Para Hugo Irureta todo es Jujuy. Allí creó la fundación que lleva su nombre y está dirigida a la "promoción del arte y la cultura en el noroeste argentino" y más tarde inauguró, el 30 de enero de 1988, un museo de arte ubicado en la ciudad de Tilcara. La pasión del artista por esta provincia se debe a la emoción que le genera "todo el paisaje: el cielo, las estrellas, la tierra, todo en Jujuy es un mundo distinto, yo estoy en Tilcara desde el año '87 y uno no se cansa de gozar de esa paz que hay allá y que no se encuentra en otros lados", le contó Irureta a Diagonales.
El pintor llegó el viernes pasado a La Plata, para estar presente en la inauguración de su muestra en las salas 2, 3, 4 y 5 del Museo de Arte Contemporáneo Latinoamericano(Macla), ubicado en el Pasaje Dardo Rocha (50 e/ 6 y 7).
"Estoy exponiendo obras que tienen que ver con la cultura amerindia, yo conozco la Quebrada de Humahuaca desde 1960 y nunca he dejado de frecuentarla", dijo en referencia a sus producciones, que permanecerán en el museo platense hasta el 23 de mayo junto a los trabajos de Víctor Montoya, de la serie “La danza del Universo”, también inspirados en la geografía jujeña.
Al momento de ampliar su comentario sobre la selección de piezas que trajo para mostrar en nuestra ciudad, Hugo Irureta explicó: "trato todos temas de la cultura andina. De todas las formas de la vida en el aspecto artístico, que están contenidas en el cilindro, la esfera, el cono. La geografía del lugar está representada en las pinturas, son una remembranza, una repetición, pero una variedad personal del artista en la representación". Y agregó que el intentó e intenta "ser versátil en el diseño y ser depurado en el artesanado, porque la plasmación tiene que ver con las mutaciones del hombre en el desarrollo de la elaboración. La elocuencia de las obras está dada por el color, la forma, los espacios, respetando las tonalidades de la tierra donde el hombre andino se desarrolla. Aquí, la forma y el color tratan de representar los albores fecundos de la naturaleza, esa modalidad trata de ser articulada por el artista, en este caso por mi expresión".
–¿Y cuál sería su expresión en estas obras?
–Yo espero que realmente mis obras representen esta tierra, mi intención es representar eso para el entendimiento de todos. Yo no trato de ser cósmico, trato de plasmar la expresión del hombre nativo, sin repeticiones ni en desacuerdo con lo que está ahí, busco expresar las apachetas, el terruño, los paisajes.
Su lugar. "Fundé un museo que en la actualidad tiene 12 salas y 230 obras en exposición permanente", enumeró Hugo Irureta, en referencia al espacio de arte que lleva su nombre y que funciona en la esquina de Belgrano y Bolívar de la ciudad jujeña de Tilcara. Este lugar, que abrió sus puertas en 1988 con la colaboración de María de las Mercedes Ramírez, no significó la primera experiencia del artista frente a la fundación de Museos, porque algunos años antes atravesó situaciones similares: en 1980 creó el Museo de Artes Plásticas de Animaná (Salta), al cual donó 20 obras de artistas argentinos de su propiedad, y ese año repitió lo mismo en el Museo de la Casa de la Cultura de la Paz (Entre Ríos), donde entregó 31 obras de autores argentinos, incluyendo una de su autoría.
Su estadía es alternada en dos puntos del país: "yo vivo poco en La Boca, generalmente en diciembre me instalo ahí, y en Tilcara estoy más de ocho meses al año. Mi vida es el Norte, acá en La Boca tengo un departamento cerca del río; antes venía a pintar a mi taller pero acá no trabajo más, vine para presentar la muestra, pero el miércoles me vuelvo", aclaró Irureta y dejó bien claro cual es el único lugar en el que desarrolla su actividad artística.
–Usted fue miembro fundador del Grupo Buenos Aires, Grupo de los Nueve y del Grupo de la Ribera. Si hoy tuviera la oportunidad de armar algo, ¿hacia dónde apuntaría?
–Sinceramente, yo no tengo ganas de pintar otra cosa que no sea el norte. Incluso tengo obras acá, alrededor de 60 o 70 trabajos, que no se expusieron nunca y que son de temas del norte. Ya toda mi vida es el norte. Como vengo diciendo: desde el año '87 que me instalé acá, no pinto ni quiero pintar otra cosa.
La original mirada de Hugo Irureta sobre una tierra tan querida para él como es la jujeña, podrá conocerse en las instalaciones del Macla, que expondrá sus trabajos de martes a viernes, de 10 a 20, y los sábados y domingos, de 14 a 22, hasta el 23 de mayo y con entrada gratuita.
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