sábado, 10 de abril de 2010

Babilonia, el clásico grotesco del siglo XX, una puesta teatral de Norberto Barruti

Sábado a las 21, en 10 entre 54 y 55 de La Plata

El taller de Teatro de la Universidad de La Plata presenta la obra de A. Discépolo

El taller de Teatro de la Universidad Nacional de La Plata, a las 21, Babilonia, una hora entre criados, de Armando Discépolo en la Sala de la Asociación Amigos del Taller de teatro de la UNLP (10 entre 54 y 55).

Con las actuaciones de Alicia Julianez, Laura Lago, Laura Otero, Morena Pérez, Sonia Simó, Mónica Wlasiuk, Ignacio Ardaiz, Ricardo Berenguer, Adrián Di Pietro, Omar Gioiosa, Horacio Martínez, Oscar Molinari, Ariel Perera, Gustavo Sala Espiell y Oscar Sierra, con dirección de Norberto Barruti y la escenografía a cargo de Quique Cáceres.

Babilonia, es un clásico del género grotesco criollo iniciado por Armando Discépolo en el siglo XX.
En una casa de nuevos ricos de Buenos Aires, durante la segunda década del siglo XX, un grupo de criados inmigrantes y un mucamo criollo atienden en la fiesta de compromiso de la hija de los dueños. En el transcurso de la noche, se van revelando, en el sótano donde se desarrolla la acción, diferencias, enfrentamientos, secretos, miedos, trampas, coqueteos, traiciones y demostraciones de lealtad entre los sirvientes. Todos ellos trabajan hasta el agotamiento y luchan por salir de ese sótano o, al menos, por conservar sus puestos a cualquier precio.

Retrata la desesperante situación que vivieron millones de inmigrantes cuando llegaron a la Argentina, llenos de esperanzas. La lucha por el dinero, los espacios reducidos, la incomprensión del lenguaje y el cruce de dialectos, son los temas que surgen a partir de esta obra que con maestría Armando Discépolo supo transmitir.

"Babilonia es una obra de los hermanos Discépolo, Enrique Santos y Armando- comentó la actriz Laura Lago a Diagonales-. La idea original es de Enrique y Armando le dio una estructura teatral que eso es lo que trabajamos nosotros en el taller de teatro de la Universidad. Tuvo su estreno en 1925 y es una obra en la que trabajamos el sentido trágico que tiene la obra.

Como parte de ella, el argumento es una hora entre criados. Donde están los de abajo de una gran casa, una mansión de Buenos Aires, todos criados son sirvientes. Y en la parte superior de la casa, están los otros, los patrones. Surge una intriga que enfrenta a los de abajo con los de arriba y a los de abajo con los de abajo. Ese es el argumento principal que cuenta la obra.

También trata el tema de la inmigración, que se puede trasladar a la actualidad desde otro ángulo. Desde otro lugar, es la misma temática y está bueno porque una obra que data del 1925 se puede contextualizar con la situación actual y además entretener", sintetizó Lago.

"Desde diciembre del año pasado, cuando se hizo la audición pública y se armó el casting, ahí comenzamos los ensayos -prosiguió la actriz platense- se hicieron los pre- estrenos a fin de año y ahora hacemos el estreno con la idea de presentarla todos los sábados de aquí en adelante".

–¿Cómo es su personaje?

–Mi personaje es uno de los sirvientes, de los criados, se llama Lola. Es gallega y es la mujer de José. Esta familia junto a otras, comparten un sótano con otros inmigrantes, algunos criollos. La obra habla del momento histórico de la Argentina, donde la ciudad se componía con gran parte de los inmigrantes que venían a hacerse “La América”, aunque algunos la hicieron y otros la padecieron.

–¿Ya tuvo la oportunidad de trabajar con Barruti anteriormente?

–Trabajé con él en el año 1986 cuando se creó el taller de Teatro de la Universidad. Comencé unos talleres a través de una convocatoria pública realizada desde la universidad pero abierto a todo público. Se presentaron alrededor de 400 personas, luego empezó a hacer producciones teatrales y yo participé en una. Para esta obra también me presenté para el casting.

–¿Todos los actores pasaron por el casting?

–Me parece que había personajes que ya estaban definidos, porque también se buscaba la presencia del actor y algunos aspectos físicos. También la voz y demás. Algunos personajes ya estaban pensados.

–¿Qué rescata de su trabajo con Barruti?

–Para mí es un gran conocedor de los géneros teatrales, no lo digo yo solamente es un reconocimiento público que hay de él. Es un conocedor del género como intelectual y practicante, los procedimientos técnicos y artesanales de la puesta en escena. Él tiene un modo de transmitir estos saberes muy claros para los actores en donde el actor, si tiene formación, lo aprovecha y lo entiende y si no tiene formación, también puede hacer una experiencia. Eso me parece muy rescatable no sólo actoral sino también culturalmente hablando. Tiene una visión y una comunicación con el público, para mí, muy interesante porque por ejemplo, sus convocatorias de público siempre llaman mucha gente, y eso se ve en su trabajo, y como dice: “trabaja para el querido público”.

Fuente: Diagonales

No hay comentarios: