantos países distintos es porque hay algo de nuestro mito fundante occidental, por eso buscamos cómo respetar la forma original del texto que parece ser de alguien que empieza a hablar.

La obra se conoció como semimontado, dirigido por Paul Miller, cuando fue seleccionada para el programa de intercambio del Festival Internacional de Teatro de Buenos Aires 2003, por el cual dos autores argentinos traducían a dos ingleses y dos franceses, y viceversa. En ese marco vino Harrower a nuestro país a dar un seminario y trabajar en la versión final en castellano con Beatriz Catani, basándose en una primera traducción de Rafael Spregelburd. Ahora Alejandro Tantanian y Martin Tufró realizaron modificaciones sobre el trabajo de Catani.

"La leí en inglés en 1998 —dice el director— y me impactó porque tanto podía haber sido escrita en el Renacimiento como hacía dos días, y además porque era un tema diferente a lo que abundaba en los '90, acá y afuera: conflictos urbanos y con lo urbano, conflictos vinculares y de familia. La decisión de Harrower de ubicarse en el campo permitía una mirada sobre lo humano más desnuda, universal y trascendente. Y se ocupaba de temas que de alguna manera siempre me obsesionaron: la formación de un espíritu artístico, el lenguaje, la individuación. A partir de preguntarse por los nombres, el personaje empieza a ser ella misma y a obrar en consecuencia, incluso con consecuencias terribles."



Un crimen...

Que yo elegí no mostrar en escena, a la manera de la tragedia griega, como también hice en Los mansos, porque esas muertes son más que nada metáforas y para no especular con la violencia. Además, hay muchas cosas que Harrower elige no aclarar, prefiere abrir preguntas y yo respeté eso, echar luz sería tomar partido por uno u otro.



¿En el original también ella canta, como en esta puesta?

No, hay tres monólogos, el primero de oraciones muy sencillas, "El conejo corre", que se van complejizando en el segundo y tercer monólogo porque ella va encontrando la poesía. Yo elegí que comenzara como se inició la tragedia, como cantos a la tierra, luego va hacia la palabra hablada y hacia la escrita. En el momento en que escribe tiene una iluminación, ella mueve el mundo y la naturaleza con las palabras. Por eso también elegí actores con una fuerte formación en lo físico, porque siento que hay algo de masa corporal atada a la tierra, en contraste con sus palabras que aspiran a ir al cielo.



También es marcado el tema de salirse de lo que dicen de uno.

Sí, del molinero se dice que hay que odiarlo; de Williams, que es zoófílo. Ella intenta ver qué hay detrás de lo que se dice, ya que detrás del nombre Molinero hay un hombre. Al final se dicen cosas sobre ella porque ha transgredido.



¿Por qué se elige no decir nunca el nombre de ella?

Es uno de los misterios más lindos de la obra. Cuando ella le escribe su nombre al molinero es un momento límite, un pacto con el demonio del conocimiento; por eso le queda la mancha de tinta grabada. Pero ella se salva y salva al monstruo de la aldea que entonces se transforma en un hombre. Estamos en una época de individualismo pero de poco individuo. Y de poca preocupación por lo espiritual, por eso también me interesa tanto que la gente se acerque al texto, más allá de que guste o no mi puesta. En la obra hay frases que no tienen verbo, como "Cuchillos en gallinas", el eje principal no son las acciones. Nuestras conversaciones en los ensayos giraban en torno a lo místico y creo que mi convicción espiritual es tan fuerte que impregnó la puesta y las actuaciones.



¿Discutió la obra con el autor?

Conocí a Harrower cuando vino y cuando fui yo a Inglaterra, pero no quise preguntarle mucho, lo que monté es mi impresión de la obra, se podrían hacer lecturas diferentes y también estaría bien. Además, él está un poco cansado de que sólo le pregunten sobre ésta y no sobre obras posteriores. Recién con la última, Blackbird, la crítica y el público volvieron a responder con la misma intensidad. Sí lo mantuve informado, le mandé fotos y el blog.

En efecto, en knivesinhens.blogspot.com se pueden ver fotos de los ensayos, del montaje de la escenografía, comentarios, reflexiones, el texto, la teoría de Leibniz que habla del molino como el comienzo de la máquina, párrafos de Las palabras y las cosas de Foucault, y hasta la historia de San Ordano, onomástico que coincidió con la fecha de estreno. Tantanian dedicó esta obra a Inda Ledesma, porque dice que se decidió definitivamente por el teatro ante las puestas de aquella directora y a Roberto Villanueva, recientemente fallecido, que dirigió su obra La tercera parte del mar y a quien recuerda con mucho afecto.

Fuente: Clarín

miércoles, 25 de octubre de 2006

"Sobre el pecho de una mujer": Bella historia de amor

Por IRENE BIANCHI

"Sobre el pecho de una mujer", de Olga Liliana Anzolini, a cargo del Grupo de Teatro Independiente "Buscalunas", integrado por los actores María Inés Uro, Germán Reimondo, la bailarina Fernanda Alessamdro y la cantante Luz Andrade. Músicos en vivo: Marina Arreseygor en violoncello, Natalia Salinas en piano y Pablo Santos en percusión. Diseño de escenografía y vestuario: Laura Melgar. Realización de escenografía: Indio Sánchez. Realización de vestuario: Gonzalo Cicchino. Maquillaje: Claudia Piquet. Música incidental: Alejandro Dinamarca. Iluminación: Alfredo Núñez. Dirección: Olga Liliana Anzolini. Teatro La Hermandad del Princesa, sábados 21 hs.

Antes de aventurar cualquier tipo de análisis o vivisección de esta obra escrita y dirigida por Olga Liliana Anzolini, es lícito destacar que se trata de un espectáculo bello por donde se lo mire o escuche. "Sobre el pecho de una mujer" seduce con una belleza cautivante y misteriosa. El salto al vacío que implica atreverse a combinar actuación, danza, acrobacia, canto lírico y música en vivo, constituye un riesgoso desafío ("sólo para locos", diría Herman Hesse), desafío del cual los integrantes de "Blancaluna" salen airosos.

La trama de la obra parece salida de la pluma de un gótico Edgar Allan Poe: Consuelo, anciana dama viuda de un General, publica un aviso para dar con un joven que escriba las Memorias de su difunto esposo, a partir de unos amarillentos y vetustos manuscritos celosamente guardados en un arcón. La paga es suculenta pero la condición "sine quanon" es que el muchacho permanezca en la vieja casona hasta concluir su labor. El tiempo apremia: la salud de Consuelo es frágil y la Muerte acecha implacable.

El lugar es lúgubre y tenebroso. Unas pocas velas alumbran el altar en el que la anciana reza en latín, como preparándose para el tránsito. El joven escriba - Felipe Montero- se resiste a permanecer en un ámbito tan sombrío, hasta que conoce a Aura, la supuesta sobrina de Consuelo, que lo hechiza con sus encantos. La muchacha opera en él un efecto similar al de las sirenas en los marineros en alta mar. Felipe no puede evitar zambullirse en los brazos de tan bella mujer, que lo atrapa para siempre y se adueña de su voluntad.

La pregunta es: ¿quién es Aura? ¿Se trata de una mujer de carne y hueso o de una alucinación, de un fantasma, de un recuerdo corporizado, de un holograma? ¿Cuál es el verdadero vínculo que la une a Consuelo? ¿Por qué aparece y desaparece de la nada? Esas - y otras tantas -son cuestiones que cada espectador deberá dilucidar por sí mismo.

Lo atrapante de la propuesta de Anzolini es la mezcla de géneros y lenguajes a la que hicimos referencia. La música de Charles Camille Saint-Saens, de Antonin Dvorak y de Félix Mendelssohn, irreemplazablemente interpretada en vivo por Marina Arreseygor, Natalia Salinas y Pablo Santos; la soberbia voz de Luz Andrade (una suerte de cantante-relatora); la sugestiva danza de Fernanda Alessandro en el rol de Aura; la intensidad en las actuaciones de María Inés Uro (Consuelo) y Germán Reimondo (Felipe), todo ello reforzado por el valiosos aporte de escenografía, iluminación, vestuario y maquillaje, suman un producto inquietante, atractivo e interesante, que habla a las claras de un trabajo mancomunado, de una labor de equipo interdisciplinario, de un espíritu de cuerpo, que seguramente debió sortear innumerables obstáculos hasta arribar a buen puerto.

"Sobre el pecho de una mujer": para deleitar ojos, oídos y corazón.

Fuente: Diario El Día

sábado, 21 de octubre de 2006

Letras de Medianoche

sábado 21 de octubre/06

Ciclo destinado a la difusión de textos y autores de escasa difusión en los ámbitos tradicionales. Textos literarios diversos, teatro leído y semimontado
24: 00 es la hora/Bono Contribución $2

Presentación general: Mariana Paccotti

Tránsito, Fabián Fernandez Barreyro
Con: Soledad Belén. Dirección: Fabián Fernandez Barreyro

Los Marsupianos, Mariela Anastasio
Con: Ernesto Meza

Se mira y no se toca, Santiago Serrano
Con: Vanesa Giacci y Sebastián Bertolot

Terapia on the rocks
Con: Adriana Causa y Chiche Salerno

Así las cosas, Luz Rubio

Fragmento muestra taller “El Otro Cuerpo”
Con: Micaela Suarez Dirección y Puesta en escena: Marina Asseretto
Adelanto Copetines II función despedida
La frontera, sobre textos de Luis Gusmán, con: María Amelia Pena y Patricia Ríos. Dirección: Omar Fantini

Iluminación Pollo Canevaro/ Musicalización: DJ Brahman Funk Cero
Coordinación: Patricia Ríos

Próximo Letras de Medianoche
En noviembre es el sábado 18/ presentación de materiales hasta el viernes 10/11

Música/tragos/comidas
La Fabriquera, calle 2 Nº 477/ Te 4212575/ e mail: fabriquera@sinectis.com.ar/
http://usuarios.advance.com.ar/fabrique/

Fuente: elespaciovacio

Letras de Medianoche

sábado 21 de octubre/06

Ciclo destinado a la difusión de textos y autores de escasa difusión en los ámbitos tradicionales. Textos literarios diversos, teatro leído y semimontado
24: 00 es la hora/Bono Contribución $2

Presentación general: Mariana Paccotti

Tránsito, Fabián Fernandez Barreyro
Con: Soledad Belén. Dirección: Fabián Fernandez Barreyro

Los Marsupianos, Mariela Anastasio
Con: Ernesto Meza

Se mira y no se toca, Santiago Serrano
Con: Vanesa Giacci y Sebastián Bertolot

Terapia on the rocks
Con: Adriana Causa y Chiche Salerno

Así las cosas, Luz Rubio

Fragmento muestra taller “El Otro Cuerpo”
Con: Micaela Suarez Dirección y Puesta en escena: Marina Asseretto
Adelanto Copetines II función despedida
La frontera, sobre textos de Luis Gusmán, con: María Amelia Pena y Patricia Ríos. Dirección: Omar Fantini

Iluminación Pollo Canevaro/ Musicalización: DJ Brahman Funk Cero
Coordinación: Patricia Ríos

Próximo Letras de Medianoche
En noviembre es el sábado 18/ presentación de materiales hasta el viernes 10/11

Música/tragos/comidas
La Fabriquera, calle 2 Nº 477/ Te 4212575/ e mail: fabriquera@sinectis.com.ar/
http://usuarios.advance.com.ar/fabrique/

Fuente: elespaciovacio

domingo, 15 de octubre de 2006

Las últimas fotos de Marilyn Monroe para Vogue

Hoy, la revista del diario Clarín publica una interesante historia sobre las últimas imágenes de Marilyn Monroe, en vida. Con una prosa que da vertigo, el secretario de redacción del diario, Norberto Angeletti, sostiene el flash para iluminar la última sesión de fotos que Bert Stern le arrancó a una Norma Jean Baker, ya quebrada.
La nota coincide no sólo con un libro que está por salir sobre la revista que encomendó las fotos a Stern, escrito por Angeletti, sino también con una exposición que se exhibe en el Museo Maillol de París, con 59 de estas fotos.
La eterna sesión de fotos que tuvo que padecer Monroe superó las 2500 imágenes y formó parte de un número de la revista Vogue que apareció en 1962, a los pocos días de la muerte misteriosa de la rubia.

Según el relato de Angeletti, en la revista de Clarín, el fotógrafo no sólo utilizó las típicas palabras que suele imponerse en este tipo de circunstancias para lograr los primeros desnudos de la actriz, sino que se valió de varias botellas de Dom Perignon, para apurar el trámite.
Con una apertura muy interesante de revista que se abre en otra revista, la entrega de imágenes sensuales de Marilyn Monroe brillan por su ausencia.
A continuación te mostramos las fotos de las que se habla en la crónica de Angeletti, pero que no se publican. Todas forman parte de un especial que aparece en el excelente portal francés PixelCreation, del genial Thierry Le Boité.

Fuente: visualmente

sábado, 14 de octubre de 2006

CHICOS : II FESTIVAL ATINA Una panzada de teatro

CUENTOS DE NIÑOS REALES. Por la compañía Le Carrousel, un prestigioso grupo canadiense, país que se destaca en obras para chicos.


Desde el lunes y hasta el domingo 22 se hará este encuentro teatral para niños y adolescentes. Hay elencos locales e internacionales.

Laura Gentile

Desde el lunes y hasta el domingo los chicos porteños podrán darse una panzada de teatro nacional e internacional. Es que la Asociación de Teatristas Independientes para Niños y Adolescentes (ATINA) organiza el II Festival Nacional e Internacional de Teatro para Niños y Adolescentes ATINA 2006.

El Festival contará con la presencia de elencos extranjeros, porteños y del interior del país.

En cuanto a los elencos extranjeros, su selección se centró en una premisa: "que lo de afuera mostrara trabajos y estilos no habituales para la cartelera porteña". Así lo afirma el Director Artístico del Festival, Juan Garff, encargado de la selección.

Entre los espectáculos extranjeros elegidos figuran Cuentos de niños reales, por la Compañía Le Carrousel, un prestigioso grupo canadiense (país especialmente destacado en teatro para niños), que suele montar obras de Suzane Lebeau. "Una autora —explica el propio Garff— que se mete mucho en los conflictos más fuertes de la vida infantil, como la muerte, separaciones en general, la violencia". Para chicos a partir de los 8 años.

Tanto Ha Hamlet, de Markus Zohner Theater Compagnie, Suiza como La Vaca RosamaríaHa Hamlet está dirigido al público adolescente, La Vaca Rosamaría

Por su parte Paracaidistas, de la Compañía Mala Scena, de Croacia es una interesante obra para chicos de dos años en adelante "que muestra cómo se puede hacer algo muy sutil y complejo y ser, sin embargo, perfectamente apto para los más chiquitos". Con una escenografía muy ingeniosa la obra sin palabras se centra en distintas variaciones alrededor de cómo caen las cosas, un concepto que suele "maravillar" a los más pequeños.

Finalmente se podrá ver Circo de Sombras de la Compañía Cachiporra, Uruguay, un grupo fundado en 1973 que "muestra con qué profesionalidad se trabaja también en el tercer mundo".

Entre los espectáculos y elencos nacionales seleccionados están: Cosas de payasos, por el Grupo Papón y Tonino; Elemental, de la Compañía Clun; Calidoscopio, del Grupo Kukla; Cuatro noches, de Puro Grupo; La fila, por la Compañía Mumu Lavac; El soldadito de plomo, de la Compañía Omar Alvarez Títeres; Opereta prima, por el Grupo La Pipetuá; El redondel, por la Compañía El Redondel; Historias con caricias, de Héctor Presa; y Brisas enaguas, del Grupo Jícara.

También habrá espectáculos de Córdoba, como Con bombos y platillos, por el Grupo Cirulaxia Contra Ataca Teatro. De Neuquén La niña invisible, por el grupo Atacados por el art.

Durante el encuentro se realizarán talleres dictados por profesionales argentinos y extranjeros, mesas redondas y debates, que permitirán el intercambio de experiencias.
de la Compañía Paideia, de Brasil, son obras en las que se trabaja mucho sobre el texto. "Algo que no suele suceder tanto en el teatro local —afirma Garff—. Acá hay poca palabra dicha en el teatro para chicos. Sí hay un gran desarrollo de lo lúdico, pero se perdió la dramaturgia más textual". Mientras que es para chicos desde los seis años.

Fuente: Clarín

jueves, 5 de octubre de 2006

Variaciones Meyerhold en La Plata

El Domingo 1 de Abril a las 20hs., se presenta - por única vez en La Plata - Variaciones Meyerhold, de Eduardo Pavlovsky. Este espectáculo formó parte del evento: V Festival Internacional de Buenos Aires. Las entradas estarán a la venta a partir del jueves 15 de marzo de 9 a 11 y de 19 a 21hs en La Fabriquera (no se reservan entradas).

Meyerhold es sin duda uno de los nombres claves de la dirección de escena y la teoría teatral de todos los tiempos. Ligado en un primer momento al Teatro de arte de Moscú dirigido por otro grande del teatro ruso: Stanislavki. Abandonó pronto la vía naturalista para indagar en su propia concepción dramática - que denomino "teatro de la convención conciente" (1913) y sus trabajos experimentales le permitieron desarrollar la teoría de la Biomecánica (1922) un riguroso método de preparación del actor que intenta explotar al máximo sus posibilidades físicas y psíquicas. Meyerhold elaboro a si mismo una dramaturgia revolucionaria e instauro los principios del moderno concepto de puesta en escena. Tardo un tiempo en comprender la revolución pero cuando lo hizo su ardor y su entusiasmo fueron enormes e ingreso en el partido comunista - llegando a ser una figura prominente como militante cultural durante la revolución.

"Variaciones Meyerhold" intenta captar la forma en que este extraordinario hombre de Teatro nos "afecta" a nosotros hoy. Lo que mas nos involucra. Lo que mas nos conmueve. La lucha ardorosa de ciertos principios de su teatro que supo defender hasta el final y que expuso en el primer Congreso de Directores (1939) donde fue extensamente criticado por no adaptarse al realismo socialista - estética que predominaba en esa época.

Lo recordamos: como uno de los hombres mas importantes de teatro del siglo y por su brutal asesinato y el de su mujer, durante el stalinismo.
Allí nos sentimos afectados e involucrados como argentinos: nuestra dictadura también supo sembrar el crimen y la tortura en los defensores de la imaginación y la critica en nuestro país. Allí Meyerhold deviene argentino y allí nosotros devenimos Meyerhold.

Cada función será distinta - no hay texto escrito - Improvisamos sobre las ideas que él defendió y sobre su martiriloquio y crimen final - defendiendo la improvisación creadora en cada función - defendiendo la imaginación creadora como arma revolucionaria en su máxima expresión.

Actúan: Susana Evans, Eduardo Misch, Eduardo Pavlovsky, Martín Pavlovsky
Diseño de vestuario: María Claudia Cure
Diseño de luces: Leandra Rodríguez
Diseño sonoro: Martín Pavlovsky
Asistencia de dirección: Eduardo Misch
Prensa: Adriana Schottlender
Dirección: Martín Pavlovsky

Fuente: Cultura La Plata

domingo, 1 de octubre de 2006

Teatro abierto

PERSONAJES > EL TEATRO SEGUN MARIANO PENSOTTI
Con tres obras en cartel –Vapor, Laura y Los muertos–, Mariano Pensotti se perfila como uno de los directores y dramaturgos más interesantes y prolíficos del momento. Y esto a pesar de que, en sus inicios, quiso ser cineasta. Aunque quizá por eso su trabajo sea tan diferente.

Por Margarita Hernández

Mientras habla, Mariano Pensotti intenta, sin éxito, sacar con la cucharita una ínfima hebra de té que flota en su taza. Aunque no interrumpe su discurso, el movimiento permanece hasta que, segundos más tarde, deposita victorioso la briznita a un costado del plato. Este gesto obsesivo –casi de señora, podríamos decir–, de búsqueda de la pureza en la infusión, no tiene nada que ver con su obra, tan volcada a la mezcla de disciplinas, tan bastarda como el mismo teatro. Mariano Pensotti es un director raro. Tiene una formación en cine y todos sus trabajos en teatro lo dejan ver. Sin embargo, hoy está completamente dedicado a las artes escénicas y es uno de los jóvenes directores-dramaturgos más interesantes y productivos de Buenos Aires; tanto es así que tiene simultáneamente tres obras en cartel: Los muertos, que codirige con Beatriz Catani y fue subsidiada por el Hebbel am Ufer de Berlín; Laura, que codirige con el coreógrafo Luis Biasotto –ambas estrenadas este año–, y Vapor, que ya va por su tercera temporada.

Comenzó estudiando cine, hizo un largometraje en video, varios cortos en fílmico, otro largo que fue subsidiado por Antorchas y que quedó inconcluso, y puso un freno. Ahora cuenta de aquel tiempo: “Hasta los 24 más o menos estuve tratando de hacer cine. Ahora tengo 33. Y la verdad, en un momento se me hizo tan cargoso esto de la plata y gente que necesitás para hacer cine que a partir de ahí empecé paralelamente a hacer cosas en teatro. Cuando me empecé a meter me di cuenta de que en el teatro había un imaginario mucho más amplio”. Y claro. No sólo con precariedad y fans de Bertolt Brecht se encontró Pensotti sobre el escenario. “Entendí que ahí había una posibilidad de construir mundos más atractivos, textualidades de mayor complejidad y un imaginario más amplio y poético de lo que suele ser el lenguaje audiovisual más clásico. Lo que me gustó del teatro fue eso, un lugar de cruce de disciplinas, de la literatura, las artes visuales y elementos narrativos del cine, todo junto.” Y una vez instalado en territorio teatral, a Mariano Pensotti no le fue tan mal. Viajes, becas y subsidios confirmaron su decisión. Primero a Italia becado por la Unesco para estudiar dramaturgia. Más tarde a España, subsidiado por Casa de las Américas. A la vuelta de esos destinos comenzó su trabajo en Buenos Aires.

UNA, DOS, TRES

Poco tienen en común el trío de obras que Pensotti tiene en cartel simultáneamente. Tal vez lo único que se podría decir es que las tres, como en una estructura de mamushkas, encierran historias pequeñas dentro de una mayor. El dice que se trata de sinopsis de películas. O de trailers de futuras películas que aparecen infiltradas en la narración. Y hay algo de eso. Vapor, por ejemplo, es una sucesión de monólogos que se dicen en un lugar no muy determinado, una ruta, un hotel bajo un cielo estrellado, espacios abiertos. Ahí, un cowboy, una mujer tan patética como fatal y un joven en traje, son los personajes que alternadamente van contando cosas que les pasaron y que no consiguen olvidar. Entonces se cuenta la vida de una mujer que trafica droga dentro de su pierna ortopédica, un joven que es aficionado a visitar moribundos en los hospitales y un cowboy que sueña con ñandúes incendiados corriendo por la pampa, aunque él, claro, nunca haya estado ahí. Relatos que poseen un sustrato cinematográfico, que recuerdan el cine americano de los ’70, las road movies, Wim Wenders en esa época.

En Los muertos, la relación con el cine marcha por otro carril. Esta obra, que codirigió con Beatriz Catani, se propuso desde un comienzo reflexionar sobre las formas en que se representa la muerte en la Argentina. Una vez elegido ese tema y puestos a buscar información, surgió un actor, Alfredo Martín, que había hecho en su juventud una obra donde adaptaban el cuento de James Joyce, “Los muertos”. Entonces decidieron incluir la reconstrucción de esa obra del pasado donde muchos de los actores están (y sí) muertos, y Alfredo Martín, básicamente, tiene que interpretar todos los papeles. Al mismo tiempo, o de forma alternada, un televisor proyecta imágenes documentales de distintos cementerios de Buenos Aires, hay entrevistas, imágenes de muertes en el cine argentino, entre otras cosas. En su aspecto de “semimontada”, la obra intenta comparar la muerte con el teatro. Así equipara, por ejemplo, el trabajo de los sepultureros con el de los utileros de una sala teatral. ¿Qué significa la muerte y cómo se representa en una cultura de cuerpos ausentes como la nuestra? Es la pregunta que la obra intenta responder. Curiosamente, Pensotti define Los muertos como un “documental en vivo”.

La tercera puesta de este joven director es Laura, un trabajo para el que fue convocado por el IUNA (Instituto Universitario Nacional de Artes) para dirigir la residencia de los alumnos de teatro que egresaban este año. La dirección está compartida con Luis Biasotto, coreógrafo y bailarín de la compañía Krapp. Mariano aceptó sin conocer al grupo de alumnos y cuando llegó el primer día, para su sorpresa, se encontró con un varón y nueve mujeres. Después de improvisar durante algunos meses, entre coreógrafo y director decidieron utilizar esa asimetría a su favor y contar la historia de un hombre obsesionado con el recuerdo de quien fue su novia –Laura– y que contrata a actrices para intentar representar los momentos felices de la relación. “Nos quisimos hacer cargo de que ellos están empezando a ser actores al final de la carrera; a mí me interesaba que quede presente que son mujeres que están actuando”, explica. Laura es el relato de un hombre que quiere convertirse en flashback. Algo que sólo en un escenario puede suceder.

LA GENERACION

Es probable que lo único que tengan en común las tres obras sean la pluma y el ojo de donde salieron esas historias y esas imágenes. Un chico que piensa el teatro con palabras del cine o de la plástica o inclusive del rock. Algo que él entiende casi como una marca generacional. “Veo que hay una camada de directores y dramaturgos de los que me siento cerca. Pero no sé si hay una estética común, más bien creo que no. El concepto de generación no está tan metido en nosotros. Creo que ésos son nombres casi de marketing, como lo fue ‘nueva dramaturgia’ hace unos años. Lo que nos hace diferentes es que nuestra generación pasó por todos lados; antes era gente que venía de la dramaturgia o eran actores que se ponían a escribir. Ahora hay personas que vienen de las artes visuales, o de la danza, o de la poesía, o del cine como es mi caso; hay una mezcla más rara. Nuestro punto de partida o nuestros intereses son mucho menos teatreros de base”, define, y es exactamente eso lo que vuelve su mirada interesante.

Como si quisiera confirmar estas marcas autorales, generacionales, Pensotti cuenta que la obra que está preparando para el año próximo será más bien musical y la codirigirá con Ana Frenkel, bailarina, coreógrafa, hermana del cantante de La Portuaria y una de las fundadoras del grupo de danza-teatro El Descueve. ¿Qué saldrá de esta nueva mezcla? Pensotti se ríe y no agrega nada más. Un poco de misterio para esa fusión tan impura. Todo lo contrario del té, ya sin hebras, pero helado, que no deja de tomar.

Los muertos, en El Camarín de las Musas, Mario Bravo 960, viernes a las 22.

Laura, en El Portón de Sánchez, Sánchez de Bustamante 1034, domingos a las 20.

Vapor, en Espacio Callejón, Humahuaca 3759, sábados a las 22.

Fuente: Radar

sábado, 30 de septiembre de 2006

Mister America - Nada Bueno

Del dvd Mister America Develado .Grabado en vivo entre el 23 y 30 de Setiembre de 2006 en el teatro La Fabriquera de la ciudad de La Plata - Argentina. http://www.misteramerica.com.ar


Mister America - Superacion

Recital de Mister America interpretando el tema Superacion.Grabado en um recital Setiembre 2006 en La Fabriquera.Del Dvd Mister America- Develado. Ciudad de La Plata.www.misteramerica.com.ar


viernes, 22 de septiembre de 2006

Lisístrata, en versión muy festiva

Paula Rasenberg, como Lisístrata, y sus mujeres atenienses

Lisístrata , de Aristófanes, en versión de Rodolfo Roca. Con Paula Rasenberg, Inés Cejas, Inda Lavalle, Tamara Kiper, Rita Armani, Ana Scannapieco, Vanina Montes, María Colloca, Magdalena Grondona, Malisa Hermida, Manuel Vignau, Lautaro Perotti, Lisandro Penelas, Diego Faturos, Gonzalo Ruiz, Máxime Seuge, Juan Manuel Camara y Jonathan Zak. Colaboración artística: Rita Armani. Diseño de luces: Omar Posemato. Vestuario: Florencia Lamanna. Música original: Federico Marrale. Coreografía: Marcelo Cartes. Asistente de dirección: Laura Tentori y Joana Rija. Dirección: Claudio Tolcachir. Funciones: los viernes, a las 21.30 y a las 23.30, en Timbre 4, Boedo 640. Teléfono: 4932-4395.

Nuestra opinión: muy bueno

A Lisístrata, a Calónice, a Mirrina, a Cinesias y toda la banda de espartanos y atenienses, el barrio de Boedo le sienta bien. Sí, no hay con qué darles. Allí, al fondo de un largo pasillo donde está ubicada la sala Timbre 4, Claudio Tolcachir, el mismo que el año pasado montó La omisión de la familia Coleman , ahora se largó con una inteligente vuelta de tuerca de Lisístrata , el texto de Aristófanes estrenado, según dicen y deducen algunos estudiosos, hace 2418 años.

En esta versión a cargo de Rodolfo Roca, el mismo de Paraísos olvidados , la trama planteada por este gran poeta cómico de la antigüedad explota en sentidos. En la puesta de Tolcachir y en la actuación de cada uno de los intérpretes, la obra toma constantes giros que hacen que nunca disminuya su ritmo. Por eso podrán estar hablando de algo lejano en el tiempo, pero, sin embargo y sin necesidad de las típicas traslaciones a la actualidad, la trama es sumamente efectiva.

Veamos un poco. La obra cuenta la historia de una tal Lisístrata (o Lisis, como la llaman en este montaje). Ella, cansada de lidiar con los males de la guerra, reúne a otras mujeres de su pueblo y a las mujeres de los pueblos beligerantes y las compromete a abstenerse de mantener relaciones sexuales con sus maridos hasta que no se declare la paz. Simultáneamente, estas chicas de armas tomar se apoderan de la ciudadela y del control del dinero. Claro que, con el control en sus manos y con el desafío de mantener la abstinencia sexual, el descontrol acecha en un bando como en el otro y hace estragos.

Trasladado a escena por esta gente, por momentos el espectáculo apela a gags al mejor estilo inocentón de Pepe Biondi. Claro que, de buenas a primeras, Lisis y sus chicas se parecen a Roxie y Velma, las protagonistas de Chicago , cuando bailan según las directivas de Bob Fosse. En otros momentos, tiene algo de El gato de Verdaguer en la versión más guarra de Roberto Pettinato. Por la energía que contagia, cierto delirio constitutivo de la obra y la resolución en lo que hace a la producción, bien podría ser un montaje del cordobés Paco Giménez. Todo esto, imaginemos, con la estética de un café berlinés decadente que acecha por ahí.

En otras escenas, el montaje es un thriller en los que las idas y venidas no disminuye en intensidad con personajes que todo el tiempo están lidiando con sus propias contradicciones, sus deseos sexuales más primarios y grandes ideales escritos en mayúscula. Todo muy licuadito, con tonos contrastados para marcar más la cosa.

El, ellas y ellos

Para que el cóctel tome cuerpo, Claudio Tolcachir, el mismo que el año pasado arrasó con los premios que están en oferta, juntó a algunos actores de los que integraron La omisión de los Coleman (trabajo que los sábados y domingos se presenta en la misma sala) y convocó a otros. Así armó una troupe de 18 intérpretes que da para todos los gustos. Coralmente, el trabajo es sumamente compacto y cada uno de ellos se suma al juego propuesto con convicción, delirio, desparpajo y talento. Y como hace unos dos meses que la obra comenzó su ruta, Lisístrata ya superó el típico proceso de ablande.

Entre el elenco es justo destacar las actuaciones de Paula Rasenberg, como Lisístrata; Inda Lavalle, como una de las chicas incontrolables, y Lautaro Perotti, como Cinesias. Estos dos últimos ya habían brillado en La omisión... y acá demuestran que aquello fue mucho más que una pegada.

El combo se completa con el diseño de luces de Omar Posemato, el vestuario de Florencia Lamanna, la música original de Federico Marrale y la coreografía de Marcelo Cartes. Cada uno de ellos hace que esta vieja casona del barrio de Boedo se convierta en la mejor caja de resonancia para este texto clásico que, a priori , puede generar cierta distancia. Por suerte, la rigurosa dirección de Claudio Tolcachir y la versión de Rodolfo Roca toman con mucho rigor y libertad la obra y montan una verdadera fiesta.

Alejandro Cruz

Fuente: La Nación