"La libertad implica desafío"

ACTOR Y MUSICO TIENE UNA BANDA, GIGI, QUE ARMÓ CON EL ZORRITO VON QUINTIERO. CUENTA, DICE, CON LAS ARMAS DE SIEMPRE.

Entrevista. Favio Posca Prepara su unipersonal número siete, "Al Bad Taim Gud Feis", que llevará a Mar del Plata. Dice que el hecho artístico es su manera de criticar el momento.

Por: Juan José Santillán

El estreno de Favio Posca de Al Bad Taim Gud Feis será en su ciudad natal, Mar del Plata, el viernes 8 de enero. "Eso para mí significa adrenalina pura -dice- Esa ciudad está antes y después del teatro: siempre hay un bonus track de afecto de la gente que me entusiasma ". Además, el séptimo unipersonal de Posca estrenará la sala Radio City, de Lino Patalano. En ese espacio desplegará su histriónico pergamino de personajes y situaciones que coquetean lo border como marca distintiva. El porno, la marginalidad y la cocaína son algunos motores físicos y discursivos de sus personajes. A ellos Posca les pone cuerpo para llevarlo a un ritmo frenético. "En este show hice todo: dirigir, actuar, escribir los guiones para los videos -dice-. Creo que hay un crecimiento. Mi hija Manuela grabó algunos videos, también hay una especie de exposición fotográfica."

Este año Posca no hizo teatro. Bajó la temporada pasada Los quiero Muchisssimo con buena cantidad de espectadores. "No dejo que se caigan mis shows -explica-. Los levanto cuando está explotando el teatro. No quiero que decanten y prefiero que se mantenga el boca a boca". Durante este año, además, formó la banda de rock Gigi junto al Zorrito Fabián Von Quintiero. "No veo sentido a grabar un disco. Con eso no te hacés millonario y la industria está hecha bolsa. Prefiero tocar en vivo".

Con respecto a los personajes de "Al Bad Taim Gud Feis" ¿mantenés alguno de los clásicos tuyos?

Sí, estará el Perro. Pero a esta altura ya no los veo como personajes sino como personas que viven con historias que la gente ya conoce. Hay otras que no. Básicamente como artista me pongo en este show más crítico, el título Al Bad Taim Gud Feis, no quiere decir poner la otra mejilla: es resistencia pura con un hecho artístico sin criticar ni tirar mierda.

¿A qué resistís?

A la hipnosis y a la poca creatividad que hay en el país hoy en día. Mi crítica es hacer una obra de arte y exponerme como artista. Pero ojo: la libertad que tengo en el escenario implica desafío. Podría quedarme en decir qué desastre es todo, pero prefiero sublimar todo eso en un buen show. Parece que poner una semilla no germina, está todo tan momificado. O te deprimís y te vas del país. O hacés arte puro. Los jóvenes tienen cada vez menos cabida.

¿Esa "hipnosis" de la que hablás está también en el teatro?

Yo no veo teatro. Hace años que no voy. No me interesa el teatro. Hablo en el arte, en general. lo que es más grave aún.

¿Cómo surgió tu banda?

Gigi se generó con la gripe porcina, con los teatros cerrados. Yo estaba en mi casa sin poder salir. Me dije: o me quedo encerrado mirando tele como un parásito o genero algo. ¡Y plaf! Lo llamé al zorro Von Quintiero, armé las canciones y canto. En Gigi no tienen nada que ver mis shows teatrales.

¿Cómo son tus ensayos para el teatro?

Son muy distintos a la banda. A veces ensayo tirado en la cama, en un estado preconsciente. Imaginándome en el espacio. A veces son ensayos casi virtuales.

¿Por qué atraés a los jóvenes y no a los de tu generación de más de cuarenta?

Siempre fue así. De un tiempo a esta parte, la gente que me sigue es la que va al teatro. Los de más de cuarenta me siguen por la tele. Por suerte se amplió un poco más. Por ahí la gente que me viene a ver se aburre en el teatro, encontraron un referente con el que se divierten.

¿No le temes a la repetición? ¿A que desde el vértigo de la puesta surgan los mismos recorridos y exabruptos?

Cada show mío tiene 16 canciones nuevas, textos nuevos, algunos personajes y el mismo actor de siempre que se deforma. Por ejemplo, si una banda saca un nuevo disco, aporta sólo sus canciones. En cada show yo les doy todo lo demás. Yo soy Posca, no voy a hacer Shakespeare hablando bajito. El que se repite es el ser humano que soy. Esa es mi forma. Por ejemplo: ¿le hubiesen dicho a Miró o a Dalí que pinten otras cosas fuera de su locura? Ellos contestarían: "Macho, soy Dalí".

Fuente: Clarín