viernes, 7 de mayo de 2010

Las Pelotas en la ciudad de La Plata

Las Pelotas se presenta esta noche a las 21 en El Teatro Sala Ópera (58 e/10 y 11) de La Plata

A horas del show que darán en nuestra ciudad, conversamos con Germán Dafuncchio, quien expresa la acentuada búsqueda musical y artística de una de las bandas más coherentes y constantes del rock nacional.

¿Cómo se preparan para el show de esta noche?

-Bueno, en realidad nosotros vivimos casi en un estado permanente de ensayo. No es que nos preparamos específicamente para algo, sino que vivimos todo el tiempo preparándonos para tocar. Y esta noche va a ser muy especial, porque hace tiempo que no vamos a La Plata. Y nada, queremos que nos vean los que nos quieren ver.

-Ese estado de comunión se ve claramente en la búsqueda musical constante de la banda, ¿no?

-Lo que te puedo decir es que nosotros construimos la música trabajando juntos. Es la forma de poder llevarlo a través del tiempo, también. Y también hay otra cosa que me parece fundamental: si estás en un grupo, el aporte de cada uno de los integrantes…

-Un formación horizontal...

-Sí, quizá sea la definición correcta. Nos conocemos desde hace mucho tiempo.

-El contenido emocional y el título del disco Despierta dicen mucho...

-Con el tiempo te puedo decir que es un disco que tuvo mucha intensidad, mucho trabajo. Es un momento difícil, realmente muy difícil. Yo estoy muy orgulloso del disco, de hecho ahora lo he estado escuchando. Nada, creo que a lo largo de nuestra historia siempre hemos sido consecuentes con los que sentimos, lo que pensamos. Y creo este es otro cuadro más dentro de la colección de cuadros.

-Cada disco es un retrato de las personas y su momentos...

-Y sí. Nosotros concebimos el arte casi como una necesidad. Y por lo tanto vivir ensayando, componiendo. Siempre estamos trabajando. Eso nos hace felices.

-En Apocalypsis Now, Kurtz (Marlon Brando) dicen que “sólo aquel que conoce le horror, distingue realmente lo imprescindible de lo que no lo es”. Ustedes (y vos) han vivido varias pérdidas. ¿Es por eso que la banda cada vez se refiere más a conceptos básicos pero fundamentales como el amor, la lucha, el camino?

-Es probable. A través de tu vida como artista te vas desarrollando como persona. Peor, artista es una palabra muy relacionada a la genialidad ¿no? ¡Einstein es un genio! Hemos sido consecuentes siempre y por eso se da la relación con la gente. Todos los seres humanos tenemos más cosas parecidas y en común de lo que queremos creer ¿no? Y con la gente pasa eso. Todos tenemos un poco de todos dentro nuestro.

-Algo destacable es que saben crear esa conexión sin demagogia...

-Sí. Es un mundo difícil verdaderamente. Pienso en cualquier banda que hoy tiene que empezar a remar. Es un río largo, muy largo. Y cada acto que lleves adelante conlleva sus consecuencias. Y cuando vos querés ser lo que querés como artista, tus ideales o tus creencias, eso se hace con el tiempo.

-Siempre se señala a Las Pelotas como la continuación de Sumo. Pero lejos de mirar hacia atrás, se los ve muy abiertos a la música contemporánea: el sonido de las guitarras, las baterías...

-Nosotros necesitamos componer, ya te digo. Y componer es una aventura. No tenemos prejuicios de nada. Nunca le dimos bola a ningún cliché. Es todo cáscara. El arte se da a través del tiempo y de tu propia vida, ¿no? O lo que vos quisiste hacer: cuanto fuiste de verdad y cuanto fuiste de mentira.

-Alguna vez definiste la banda como guerreros...

-Sí, es así. O sea, guerreros por llevar adelante tu propia batalla. Porque la vida es una batalla constante ¿no? Y hay que mancarse. Hay que mancarse las heridas, hay que mancarse las partes feas, oscuras, tristes. Te vas curtiendo y cada show es como… no sé, un jugador de futbol debe sentir cosas parecidas: cada show es algo nuevo. Por más que sepas, todas las emociones, siempre cambia. Ser un guerrero es luchar y ser fiel a lo que uno cree. Yo creo que es lo más importante porque eso es lo que le transmitís a tus hijos y ellos a los suyos. Y uno sueña con mejorar de alguna manera este mundo imperfecto. Y aunque suena trillado, es el famoso granito de arena. Peor, eso es a quién le importe. Quizá a la mayoría de la gente le importe más que Susana Giménez se haya ganado el Platino.

-Hablás de transmitir a los hijos. En sus conciertos se da algo llamativo: canciones de gran carga melancólica y recorridos de vida, que llega a los chicos y se transforma en celebración...

-Los seres humanos son muy parecidos, las edades no importan. Y con respecto a la energía, hay cosas que tienen melancolía, hay cosas que tienen bronca, otros realismos. Nosotros al momento de cantarlas lo hacemos para exponer nuestros conceptos y es muy movilizador. Y es igual para todos. Por eso se da con la gente. Jóvenes, mediana edad, grandes.

R.G.M.


Las Pelotas se presenta esta noche a las 21 en El Teatro Sala Ópera (58 e/10 y 11)

La clave del éxito

-¿Cuáles son los planes para el futuro más próximo?

-Esta vez es la única vez que el disco lo estamos mostrando lentamente. Le estamos dando tiempo. Lo vamos a presentar en el Luna Park. Y luego vamos a seguir con la gira que venimos haciendo desde hace un año y pico. Pero ahora la excusa es presentarlo. Y desde luego que ya estamos trabajando en lo que serán las canciones del próximo. Seguimos componiendo, porque ya te dije: es una necesidad. No es que decimos: “Che, la compañía nos pide que saquemos hits”. Es mucho más simple.

-Es raro tener un hit, ¿no?

-Sabés que habría que ver el concepto de hit. Es un tema raro. No sé cuáles son los parámetros de lo que es un hit. Si se supiera, todo el mundo estaría creando hits. Pero los hits son cosas que nadie sabe por qué ocurren. A mí me parece, personalmente, que Las Pelotas es un grupo que está repleto de hits. Al menos para nosotros. No sé si luego alcanzan los radares. Ahora si uno esta buscando lo que suelen llamar hit, está en el camino equivocado. Lo duradero se ve a través del tiempo y el trabajo. No te va a hacer músico un tema famoso. Te va a hacer músico componer y sostener lo que haces durante tu vida.

Fuente: Hoy

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