Por Juan Garff
Ya es un clásico del verano porteño. La temporada estival del grupo La Galera Encantada, en el frondoso patio del Museo Larreta, se inició esta semana con la reposición de María Elena , el espectáculo escrito y dirigido por Héctor Presa.
El pasaje de la versión vista en el San Martín implicó no sólo la conformación de un nuevo elenco, sino también una doble reformulación de la puesta, dado que en caso de lluvia se invierte el frente del escenario, para dar, con boca algo más angosta, hacia la sala cerrada que se abre hacia la sala de la calle Mendoza. El cambio mayor está dado sin embargo por el clima que genera la representación al aire libre, menos intimista que el de la sala a oscuras, pero más festivo y familiar, tendiente a conformar una comunidad entre público y actores.
La obra, escrita y dirigida por Héctor Presa, retoma las canciones de María Elena Walsh en un homenaje a la gran trovadora que no se reduce a reproducir los temas, sino que indaga sobre su forma de crear con las palabras, para generar un popurrí alegremente trastocado con respecto a su sentido más común.
El mismo Presa suele operar sobre un esquema similar cuando escribe sus obras. Casi siempre remiten a algún título, frase o anécdota que es referencia conocida para todo el mundo, pero de ahí en más es otra cosa lo que emerge.
"No me sale contar la misma historia, porque siento que ya la contaron", explica el director de La Galera. "Uno recorre un vocabulario, una suerte de estructura de forma circular, en donde siempre hay escondidas otras cosas. No se escribe algo nuevo, se reinventa al volver a pensar en lo que ya se conoce". El Payaso de Oz , Operación Caperucita o Blancanieves y los 8 enanitos son algunos ejemplos de esta metodología a lo largo de la extensa trayectoria de La Galera Encantada, iniciada en 1978.
Los planes del grupo para la próxima temporada son fiel reflejo de este método de trabajo. De una frase dicha en María Elena surgirá Historias de por ahí . "Siempre se guarda algo por ahí, en la obra ese lugar difuso es un mundo, al que se recurre en búsqueda de la infancia, del redescubrimiento de viejos juegos como el balero, el yo-yo y el triciclo, de esas cosas que se perdieron por ahí", anticipa Presa.
En el San Martín tiene presentado un proyecto que podría apelar también a la participación del Grupo de Titiriteros, titulado Romualdo y Julita , en el que capuletos y montescos se cruzan en amores y disputas múltiples para terminar en una gran fiesta de casamiento. Un Pinocho será la historia del muñeco de madera parlanchín y mentirosillo, pero en manos de un grupo de vendedores de feria que buscan nuevos recursos para atraer clientes.
Por otra parte, La Flaca Escopeta , el personaje creado y protagonizado por Linda Peretz, volverá a escena en marzo en el Teatro Liceo, después de una década de retiro, con libro y dirección de Presa. Los problemas de una orquesta -dirigida en vivo por Sergio Feferovich, el creador de La vuelta al mundo en un violín - llamarán de nuevo a la acción al mágico personaje de la bicicleta voladora, en una vuelta de tuerca que Presa asegura será sorprendente.
Para el prolífico autor y director teatral se trata ante todo de poder jugar con las posibilidades latentes en toda situación. "Hay una necesidad de apelar al juego, a una dinámica de recrear, de encontrar una situación mayor a partir de lo ya conocido. Me preocupa mucho que la estructura sobre la que se trabaja sea reconocible por los chicos como una dinámica de juego", concluye este gran creador.
Para agendar
María Elena , obra escrita y dirigida por Héctor Presa.
Museo Larreta , Vuelta de Obligado 2155 (en caso de lluvia, Mendoza 2250). Miércoles a domingo, a las 18, Entradas: miércoles, 15 pesos; jueves a domingos, 20.
Fuente: La Nación
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