La Boca comenzó como un pequeño barrio muy humilde, lleno de galpones, donde vivían la mayoría de los trabajadores de las fábricas que se emplazaban alrededor del río que la atraviesa.
Luego, con el pasar de los años, el barrio de La Boca se fue poblando paulatinamente de inmigrantes, en su mayoría italianos, los cuales llegaban al lugar debido a que ahí se emplazaban unos cuantos centros industriales muy importantes, por lo que el trabajo, que si bien no era muy bien pago, era bastante abundante.
Luego, en un intento por embellecer el barrio, los habitantes fueron pintando sus humildes casas de chapa de pintorescos y saltones colores, como el rojo, amarillo y azul, una de las razones por las que el barrio se ha vuelto famoso.
La mayoría de las casillas que presentan estos colores se emplazan en el famoso “Paseo de la Boca“, un lugar lleno de exposiciones de artistas callejeros locales y de todos lados de Buenos Aires. Hoy en día, el sitio de Buenos Aires que más concurrencia turística atrae todos los años.
Por lo que visitando La Boca, no sólo visitará un bello y pintoresco, lleno de atracciones interesantes y espectáculos callejeros, sino que también recorrerá un lugar que resulta muy importante para la cultura e historia de los argentinos.
Fuente: trotamillas
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