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A Dios le pido. Los artistas y el público vistieron prendas de color blanco como símbolo de paz. (AFP)
Un grupo de artistas hispanoamericanos autofinanciados convocó a una multitud en la Plaza de la Revolución. Vicente Poveda, desde La Habana.
El esperado concierto “Paz sin fronteras”, organizado por el colombiano Juanes en La Habana, consiguió superar la barrera del millón de asistentes, según sus organizadores. “Están diciendo desde fuera que estamos batiendo récords. En este momento hay un millón ciento cincuenta mil personas asistiendo a este concierto”, anunció el cantante español Miguel Bosé, al salir al escenario dispuesto en la Plaza de la Revolución para cantar junto al colombiano el hit “Me enamora”. “¡Es una maravilla, una maravilla!”, exclamó Juanes quien, hacia el cierre del festival, les dedicó una canción a los secuestrados en la selva colombiana y luego recibió una ovación del público.
Al comienzo del concierto, de cinco horas de duración, el cantante colombiano apareció en el escenario junto al resto de artistas –cubanos y extranjeros–, todos vestidos de blanco. La cantante puertorriqueña Olga Tañón, encargada de abrir el evento, expresó ante una multitud eufórica: “Juntos estamos haciendo historia aquí en la Plaza de la Revolución de La Habana, vamos a darle un aplauso al mundo entero de parte de Cuba”.
El escenario, de 400 metros cuadrados, se levantó en el mismo lugar en el que el papa Juan Pablo II celebró misa, durante su histórica visita a Cuba en 1998. El emplazamiento, con la Biblioteca Nacional de fondo, fue elegido al no encontrarse ahí símbolos políticos, en una plaza dominada por el enorme monumento al héroe nacional cubano José Martí y la famosa efigie del Che Guevara.
Pese al intenso sol y temperaturas superiores a los 30 grados centígrados, el público abarrotaba toda la superficie de la plaza, la gran mayoría vistiendo también prendas blancas, tal y como habían pedido los organizadores.
Entre los demás artistas participantes venidos de afuera, se encontraban el también puertorriqueño Danny Rivera, los españoles Miguel Bosé, Luis Eduardo Aute y Víctor Manuel (quien cantó “Sólo pienso en ti”, coreado por el público), el italiano Jovanotti y el ecuatoriano Juan Fernando Velasco. Por su parte, la amplia representación cubana estuvo integrada por Amaury Pérez, Los Van Van, Silvio Rodríguez, Orishas, Carlos Varela, X Alfonso, y el conjunto cubano-venezolano Cucú Diamante y Yerbabuena.
DE ESTEFAN A OBAMA. El concierto, que careció de patrocinadores y estuvo financiado por los artistas junto al Instituto Cubano de la Música, estuvo precedido por semanas de duras críticas por parte de sectores del exilio cubano en Miami, entre ellos Gloria Estefan, que acusaba a los participantes de apoyar al gobierno presidido por Raúl Castro. Pero Juanes consideró que su concierto era “una manera de empezar a tejer lazos de unión”, también entre los cubanos de Cuba y los del exilio en Miami. “Este concierto quiere decir que somos hermanos, aunque pensemos distinto”, declaró el cantante, señalando que deseaba repetir el mismo concierto en Miami, donde él vive.
Y hasta el presidente Obama tuvo opinión en el asunto: “No creo que perjudique a las relaciones estadounidense-cubanas este tipo de intercambios culturales”, declaró al programa informativo Al punto que se retransmite los domingos por la cadena hispana Univisión de Miami. “Yo quisiera ver a una Cuba que comienza a demostrar que quiere alejarse de algunas de las prácticas antidemocráticas del pasado”, agregó el mandatario. Como para no irritar demasiado a su audiencia, Juanes, emocionado, le respondió por Twitter: “Lo que dice Obama nos parece que lo hace aún más un Caballero de la Paz. Por él y miles de razones más, estamos hoy en Cuba”, escribió poco antes del comienzo de su concierto.
El esperado concierto “Paz sin fronteras”, organizado por el colombiano Juanes en La Habana, consiguió superar la barrera del millón de asistentes, según sus organizadores. “Están diciendo desde fuera que estamos batiendo récords. En este momento hay un millón ciento cincuenta mil personas asistiendo a este concierto”, anunció el cantante español Miguel Bosé, al salir al escenario dispuesto en la Plaza de la Revolución para cantar junto al colombiano el hit “Me enamora”. “¡Es una maravilla, una maravilla!”, exclamó Juanes quien, hacia el cierre del festival, les dedicó una canción a los secuestrados en la selva colombiana y luego recibió una ovación del público.
Al comienzo del concierto, de cinco horas de duración, el cantante colombiano apareció en el escenario junto al resto de artistas –cubanos y extranjeros–, todos vestidos de blanco. La cantante puertorriqueña Olga Tañón, encargada de abrir el evento, expresó ante una multitud eufórica: “Juntos estamos haciendo historia aquí en la Plaza de la Revolución de La Habana, vamos a darle un aplauso al mundo entero de parte de Cuba”.
El escenario, de 400 metros cuadrados, se levantó en el mismo lugar en el que el papa Juan Pablo II celebró misa, durante su histórica visita a Cuba en 1998. El emplazamiento, con la Biblioteca Nacional de fondo, fue elegido al no encontrarse ahí símbolos políticos, en una plaza dominada por el enorme monumento al héroe nacional cubano José Martí y la famosa efigie del Che Guevara.
Pese al intenso sol y temperaturas superiores a los 30 grados centígrados, el público abarrotaba toda la superficie de la plaza, la gran mayoría vistiendo también prendas blancas, tal y como habían pedido los organizadores.
Entre los demás artistas participantes venidos de afuera, se encontraban el también puertorriqueño Danny Rivera, los españoles Miguel Bosé, Luis Eduardo Aute y Víctor Manuel (quien cantó “Sólo pienso en ti”, coreado por el público), el italiano Jovanotti y el ecuatoriano Juan Fernando Velasco. Por su parte, la amplia representación cubana estuvo integrada por Amaury Pérez, Los Van Van, Silvio Rodríguez, Orishas, Carlos Varela, X Alfonso, y el conjunto cubano-venezolano Cucú Diamante y Yerbabuena.
DE ESTEFAN A OBAMA. El concierto, que careció de patrocinadores y estuvo financiado por los artistas junto al Instituto Cubano de la Música, estuvo precedido por semanas de duras críticas por parte de sectores del exilio cubano en Miami, entre ellos Gloria Estefan, que acusaba a los participantes de apoyar al gobierno presidido por Raúl Castro. Pero Juanes consideró que su concierto era “una manera de empezar a tejer lazos de unión”, también entre los cubanos de Cuba y los del exilio en Miami. “Este concierto quiere decir que somos hermanos, aunque pensemos distinto”, declaró el cantante, señalando que deseaba repetir el mismo concierto en Miami, donde él vive.
Y hasta el presidente Obama tuvo opinión en el asunto: “No creo que perjudique a las relaciones estadounidense-cubanas este tipo de intercambios culturales”, declaró al programa informativo Al punto que se retransmite los domingos por la cadena hispana Univisión de Miami. “Yo quisiera ver a una Cuba que comienza a demostrar que quiere alejarse de algunas de las prácticas antidemocráticas del pasado”, agregó el mandatario. Como para no irritar demasiado a su audiencia, Juanes, emocionado, le respondió por Twitter: “Lo que dice Obama nos parece que lo hace aún más un Caballero de la Paz. Por él y miles de razones más, estamos hoy en Cuba”, escribió poco antes del comienzo de su concierto.
Fuente: (DPA), Crítica
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