Es por lo que deben atravesar discapacitados, ancianos y mujeres con niños pequeños cuando caminan por las calles céntricas de la ciudad. ONG locales relevaron sitios en busca de este tipo de barreras y, entre otros lugares, las hallaron en el IOMA.
Caminar por las calles de La Plata muchas veces puede convertirse en una trampa, principalmente para las personas que tienen alguna discapacidad. Veredas rotas y ausencia de rampas son algunas de las trabas con las que se topan tanto no videntes como personas que andan en sillas de ruedas. Pero no son los únicos que las padecen, ya que también pueden ser un peligro para ancianos, madres con niños pequeños y embarazadas.
Ante esta problemática que afrontan muchos platenses en su vida cotidiana, ONGs de nuestra ciudad llevan adelante el proyecto denominado Relevamiento de Obstáculos. Se trata de una iniciativa que tiene como objetivo detectar cuáles son las falencias arquitectónicas en calles y dependencias estatales, darlas a conocer públicamente a través de fotografías y hacer un reclamo ante autoridades municipales y de la Provincia.
Si de colmos hablamos, paradójicamente los accesos al IOMA -que es la obra social más importante de la Provincia- y al Servicio de Colocación Laboral Selectiva (Seclas) -que es una dependencia del ministerio de Trabajo bonaerense para la selección laboral de personas con discapacidad- tienen sus trabas.
“Es realmente complicado”, afirmaron desde las ONG Ir por la Senda y la Asociación Discapacitados En Marcha (ADEM), que llevan adelante el relevamiento.
“IOMA en ninguna de sus esquinas tiene rampa para acceso de discapacitados motrices, al igual que el Seclas. Y ni hablar del tránsito de calle 7”, expresó Pablo Pérez de Ir por la Senda.
Por su parte, Daniel Kalbermatter, de ADEM, señaló a Hoy que por la zona de 7, 42 y 41, no está señalizado un estacionamiento específico para personas discapacitadas. Y otro punto son las veredas de esas zonas “que se encuentran en un estado lamentable”.
Por eso, ambas asociaciones afirmaron que continuarán relevando calles del casco urbano y, principalmente, dependencias ministeriales, para reconocer aquellas donde haya barreras arquitectónicas y buscar soluciones para toda la comunidad.
Presupuesto Participativo
Desde las ONG Ir por la Senda y la Asociación Discapacitados En Marcha (ADEM), que impulsan la iniciativa para relevar obstáculos en la vía pública y en edificios, indicaron que esta semana presentarán una propuesta al Concejo Deliberante.
Se trata de un proyecto de ordenanza donde sostienen que “el Presupuesto Participativo debe contemplar el derecho de los discapacitados de forma integral y segura”.
Por eso, proponen que “el 4% del total del monto presupuestario destinado al Presupuesto Participativo corresponda por ordenanza a obras relacionadas al mejoramiento de la calidad de vida de los discapacitados con un seguimiento desde el Concejo Deliberante de la ciudad”.
Según manifestó Daniel Kalbermatter, de ADEM, además de las barreras para andar por el centro o acceder a lugares, otro problema es el transporte público de pasajeros. “Hay una ley que establece que los micros deben tener rampas y muchos no la tienen. Por eso vamos a hacer un reclamo al Concejo”, concluyó.
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