Playa bonita Fue premiada la obra de Hugo Midón. Un espectáculo pensado y realizado para que disfrutaran chicos y grandes.
Por: Laura Gentile
La encantadora y divertida Playa bonita, la producción más reciente de Hugo Midón, resultó la elegida como Mejor Obra de Teatro Infantil. El premio fue recibido por su hijo Julián, ya que Midón no pudo acudir a la ceremonia. "La verdad es que es una alegría enorme para él -aseguró Julián Midón a Clarín-, sobre todo con este espectáculo que hizo con un elenco tan joven. Al proyecto se integró gente que viene formándose con él desde muy chiquitos, en su escuela de teatro Río Plateado. Por eso, estoy seguro, este premio tiene para él una carga emocional muy grande".
Justamente este juvenil elenco conformado por ocho actrices y un actor, con una edad promedio de 17 años, todos presentes en la ceremonia, es una de las claves que vuelven a la obra deliciosa. Federico Justo, Magalí Antonowicz, Valentina Corbeña, Sofía Germino, Cecilia Gigena, Guadalupe Halfon, Sheila Saslavsky, Marian Vieyra y Michelle Wiernik conforman un dream team hípertalentoso capaz de bailar, actuar y fascinar.
"Es una obra que surgió de mis últimas idas a Brasil -confesaba el propio Midón pocos días antes de estrenar la obra, en mayo de este año-, un enamoramiento de la playa como lugar de observación de situaciones, te cruzás con gente y escuchás un pedacito de una conversación y seguís, entonces te empezás a imaginar cómo terminaría esa conversación".
La playa como lugar de contacto con la naturaleza, como lugar de libertad, opuesto a las ciudades llenas de miedo. "Yo veo a los chicos y a los padres llenos de miedo de andar por la calle, ya no miedo de que los chicos jueguen en la calle, sino de transitarla", reflexionaba entonces el artista.
La obra está estructurada en base a pequeñas historias que pueden funcionar en forma autónoma: el ardor que despierta el salvavidas en las bañistas, la glamorosa producción de fotos donde la modelo es literalmente una estrella y el fotógrafo lleva el poco glmoroso nombre de Pocho, el romance de la Sirenita Encantada y el Pez Espada, la mafia china...Todo enriquecido por juegos de palabras y frases hechas que aportan ironía a los textos.
Con una sincronía asombrosa, la puesta evidencia dedicación extremas, todo está cuidado hasta el último detalle: la preciosa coreografía con claras reminiscencias de Esther Williams (a cargo de Vivi Wlosko), la murga trabajada junto a dos expertos como Franco Carzedda y Oski Guzmán, el vestuario exquisito de Mónica Toschi y la infalible música de Carlos Gianni que abarca desde cha cha chá pasando por una especie de tema de telenovela de los años 70 hasta candombe. Todo acorde a la firma de su autor.
Fuente: Clarín
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