Recién llegada a México, la cantante de Chambao -María del Mar Rodríguez Carnero o, simplemente, Lamari, como la mayoría la conoce- se instala en la habitación del hotel y atiende la llamada que llega de Buenos Aires, porque luego de los shows en México el grupo viene a la Argentina. Está en la segunda etapa de una gira por América latina. Mañana cantará en Buenos Aires; después, en Chile, y, finalmente, viajará al Perito Moreno para dar, con esa postal de glaciares continentales como fondo, un recital que será registrado y publicado.
Al teléfono, su voz suena fresca, sin los malestares que a cualquiera pueden aquejar tras unas cuantas horas de vuelo para cruzar el Atlántico. "Acabamos a fines de octubre con la gira, y ahí ya estaré dedicada en la composición de otro disco", adelanta.
Esta cantante es la que hace casi una década creó Chambao con un grupo de amigos. Buscaron un subgénero musical, el chill flamenco, a modo de etiqueta para llevar a las compañías discográficas sus demos (maquetas se les llama en España y en varios países de América). Así se comenzó a hablar de esa mezcla de flamenco y electrónica.
Siempre con Lamari al frente, Chambao fue creciendo. Llegaron nuevos discos. El protagonismo de la cantante hizo que su voz sonara junto con la de Ricky Martin en un tema y que terminara siendo aclamada más allá de su país. En la última década, Lamari pasó de ser anónima a famosa; pero no todo fue para las buenas noticias. También padeció cáncer y escribió, junto con su hermana, un libro que habla de eso. Después, volvió a grabar y a salir a la ruta.
¿Si influyó todo aquello (la fama y la enfermedad) en su vida y en su música? Claro que sí. "Todo influye -dice-. Teniendo un trabajo de este tipo es normal que pueda influir cualquier cosa, tanto positiva como negativa. El libro, al contar la manera como viví el cáncer y la quimioterapia, terminó siendo algo natural y una ayuda. A la hora de escribir el libro o las canciones como las del disco Con otro aire , no me he planteado censuras, pero tampoco quise escribir letras que no salieran naturalmente."
- ¿Cómo imaginás que será el próximo disco?
-Teniendo en cuenta que todavía no está hecho, creo que contará nuevas historias, de las personales y no tanto. En cuanto a la música, digamos que tiro pa la fusión del flamenco con la electrónica, que es lo que empezamos a hacer con la primera maqueta en 2000. Aquello no fue algo buscado, sino, más bien, casual. El flamenco, por haber nacido en Málaga, es en lo que más he estado desde chiquitita. No diría que es esencial, pero sí lo que me sale. Si me saliera cantar pop, haría eso. No hago música buscando un estilo concreto.
-¿Vas a viajar a El Calafate para grabar un video de un disco que ya estás terminando de presentar?
-Qué buena pregunta. Es raro después de dos años de salido el disco [se ríe]. No, en realidad, se le propuso a la compañía discográfica con la que trabajo la grabación de un directo [un recital] con el entorno natural de los glaciares. Es superbonito a la hora de grabar un directo de una hora y cuarto, con canciones que vayan en ese marco. Por ahora, sólo estuve viendo fotos de ese lugar.
Mauro Apicella
Para agendar
Chambao, El grupo de la cantante Lamari vuelve a presentarse en Buenos Aires. Martes 29/9, a las 21.30.
Teatro Gran Rex, Corrientes 857. Entradas desde $ 60.
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