sábado, 13 de marzo de 2010

Con el aval de un clásico

ANDREW LLOYD WEBBER EN FAMILIA, FESTEJÓ LA CONTINUIDAD DE UNA OBRA MÁS QUE EXITOSA. FUE UN PROYECTO QUE TARDÓ AÑOS EN LLEVARSE A CABO. EN NOVIEMBRE, LLEGA A BROADWAY.

El amor nunca muere Fue el estreno mundial, en Londres, de la segunda parte de "El Fantasma de la Opera".


Esta semana se concretó en el legendario teatro londinense Adelphi, el estreno mundial de El amor nunca muere, la segunda parte del musical El Fantasma de la Opera. El creador de la secuela, tanto como de la primera, es el británico Andrew Lloyd Webber quien subió al escenario luego de la primera función para saludar junto a todo el elenco a los espectadores.

El musical tiene como protagonistas al canadiense Ramin Karimloo, como "el fantasma"; y a la estadounidense Sierra Boggess, en el papel de Christine.

Sólo con la venta de entradas anticipadas, El amor nunca muere recaudó alrededor de nueve millones de euros.

El Fantasma de la Opera es la historia de un amor que se desarrolla en la Opera de París y que ya han visto más de 100 millones de personas en todo el mundo, desde que se estrenó, en el año 1986. Todavía está en cartelera en diversos teatros de Londres y Nueva York. Mientras que El amor nunca muere (Love Never Dies) sigue la historia diez años después, con el genio desfigurado, conocido como "el fantasma", viviendo bajo las brillantes luces de Coney Island, Nueva York, y todavía perdidamente enamorado de la soprano Christine Daae.

Sin embargo, la secuela no fue bien recibida por los fans del clásico ya que han despellejado a la nueva versión en varias páginas de Internet basados en algunos adelantos que han podido ver. Algunos dicen que la partitura no le hace justicia a las anteriores pegajosas y románticas baladas como The Music of the Night (La música de la noche) y All I Ask of You (Lo que pido de ti) mientras que las críticas se han cernido sobre el diseño del escenario. Además, en el blog especialista en teatro llamado West End Whingers, rebautizaron a esta pieza como Paint Never Dries (es decir, La pintura nunca se seca).

El amor nunca muere es un proyecto que ha tardado años en concretarse por lo que las expectativas son muy altas. El director Jack O´Brien, dijo que Lloyd Webber, quien ha estado recuperándose de cáncer de próstata mientras preparaba la puesta en escena en Londres, "fue muy valiente al volver sobre su gran éxito. Esto es algo así como su Tempestad, la última obra que escribió William Shakespeare. Webber está reexaminando aspectos de su juventud, de su propio viaje. Eso es muy conmovedor para mí. Tiene una gran cantidad de dinero y de prestigio... No tenía que hacer esto pero está comprometido".

El espectáculo se presentará en Broadway en el mes de noviembre, y en Australia el próximo año. Varios críticos especializados vaticinan que se convertirá en otro gran éxito de Lloyd Webber, creador de exitosos títulos como Cats, Evita, Jesucristo Superstar y Sunset Boulevard.

Fuente: Clarín

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