CONCIERTO EN EL TEATRO COLISEO PODESTA DE LA PLATACon el tenor Rubén Martínez como solista se interpretará mañana bajo la dirección de Andrés Bugallo
En un homenaje a su autor, en La Plata se representará la tradicional "Misa Criolla", una de las obras cumbre de la música popular argentina creada por el recientemente fallecido Ariel Ramírez. Con la actuación del tenor Rubén Martínez como cantante solista y bajo la dirección general de Andrés Bugallo, la cita es mañana, a las 20, en la sala del teatro Coliseo Podestá, 10 entre 46 y 47.
El espectáculo, que se pensó especialmente para conmemorar también la Semana Santa, contará también con la participación de los conjuntos vocales de la Fundación Catedral y Musiké; y la orquesta incluirá charango (Raúl Palavecino), piano (María Constanza Finochi), guitarra (Joaquín Molejón) y percusión (Sebastián Salinas). En total habrá alrededor de 100 artistas en escena dispuestos a encarar el mejor homenaje posible para su autor.
En la primera parte del espectáculo, Rubén Martínez interpretará canciones argentinas de Carlos Guastavino, Gilardo Gilardi y Alberto Ginastera, entre otros grandes referentes de la música popular. Después interpretará algunos clásicos como "La hermanita perdida", en conmemoración de los Veteranos y Caídos en Malvinas, y la memorable "Alfonsina y el mar". En la segunda parte, en tanto, se dará lugar a la versión original de la "Misa Criolla".
"Ariel Ramírez fue una persona de una clara formación clásica pero que se dedicó a la música popular. Era una persona muy abierta, tanto espiritual como musicalmente", sostuvo Rubén Martínez quien tuvo la oportunidad de compartir un escenario con el artista cuando, hace ya 20 años, participó de una "Misa criolla", dirigida por él: "Fue en Estados Unidos, en San Francisco. Yo formaba parte del coro y como solista estaba José Carreras. Esta presentación fue transmitida a nivel mundial", recordó Martínez sobre el primer contacto que tuvo con estos dos grandes artistas.
PROYECTOS DEL TENOR
Mientras prepara el concierto de mañana, el tenor Rubén Martínez ya se encuentra trabajando en "El día que Schumann conoció a Chopin", la obra músico-teatral que próximamente estrenará en la ciudad en conmemoración del bicentenario del natalicio de estos grandes artistas. Creada por el mismo Martínez, la pieza narra el encuentro imaginario e histórico entre Frederick Chopin, Robert Schumann y su inseparable compañera Clara Schumann, quienes, estando bajo la sombra de Bach, Mozart, Beethoven y Schubert, entre otros, no creían que su música podría trascender; se consideraban simples compositores de pequeñas obras o solo virtuosos del piano.
Las obras serán ejecutadas y teatralizadas por pianistas y cantantes de formación clásica y reconocida trayectoria que aceptaron el gran desafío de interpretar a estos grandes artistas y no sólo desde aquello que saben hacer, como es tocar el piano, sino también verbalizar y teatralizar sus vidas.
"Cuando escribí esta obra sólo pensé en el público tanto neófito como erudito y en aquellos que sientan la necesidad y curiosidad de entender por qué, dos siglos después, estos nombres siguen teniendo vigencia. Siendo el actor el principal el piano que, de la mano del hombre, hacen una dupla perfecta", contó Martínez sobre la obra que tiene estreno previsto para junio y en la que él participará como tenor, bajo el rol de "Ulrich", y Paula Almerares, como soprano, será "Briggite". El elenco se completa con Néstor Villoldo (actor), Ana María Haramboure (actriz) y los pianistas Nicolás Carrasco, Alan Kwiec, Ana Cháves, Franceso Bianchi (7 años), A. Pelaes y A. Panizza.
Difundir lo clásico
Otro proyecto que reúne a Rubén Martínez y Paula Almerares es la creación de una asociación sin fines de lucro cuyo objetivo principal sea la difusión de la música clásica. "La idea es llevar este tipo de cultura a otros lugares; queremos acercar la música clásica a la familia. Hacer que no parezca inalcanzable", contó Martínez sobre este plan en el que ya están trabajando.
Fuente: El Día
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