Llega a los cines locales el esperado filme de James Cameron en el que crea un planeta a través de la cautivante tecnología 3DEl 2010 comenzará con el pie derecho en materia de cine con el estreno de este viernes de "Avatar", la última y ambiciosa producción de James Cameron que promete ser un hito cinematográfico. En nuestra ciudad, el estreno abrirá las puertas de la segunda sala 3D, en el Cinema Ocho.
Tal como sucedió con su última cinta, la taquillera "Titanic", y con la segunda parte de "Terminator"; el realizador volverá a poner al servicio de una trama sencilla pero efectiva lo último en efectos especiales y, en este caso, animación 3D.
La acción transcurre en el futuro, cuando los viajes espaciales son una realidad y la humanidad busca nuevas fuentes de energía para su avanzada tecnología, que consume y contamina más de lo que produce.
La respuesta para esta crisis parece ser el planeta Pandora, en el que existe un raro mineral que promete dar combustible sin límite ni vencimiento para la Tierra.
Sin embargo, para conseguir el preciado material hay que combatir a los Na'vi, nativos de aquel lugar que tienen una relación casi religiosa con el gigantesco árbol que crece encima de la reserva de material.
Hasta allí llegará Jake Sully, un ex infante de marina que tras un combate terminó en una silla de ruedas y que se suma al Programa Avatar, en el que "conductores" humanos pueden controlar a distancia un cuerpo biológico.
Estos cuerpos son los Avatar, híbridos diseñados genéticamente con ADN humano y ADN de Na'vi que les permiten sobrevivir en la atmósfera letal del lugar.
Jake se infiltrará entre los nativos, pero al conocer su cultura y estilo de vida, y gracias a los encantos de la bella Neytiri, cambiará su vida y el bando a la hora de luchar.
Así, Cameron recrea a su manera el enfrentamiento que tantas veces se dio entre conquistadores e indígenas a lo largo de la historia, uniendo una trama con moraleja y excelentes efectos especiales.
CAMERON VUELVE A SORPRENDER
Le tomó más de una década a James Cameron dirigir una película luego del suceso de "Titanic", pero con "Avatar" consiguió superarse a sí mismo y volver a revolucionar al séptimo arte. "Es la película más desafiante que he hecho en mi vida", declaró el realizador.
Este canadiense comenzó escribiendo guiones -sólo en 1983 firmó los libros de "Rambo 2", "Terminator" y "Aliens"- y se lanzó a dirigir esta última con excelentes críticas.
Luego llegarían "Terminator 2", en 1991; "Mentiras verdaderas", en 1994; y "Titanic", en 1997. Esta última recaudó más de mil millones de dólares en todo el mundo y presento efectos visuales nunca antes vistos.
En 1995 Cameron tuvo la idea de "Avatar", una metáfora futurista de las crueles conquistas sobre nativos pacíficos que viven en un paraíso y son amenazados por personas interesadas en sus recursos naturales.
"Quería crear un tipo de aventura familiar en un ambiente desconocido al poner a prueba la clásica historia de un recién llegado a una tierra y cultura ajenas en un planeta extraño", explicó el realizador.
Sin embargo, Cameron se frustró al darse cuenta de que las herramientas para plasmar en la gran pantalla su idea no existían por ese entonces, por lo que decidió poner manos a la obra.
De esa forma, el cineasta y su equipo de producción comenzaron a desarrollar la tecnología visual que les permitiera crear criaturas y mundos totalmente nuevos pero que lucieran reales.
Así, se creó un sistema de "captura de actuación facial basada en imágenes", que utiliza una cámara montada en la cabeza de los intérpretes para grabar de la manera más precisa sus rasgos.
De este modo, se pudieron registrar las caras, expresiones faciales, movimientos musculares y hasta movimientos oculares de los actores como nunca antes; obteniendo un realismo inédito.
Con esta técnica, y en el máximo de los secretos, la cinta comenzó a producirse en 2005. En total, demoró más de cuatro años en filmarse y demandó un presupuesto de 237 millones de dólares, que en muchos momentos puso nerviosos a los ejecutivos de Hollywood.
Sin embargo, los resultados en pantalla, y en taquilla, les devolvió la sonrisa a todos y confirmó el enorme talento y visión artística de Cameron, que se puso a la altura de los grandes creadores de la historia del cine.
"He soñado con crear una película como ésta, que se desarrolle en otro mundo de grandes peligros y belleza, desde que era un niño que leía literatura barata de ciencia ficción y tiras cómicas a granel, sentado en clase de matemáticas dibujando criaturas y extraterrestres detrás de mi libro de texto. Con 'Avatar', finalmente llegó mi oportunidad", contó entusiasmado.
Fuente: El Día
Tal como sucedió con su última cinta, la taquillera "Titanic", y con la segunda parte de "Terminator"; el realizador volverá a poner al servicio de una trama sencilla pero efectiva lo último en efectos especiales y, en este caso, animación 3D.
La acción transcurre en el futuro, cuando los viajes espaciales son una realidad y la humanidad busca nuevas fuentes de energía para su avanzada tecnología, que consume y contamina más de lo que produce.
La respuesta para esta crisis parece ser el planeta Pandora, en el que existe un raro mineral que promete dar combustible sin límite ni vencimiento para la Tierra.
Sin embargo, para conseguir el preciado material hay que combatir a los Na'vi, nativos de aquel lugar que tienen una relación casi religiosa con el gigantesco árbol que crece encima de la reserva de material.
Hasta allí llegará Jake Sully, un ex infante de marina que tras un combate terminó en una silla de ruedas y que se suma al Programa Avatar, en el que "conductores" humanos pueden controlar a distancia un cuerpo biológico.
Estos cuerpos son los Avatar, híbridos diseñados genéticamente con ADN humano y ADN de Na'vi que les permiten sobrevivir en la atmósfera letal del lugar.
Jake se infiltrará entre los nativos, pero al conocer su cultura y estilo de vida, y gracias a los encantos de la bella Neytiri, cambiará su vida y el bando a la hora de luchar.
Así, Cameron recrea a su manera el enfrentamiento que tantas veces se dio entre conquistadores e indígenas a lo largo de la historia, uniendo una trama con moraleja y excelentes efectos especiales.
CAMERON VUELVE A SORPRENDER
Le tomó más de una década a James Cameron dirigir una película luego del suceso de "Titanic", pero con "Avatar" consiguió superarse a sí mismo y volver a revolucionar al séptimo arte. "Es la película más desafiante que he hecho en mi vida", declaró el realizador.
Este canadiense comenzó escribiendo guiones -sólo en 1983 firmó los libros de "Rambo 2", "Terminator" y "Aliens"- y se lanzó a dirigir esta última con excelentes críticas.
Luego llegarían "Terminator 2", en 1991; "Mentiras verdaderas", en 1994; y "Titanic", en 1997. Esta última recaudó más de mil millones de dólares en todo el mundo y presento efectos visuales nunca antes vistos.
En 1995 Cameron tuvo la idea de "Avatar", una metáfora futurista de las crueles conquistas sobre nativos pacíficos que viven en un paraíso y son amenazados por personas interesadas en sus recursos naturales.
"Quería crear un tipo de aventura familiar en un ambiente desconocido al poner a prueba la clásica historia de un recién llegado a una tierra y cultura ajenas en un planeta extraño", explicó el realizador.
Sin embargo, Cameron se frustró al darse cuenta de que las herramientas para plasmar en la gran pantalla su idea no existían por ese entonces, por lo que decidió poner manos a la obra.
De esa forma, el cineasta y su equipo de producción comenzaron a desarrollar la tecnología visual que les permitiera crear criaturas y mundos totalmente nuevos pero que lucieran reales.
Así, se creó un sistema de "captura de actuación facial basada en imágenes", que utiliza una cámara montada en la cabeza de los intérpretes para grabar de la manera más precisa sus rasgos.
De este modo, se pudieron registrar las caras, expresiones faciales, movimientos musculares y hasta movimientos oculares de los actores como nunca antes; obteniendo un realismo inédito.
Con esta técnica, y en el máximo de los secretos, la cinta comenzó a producirse en 2005. En total, demoró más de cuatro años en filmarse y demandó un presupuesto de 237 millones de dólares, que en muchos momentos puso nerviosos a los ejecutivos de Hollywood.
Sin embargo, los resultados en pantalla, y en taquilla, les devolvió la sonrisa a todos y confirmó el enorme talento y visión artística de Cameron, que se puso a la altura de los grandes creadores de la historia del cine.
"He soñado con crear una película como ésta, que se desarrolle en otro mundo de grandes peligros y belleza, desde que era un niño que leía literatura barata de ciencia ficción y tiras cómicas a granel, sentado en clase de matemáticas dibujando criaturas y extraterrestres detrás de mi libro de texto. Con 'Avatar', finalmente llegó mi oportunidad", contó entusiasmado.
Fuente: El Día
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