CHICOS / ENTREVISTA: REESTRENA HOY "MI BELLO DRAGON"
La escribió "en tres tardes", a los 23 años, por el sufrimiento que le causaron la muerte de Bambi y otras crueldades animadas que vio en su infancia.
Por: Laura Gentile
De las seis obras que el genial Enrique Pinti escribió para chicas, Mi bello dragón, que se repone hoy en el teatro Maipo, resulta especial para él. Escrita en 1967 es una especie de revancha tierna por todo el sufrimiento que le causaron las películas de Disney con la muerte de la madre de Bambi y otras crueldades por el estilo que ofrecían a los niñitos esos dibujos animados que él adoraba.
"La escribí a los 23 años en un bar de Lavalle y Rodríguez Peña en tres tardes, porque la tenía en el corazón desde que era chico", cuenta el propio Pinti en un saloncito del teatro Maipo, y agrega: "Entre los 3 y los 6 años lloré mucho con Disney y me quedó como un sabor amargo".
El género paródico fue otra influencia importante del texto. "Ese subgénero que eran la sátiras a las historias clásicas que estuvo muy en boga en los '40 y '50, me pudo siempre de chico -explica-, parodias donde se hablaba el lenguaje de la obra y se introducían anacronismos. Por eso la historia que escribí tenía un poco de El bufón del rey, de Danny Kaye (una tomadura de perlo a Robin Hood), las sátiras de Bob Hope que yo veía de chico, las parodias que hizo Niní Mar-shall con Madame Sans-Gêne". Y, como gran amante de la comedia musical, decidió titularla Mi bello dragón por el clásico Mi bella dama, con Audrey Hepburn. "Eso es otra cosa que tiene el dragón (agrega), guiños para los padres. Para que los grandes no se aburran y eso la hace muy fácil de hacer".
En la versión original que se estrenó en Nuevo Teatro, el propio Pinti encarnaba al dragón. La obra se repuso en 2002, en el Maipo, dirigida por él y Ricky Pashkus, con un elenco que incluía a Elena Roger, Marcos "Bicho" Gómez", Osqui Guzmán. "Todos artistas que después fueron revelaciones -acota Pinti-, es una obra angelada, da suerte a la gente que la hace".
Hoy permanece "Bicho Gómez, y se suman Omar Calicchio, Vanesa Butera (su joven compañera de Hairspray), Diego Hodara, Diego Jaraz, Martín O'Connor, Jorge Priano y Laura, "jóvenes veteranos de la gran comedia musical".
¿Por qué reponerla ahora? "Primero porque es una obra muy gozosa -responde-, segundo porque los actores que la hacen no se la olvidan nunca y me dicen '¿cuándo la hacemos?', y tercero porque tuve la suerte de que el Maipo guarda todo. Un día viene Lino Patalano y me dice: 'Vi el traje del dragón cuando pasé por acá, ¿por qué no la hacemos de nuevo?' Y yo, encantado".
¿Y por qué pensás que sigue siendo actual una obra del '68?
Es como Tom y Jerry, que es del '50 y los chicos se siguen riendo igual. Creo que es un clásico, aunque cuando lo escribí no pensaba que estaba escribiendo un clásico. Yo escribí lo que me salió del corazón, una reivindicación del antiprejuicio. Nadie tiene por qué ser lo que se supone que tiene que ser: el dragón puede ser malo, pero puede ser bueno, primero conocelo; un rey puede no tener autoridad, una princesa puede ser una caprichosa. Y también tiene algo tierno, el dragón es muy tierno aunque no juega a la ternura sino a la parquedad. El que yo hice en el '68 jugaba a la simpatía, pero "Bicho" Gómez hizo una recreación y es un atorrante que juega al fútbol, se inscribe en Todo por un sueño.
Según Pinti, la gente saldrá de la obra emocionada: "Con la idea de sentirse feliz con lo que uno es y con no tener miedo. Como el que silva en la oscuridad para darse ánimo".«
Cuando pinti era chico...
De chico a Enrique Pinti lo llevaban a ver los títeres de Vittorio Podrecca. "Era un tinglado enorme -recuerda- y los cuadros eran el Carnaval de Venecia con góndolas y uno se iba enterando del mundo, de la música clásica". Entre los 6 y los 10 se hizo fanático de las radionovelas. "Los elencos iban de gira por los teatros de barrio -cuenta-. Yo siempre tenía la fila dos, punta de banco". A los 10 empezó a entender que "era medio chatarra eso" y pasó a ver las zarzuelas y a las operetas vienesas que le encantaban a su papá. "Creo que de ahí viene mi afición por la comedia musical", asegura.
Información
"Mi bello dragón" se puede ver sábados y domingos a las 17 en el Maipo, Esmeralda 443, 4322-4882. Desde $30.
Fuente: Clarín
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