Con un disco atípico, sin ensayo previo y un invitado de lujo como Andrés Calamaro, uno de los mejores guitarristas de Argentina volvió con todo a los estudios, después de cuatro años de sequía.El miércoles pasado Juanjo Domínguez presentó en la librería El Ateneo Sin Red, y le abrió al público la puerta a sus ensayos. Estuvieron sus compañeros “Majo” Lanzón y “Beto” Solas, pero también lo acompañó su amigo incondicional Andrés Calamaro. El Hoy estuvo ahí y habló con los artistas.
-¿Por qué decidiste hacer Sin Red después de tantos años sin grabar?
-Sin Red es como un trapecista que se tira de un trapecio justamente sin red, más o menos es así. No se saben las consecuencias. El disco lo hicimos entrando a un estudio y viendo qué salía, sin ensayos, sin pensar siquiera en los temas o en los tonos.
-¿Cómo surgió la idea de sumar a Andrés Calamaro en dos temas?
-Fue un pedido de amigo, lo llamé y le conté que tenía este proyecto y a él le pareció bárbaro. Yo había participado de Tinta Roja, uno de sus discos, porque él me propuso desinteresadamente sumarme a ese trabajo y yo le agradecí terriblemente. Pero además me pareció que esta era una forma de agradecer también. Y él estaba esperando esta propuesta, así que se presentó al estudio.
-¿Los dos temas que hicieron también los eligieron al azar?
-En realidad lo único planeado de este disco fueron los dos temas que hicimos con Andrés, que son Absurdo y Soledad. Y lo planificamos más que nada para saber el tono con el que él iba a cantar. Pero no hubo ensayo, no hubo nada, siguió ese Sin Red. Le sigo agradeciendo a Andrés Calamaro que esté conmigo en este proyecto y a mis compañeros “Beto” Solas, el percusionista de Juanjo trío y a “Majo” Lanzón, la otra integrante del trío.
-¿Qué es lo que te hizo elegir a Calamaro como músico invitado?
-La seducción de Calamaro, es un fenómeno. Hay fenómenos que son difíciles de categorizar y Andrés Calamaro tiene eso que tienen los tipos tocados, tiene la aureola de los ídolos. Es de esos tipos que no necesitan una terrible promoción para llenar un estadio, para vender discos. Con Tinta Roja, a la semana Andresito ya tenía el disco de platino, esas cosas son un fenómeno, no se pueden tildar ni de bueno, ni de malo, son fenómenos. Pero por sobre todas las cosas yo a Andrés lo elijo como amigo, ya me satisface que esté conmigo en una grabación o en un asado. Lógicamente no me olvido de la dimensión y de los tiempos presentes. Pero una vuelta veníamos de trabajar, dejamos a Majo en su casa y me encuentro con la avenida Libertador cortada: era porque Andrés había terminado un recital y había más de 40 mil personas. Esas cosas son inexplicables,
-¿En qué te basaste para elegir el repertorio?
Los discos no solamente se escuchan, los discos se ven, yo creo que este disco lo van a escuchar y lo van a ver. En este trabajo no hubo repertorio preestablecido, en lo de Andrés tuvimos que sacar el tono en el que él cantó, pero tampoco estábamos convencidos de Absurdo y Soledad. Andrés me propuso mil temas y hubo que elegir dos. El año que viene es probable que hagamos un disco juntos en donde ya se va a empezar a elegir, pero acá fue todo Sin Red.
Entré en el estudio, Oscar Giménez abrió la máquina, se quedó expectante y ahí pasaron cosas. Sin la mano del técnico, sin corregir pifiaditas ni notas que por ahí no están bien presentes, nada. Lo hicimos con un buen sonido, pero la idea era como si hubiese mostrado la cocina de Andrés o mi casa.
Ficha tecnica
Nombre del Disco: Sin Red
Género: Tango
Autor: Juanjo Domínguez.
Percusión: Beto Solas y Majo
Lanzón
Tracks: 14 (en dos de ellos
participa Andrés Calamaro como intérprete)
Andres Calamaro
“Encontré mi madurez como intérprete con Juanjo Domínguez”
-¿Qué representa para vos Juanjo Domínguez?
-Juanjo es a la música popular argentina como es Paco De Lucía para el flamenco, para la música hecha en España; forma parte de esa categoría de músicos extraordinarios como podría ser Raúl Barbosa para el acordeón, son músicos que improvisan y le dan cuerpo y alma a los géneros de la música argentina. Por eso le agradezco a Juanjo por invitarme a realizar con tanta sensibilidad estas dos canciones enormes como son Absurdo y Soledad, que seguramente escribieron Gardel y Lepera y los hermanos Virgilio y Homeros Expósito pensando en el cine, en la eternidad del cine de la canción .
-¿Este fue tu mejor homenaje para él?
-A mis 41 años encontré la madurez como intérprete tocando con un peso pesado de la música popular como es Juanjo Domínguez. Para mí es un gran homenaje poder participar del privilegio de la amistad y de la música de Juanjo Domínguez, es como si a un cantante lo llama Paco de Lucía en España por el voltaje musical. Ahora está de moda nombrarnos ciudadanos ilustres, pero hacerlo cuando estamos más cerca del arpa que de la guitarra es un homenaje demasiado barato, los músicos necesitamos más que ese tipo de homenajes.
-¿Cómo vas cerrar este año?
-El Club Ciudad tiene algunos problemitas gubernamentales con el volumen y estamos viendo cómo se pueden solucionar. Pero además está colmado, así que vamos a agregar una función en el Luna Park que seguramente va a ser el día 12 más uno, como decimos los músicos supersticiosos, y sino será el “lunes Park”, que espero que sea ese día, así no tocamos un día 13.
-¿Ya tenés armado el show?
-Vamos a hacer lo de siempre, que son canciones mías y de Los Rodríguez, y después vamos a hablar con Juanjo Domínguez a ver si se viene al Luna a tocar conmigo. Voy a tener muchos invitados porque hace mucho que no toco con amigos.
Fuente: Hoy
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