En la gobernación de La Rioja negaron ayer que exista una decisión de expropiar la finca Samay Huasi. "No hay intención de expropiar el predio", afirmó ayer, en diálogo con este medio, Daniel Valles, secretario privado del gobernador Beder Herrera.
"Hubo una mala interpretación", dijo Valles, en referencia a la entrevista publicada el domingo por una agencia informativa, donde el mandatario riojano hablaba de esa posibilidad.
"(El gobernador) es una persona muy directa, y si tuviese en mente una determinación de ese tipo, las primeras personas en enterarse serían las autoridades de la Universidad de La Plata", aseguró.
Asimismo, aclaró que la "mala interpretación" podría radicar en que "se habló de expropiaciones en Chilecito (la ciudad donde queda la finca que perteneciera al fundador de la UNLP, Joaquín V. González), pero con el fin de destinarlas a producciones de vid, tomates y pimientos".
CARTA DOCUMENTO
En otro orden, ayer se conoció la carta documento que el presidente de la Universidad, Gustavo Azpiazu, le envió al gobernador riojano. Dice: "Ante las versiones periodísticas que se le atribuyen (...) donde Usted sostendría que la Universidad Nacional de La Plata cedió a un sindicato el predio de Samay Huasi y que "hemos visto que la UNLP está abandonando el museo y el predio" (...) como así otras inexactitudes y falacias (...) todo lo cual agravia a la institución que presido, (lo) intimo para que en el plazo de 72 horas ratifique o rectifique la veracidad de la publicación y la pertenencia de sus dichos". Sobre el final de la nota se invita al gobernador a recorrer las instalaciones de la finca.
Una finca histórica
Chilecito, la segunda ciudad más importante de La Rioja, inspiró la obra más conocida de Joaquín V. González, titulada "Mis Montañas". Y "Samay Huasi" -ubicada en esa localidad riojana- fue la finca y lugar de descanso del fundador de la UNLP.
Llamada en su origen "La Carrera", perteneció al minero inglés William Treolar, quién vendió sus 17 hectáreas al doctor González en 1913.
La finca posee un museo de Arqueología, una biblioteca y una galería de cuadros de artistas de renombre internacional.
La casona es de estilo colonial, con amplias habitaciones que dan a una típica galería, y un comedor espacioso y confortable. La rodea un gran patio cubierto de enredaderas y de allí hasta el pie del cerro se llega por un camino que atraviesa un huerto con árboles frutales donde esta ubicada la pileta.
Samay Huasi es propiedad de la Nación y está destinada a la UNLP por ley nacional. Es también casa de descanso para artistas, escritores, estudiantes, jubilados y para todo público.
Fuente: El Día
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