LAS PALABRAS Y LA AUSENCIA UNIPERSONAL PROTAGONIZADO POR SUSANA YASAN."La llave Marilyn". Poemas premiados y dos hermanas, Laura y Susana Yasan, reunidas en un espacio creativo.
Por: Camilo Sánchez
La llave Marilyn nació un domingo por la tarde a la hora de la depresión. Comencé a llamar por teléfono y sólo me atendieron contestadores automáticos, quise matarme y me sentí Marilyn", dice la poeta Laura Yasan. Escribió, bajo ese aliento, un libro de endecasílabos enjoyados por los fragores y la ausencia de un amor -que me frote anestesia en las encías / que suture mis labios / y dos veces al día me descargue cien voltios / si mis brazos no sueltan / si repito su nombre- que fue Premio Casa de las Américas 2008. Un libro de intensidades. Y que llevó a su hermana, Susana Yasan, actriz, directora teatral y regie de La Zapatera Prodigiosa en el Centro de Experimentación del Teatro Colón, entre otras cosas, a montar "un cuarto donde la poesía de La llave Marilyn, que aguarda ser leída, se abrirá". La obra, que se estrenó el año pasado, se está ofreciendo hasta hoy, a las 18.15, en la sala Taller del Angel, Mario Bravo 1239. Y tras un breve paréntesis, en que Susana Yasan viaja a México por dos semanas para dar unos seminarios, retornará a esa misma sala. "Es un unipersonal que expresa la soledad extrema, el aislamiento, la indiferencia y el abandono. Cuando ingreso en el espacio escénico, siento que ingreso, cada vez, en el alma de alguien que anhela comunicar ese
Laura Yasan, que coordina talleres de poesía, ha comenzado con Doble de alma, a publicar sus poemarios desde 1995. Loba negra (La bohemia, 1999) recibió el Premio Unico de Poesía EDUCA, Costa Rica, 1998, y el 3º Premio del Fondo Nacional de las Artes. "Hacía tiempo -cuenta- que mi hermana Susy y yo queríamos hacer algo juntas, pero era muy difícil ya que siempre escribí poesía y la poesía, ya se sabe, queda un poco lejos del teatro. Pero La llave Marilyn es un libro muy diferente a mis poemarios anteriores, dado que tiene una unidad temática y un día surgió la idea de ponerlo en escena. Y se lo entregué -agrega- sin ninguna condición, y no quise ver un solo ensayo, ya que confío plenamente en su criterio estético. Cuando vi la obra terminada sentí que ella había convertido a mi libro en algo vivo: le puso cuerpo, ambiente, clima y música, sin cambiar una palabra. El resultado, como un concierto de artes conjugadas en armonía total, es como haber descubierto un nuevo lenguaje".
Susana Yasan, que se ha formado con Augusto Fernandes y Rubén Szchumacher, es especialista en técnicas corporales y viene de llevar adelante Mi querida, de Griselda Gambaro. "Elegí este texto -dice- maravillada por el desafío estético que ofrece. La búsqueda fue encontrar para cada palabra una acción. Sobre un cuerpo despojado, vibrando, frente al espejo de su soledad, la música de Sergio Vainicoff nunca es fondo, sino parte del clima, del texto y de la respiración de la puesta en escena". El diseño de espacio y vestuario de La llave Marilyn es de Mabel Pena.
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