La “guerra de los Thyssen” pone en alerta al mundo del arte
Las “Lágrimas de Eros” atraen estos días a miles de personas al Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid. La exposición, un recorrido por el erotismo en la historia del arte, es todo un éxito. Lo que pocos visitantes saben es que detrás de la fachada del Palacio de Villahermosa, el edificio neoclásico que alberga a la pinacoteca, se libra una dura batalla por el legado de la familia que da nombre a una de las colecciones de arte más importantes del mundo. Esta batalla, que ya ha llegado a los tribunales, sí que ha hecho correr lágrimas, pero de ira y dolor, además de poner en peligro el futuro de ese patrimonio cultural.
Por un lado está Carmen “Tita” Cervera, ex “Miss España” y viuda del barón Hans-Heinrich Thyssen-Bornemisza, un acaudalado industrial y mecenas de nacionalidad suiza y origen húngaro-alemán que en 1992 vendió al Estado español su impresionante colección de 800 obras de arte por 400 millones de euros.
Por el otro está Borja, 29 años, el hijo de Carmen, fruto de una relación anterior a su matrimonio con el barón. Éste lo acogió como un hijo más y le dio su apellido. El joven afirma haber descubierto que es cobeneficiario de la colección de arte de su madre, compuesta por alrededor de 1.000 obras. Las piezas están valoradas nada menos en 800 millones de euros.
Cervera, que a sus 66 años es vicepresidenta del patronato de la Fundación Thyssen, demandó a su hijo ante tribunales, acusándolos de revelación de secretos y sustracción de documentos. Mientras que Borja reclama dinero, su madre intenta preservar su colección. Ésta incluye piezas fundamentales del arte moderno, además de importantes obras de Courbet, Corot, Monet, Pissarro, Sisley, Renoir, Degas, Gauguin, Braque, Matisse, entre otros.
Fuente: Crítica
Las “Lágrimas de Eros” atraen estos días a miles de personas al Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid. La exposición, un recorrido por el erotismo en la historia del arte, es todo un éxito. Lo que pocos visitantes saben es que detrás de la fachada del Palacio de Villahermosa, el edificio neoclásico que alberga a la pinacoteca, se libra una dura batalla por el legado de la familia que da nombre a una de las colecciones de arte más importantes del mundo. Esta batalla, que ya ha llegado a los tribunales, sí que ha hecho correr lágrimas, pero de ira y dolor, además de poner en peligro el futuro de ese patrimonio cultural.
Por un lado está Carmen “Tita” Cervera, ex “Miss España” y viuda del barón Hans-Heinrich Thyssen-Bornemisza, un acaudalado industrial y mecenas de nacionalidad suiza y origen húngaro-alemán que en 1992 vendió al Estado español su impresionante colección de 800 obras de arte por 400 millones de euros.
Por el otro está Borja, 29 años, el hijo de Carmen, fruto de una relación anterior a su matrimonio con el barón. Éste lo acogió como un hijo más y le dio su apellido. El joven afirma haber descubierto que es cobeneficiario de la colección de arte de su madre, compuesta por alrededor de 1.000 obras. Las piezas están valoradas nada menos en 800 millones de euros.
Cervera, que a sus 66 años es vicepresidenta del patronato de la Fundación Thyssen, demandó a su hijo ante tribunales, acusándolos de revelación de secretos y sustracción de documentos. Mientras que Borja reclama dinero, su madre intenta preservar su colección. Ésta incluye piezas fundamentales del arte moderno, además de importantes obras de Courbet, Corot, Monet, Pissarro, Sisley, Renoir, Degas, Gauguin, Braque, Matisse, entre otros.
Fuente: Crítica
3 comentarios:
Dear Ernesto
Please forgive my writing to you in English, but my Spanish is not good enough.
I don’t mean to piss on your parade and it might sound to some as if I’m on a mission of hatred. I’m not. I got to know Heini and Tita Thyssen very well and liked them both (Tita is round the bend and a pain in the bum, but nonetheless, I like her).
Please don’t perpetuate stereotypical Thyssen myths. Heini’s forebears, and in particular his fortune, came from Germany. It was created by Old August Thyssen and thousands of dedicated, hard-working coal and steel workers. Switzerland and Hungary were merely conveniences.
While Heini’s collection was very impressive, it wasn’t all it was said to be. Many art experts knew that it contained (and still does) many forgeries and paintings of a questionable provenance. It is also seen by many as a rather directionless collection, with no central theme and even where works are by genuine masters, they mostly feature second-rate examples of their work.
The money for the collection, apart from that made by old August, also includes profits from two world wars and the Thyssens’ involvement with the Nazi Party. It is not a background that gives any reason for pride.
The Thyssens have never been art ‘patrons’. They bought art; they did not pay artists to create it. They only used art to cover their sins.
As far as Tita’s collection is concerned, while I admire the fact she has a personal taste, hers cannot, by any stretch of the imagination, be described as great art, and is certainly not worth, particularly in today’s climate, 800 million Euros, and certainly not to the Spanish, who have already paid for one Thyssen-Bornemisza Collection. They need two Thyssen-Bornemisza Collections like a hole in the head.
However, if you disagree with anything I say, there is always the option of welcoming and renting Tita’s collection for your country. I’m sure she would be delighted.
Have a pleasant week-end.
Greetings from England
David R L Litchfield (‘La Historia Secreta de los Thyssen’, Temas de Hoy, Madrid)
http://www.davidrllitchfield.com
Traducción aproximada a través del "Traductor Google" al comentario en inglés:
Por favor, perdone mi dirijo a usted en Inglés, pero mi español no es suficiente. No me refiero a mear en su desfile y que puede sonar a algunos como si estoy en una misión de odio. No lo soy. Conocí a Heini y Tita Thyssen muy bien y me gustaron tanto (Tita es la vuelta de la curva y un dolor en el culo, pero sin embargo, me gusta. Por favor, no estereotipadas perpetúan mitos Thyssen. Heini antepasados, y, en particular, su fortuna, llegó de Alemania. Fue creado por el antiguo August Thyssen y miles de dedicados y difíciles de carbón de trabajo y los trabajadores del acero. Suiza y Hungría se limita a las comodidades. Mientras que la recaudación Heini fue muy impresionante, no fue todo lo que se decía que era. Muchos expertos en arte sabían que contenía (y aún lo hace) muchas falsificaciones y pinturas de una procedencia dudosa. También es visto por muchos como un conjunto y no de rumbo, sin un tema central e incluso en obras de maestros auténticos, que en su mayoría característica ejemplos de segunda categoría de su trabajo. El dinero para la colección, además de que hizo en agosto de edad, también incluye los beneficios de las dos guerras mundiales y la participación de los Thyssen 'con el Partido Nazi. No es un fondo que le da ninguna razón para el orgullo. Los Thyssen nunca han sido el arte "patrones". Compraron arte, no pagaban a los artistas que creabann. Que sólo se utiliza el arte para cubrir sus pecados. En lo que se refiere a la recogida de Tita, al mismo tiempo que admiro el hecho de que tiene un gusto personal, ella no puede, por ningún estiramiento de la imaginación, ser descrito como el gran arte, y no es ciertamente vale la pena, sobre todo en el clima actual, 800 millones de euros, y ciertamente no a los españoles, que ya han pagado por una Colección Thyssen-Bornemisza. Se necesitan dos Thyssen-Bornemisza Collections como un agujero en la cabeza.Sin embargo, si está de acuerdo con todo lo que diga, siempre hay la opción de dar la bienvenida y el alquiler de colección de Tita para su país. Estoy seguro de que ella estaría encantada. Tienen un fin de semana agradable.Saludos desde Inglaterra David RL Litchfield
Thank You Very Much, David!
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