Una historia ligada a la industria que va en busca de crearse un futuro prominente
Berisso festeja hoy 139 años con actividades que comenzarán con un chocolate popular y terminarán con actividades artísticas luego de las visitas organizadas para conocer sus lugares emblemáticos, desde sus viñedos a la extraordinaria calle Nueva York.
El 24 de junio de 1871 es la fecha en que Juan Berisso instaló su saladero San Juan al sur de Ensenada. Sin quererlo, dio lugar a la formación de un pueblo que luego llevaría su nombre. El día que el saladero inició operaciones quedó como recuerdo de la fundación de Berisso; tal como años después lo establecieron los intendentes Santiago Bassani (en 1967) y Néstor Juzwa (en 1998).
Mientras que el origen de su vecina Ensenada es portuario, el de Magdalena religioso y el de La Plata político, Berisso nace como resultado de una localización industrial.
Antes que Juan Berisso, entre 1810 y 1815 había estado en la zona el saladero de Roberto Staples, el primero en la provincia de Buenos Aires, y en 1821 la sociedad Trapani y Staples instaló un saladero sobre el Río Santiago, aunque abandonó el lugar en 1828.
Desde el trabajo en el saladero San Juan fue que poco a poco se formó el pueblo: en 1885 se instaló la primera escuela primaria en Montevideo y Punta Arenas; mientras que en 1887 se lotearon y remataron 20 manzanas (200 lotes) paralelos a la calle Génova, en lo que se dio en llamar Villa Porteña.
En 1890 se inaugura el Puerto La Plata y la ciudad queda ligada al desarrollo industrial: en 1904 se inaugura el Frigorífico La Plata Cold Storage Company Limited, que en 1917 es adquirido por la Compañía Swift de La Plata. El Frigorífico Armour S.A. se inaugura en 1915 y Berisso ya contaba con los servicios de cualquier cuidad. Tal vez el progreso pareciera el único camino cuando en 1925 se inauguró la destilería de YPF y Berisso crecía con su propia fisonomía, con la instalación de los Astilleros Río Santiago, las industrias petroquímicas, la hilandería "The Patent Knitting -luego Cooperativa Textil Argentina- y la cercana Propulsora Siderúrgica. Todo ello dio fisonomía propia a la ciudad, que luego se convertiría en la Capital Provincial del Inmigrante, por la gran cantidad de colectividades que llegaron atraídas por el trabajo en los saladeros, la construcción de la ciudad y el puerto de La Plata, a fines del siglo XIX y a comienzos del siglo XX con la puesta en marcha de los grandes frigoríficos.
Una ciudad obrera no podría más que, en 1945, presentar una de las primeras columnas que movilizaron en busca de la liberación del detenido presidente Juan Domingo Perón. Los trabajadores de los frigoríficos de Berisso partieron rumbo a la Plaza de Mayo y se sumaron a los manifestantes de La Plata, Avellaneda, Lanús, Banfield, Quilmes, San Martín, y llegaron a Plaza de Mayo la mañana del 17 de octubre.
Los malos tiempos comenzaron, tal vez, en 1969, cuando cerró el frigorífico Armour, y se profundizaron con la última dictadura militar, hasta que, en 1983, cerró el Swift, con lo que se puso fin a 75 años de industria frigorífica y a 112 años desde la instalación de los saladeros.
Desde entonces, Berisso intenta escribir una nueva historia. Y la refundación de la ciudad podría llegar con la concreción de un sueño que se pospone desde 1983, como la reactivación del puerto de La Plata y la instalación de la terminal de contenedores en Berisso. Creen que traerá mucho trabajo y que los vecinos podrán disfrutarlo sin miedo a que la sudestada se lo lleve todo, gracias a la construcción del terraplén costero.
Fuente: Diagonales
No hay comentarios:
Publicar un comentario