Reclamos por deterioro en accesos al Teatro Argentino de La Plata

VANDALISMO Y ABANDONO

Vecinos piden limpieza y reparación del mobiliario

Los accesos al Teatro Argentino están en la mira de los vecinos al presentar un marcado deterioro. Suciedad, pintadas, pegatinas, fuentes dañadas y cazuelas sin árboles conforman un panorama preocupante.

Los actos constantes de vandalismo sumado a un evidente descuido en materia de limpieza y mantenimiento, son materia de reclamo de quienes viven en los alrededores del complejo cultural.

Una de las vecinas, que se identificó como Aida González, de 10 entre 51 y 53, dijo que "todos los días rompen algo. Patinan los chicos y no hay controles, razón por la cual todas las tardes en la fuente de 10 y 51 se pierde algo".

"Es deplorable el estado de la fuente de la calle 10. Todo el mundo ve cómo la destruyen y nadie hace nada. Además, los grupos de jóvenes hacen lo que se les antoja y a cierta hora de la tarde ya no se puede cruzar por la plaza seca, ya que el clima se pone bastante denso", dijo otra vecina que se comunicó con este diario.

Además, hay algunos sectores de las escalinatas de la entrada por calle 51 que están tapados de residuos; las veredas presentan roturas y con los pedazos de baldosas hay que hacer malabares para no llevárselos por delante.

Desde hace varios meses, en las inmediaciones de toda la manzana que ocupa el Teatro Argentino, se agrupan jóvenes que se desplazan en patinetas o skates, cuestión por la que los vecinos del Teatro Argentino apuntaron que "están destrozando todos los umbrales de mármol, donde suben y bajan con sus patinetas continuamente, lo que genera daños todos los días. Antes había algunos días en los que se reunían, pero ahora están todas las jornadas y parece que no hay quién los frene".

PINTADAS

Además, en las paredes del edificio se ven pintadas y grafitis, y los vecinos solicitaron "la pronta presencia de quienes deben velar por el cuidado, integridad y limpieza de estas instalaciones. Alguien debe hacerse cargo y no permitir que se destruya algo tan preciado, como es el Teatro Argentino".

Otros vecinos apuntaron que "a pesar de que la comisaría primera está en frente, los jóvenes no tienen límites y hacen lo que se les ocurre a plena hora de la tarde".

Los pisos manchados, casi en forma crónica, con aceite y pintura; la falta de lajas; cazuelas vacías en donde deberían existir retoños de tilo, más farolas destruidas y cañerías destruidas completan un paisaje desalentador.

"No nos animamos a invitar gente a pasear por el Teatro porque es muy feo el panorama que se ve en los alrededores y creemos que podrían mejorarlo con un poco de voluntad", dijo Sergio Ovando, quien reside en las inmediaciones del complejo.

Desde el Teatro Argentino ayer no respondieron a las consultas realizadas por este diario.

Fuente: El Día