martes, 6 de octubre de 2009

Se estrena "Criatura de la noche" el film de Tomas Alfredson

Ahora sí, confirmado: el jueves 15 de octubre llega la mejor película de vampiros de los (no tan) últimos tiempos: sueca, independiente, sangrienta, romántica... y protagonizada por dos nenes

“Criatura de la noche se anuncia para dentro de unas semanas, más precisamente un día después de Harry Potter y el misterio del príncipe. ¿Le quedará alguna sala disponible? ¿Durará más de siete días?”, eso decía el artículo aparecido en junio en estas mismas páginas; con las pruebas sobre la mesa, resulta evidente que algo similar pensaron los distribuidores locales del film.

La larga serie de falsas alarmas y postergaciones, Criatura de la noche-Vampiros se pudo ver únicamente, todavía bajo su título original Let the Right One In, en el Festival de Cine Independiente de Buenos Aires... del 2008. Parece, ahora sí, haber concluido con final feliz: 15 de octubre es la fecha elegida para que las pantallas locales se inunden con la nueva sangre sueca.

El film de Tomas Alfredson está basado en la novela Déjame entrar (editada en Argentina el año pasado) y se desarrolla contra el fondo de un frío invierno en las afueras de Estocolmo, a principios de los ‘80; un paisaje sórdido de alcohólicos, drogadictos y familias disfuncionales.

Aunque el libro tiene muchas subtramas -incluida una, tremenda, de pedofilia, apenas sugerida en la versión filmada- que lo llevan casi al terreno de la novela social, Alfredson se concentró en la inusual historia de amor de dos nenes de doce años.

El, Oskar, víctima del acoso de sus compañeros de escuela, practica en silencio con una navaja para cuando llegue el tiempo de la venganza. Ella, Eli, se muda al departamento de al lado con quien parece ser su padre y, aunque lo primero que le advierte a Oskar es que no pueden ser amigos, terminan construyendo una relación imposible, desesperadamente romántica e inevitablemente violenta.

El quid de la cuestión es que “ella” es un “eso” -un shockeante desnudo frontal revela que ahí abajo no hay más que una cicatriz-, con fuerza sobrenatural, capaz de escalar edificios y quebrar cuellos sin esfuerzo. Un vampiro atrapado en el cuerpo de una chica de 12: algo inédito en el cine de género; y una de las tantas singularidades de una película que no reconoce influencias ni filiaciones.

“Me parecía tonto buscar inspiración en otras películas de vampiros”, dice Alfredson. “Me inspiran otras cosas, como la música que escucho; durante el rodaje, escucho tantas veces las mismas canciones que supongo que terminan por influirme”. Y Criatura de la noche tiene, además de una notable y sugestiva banda sonora, una cualidad casi musical: vean si no la coreografía sin palabras del final subacuático, de noche y en una piscina, y fíjense si pueden evitar mover los pies al ritmo de la venganza de Oskar y Eli.

Fuente: Hoy

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