RODEADA DE SU GENTE CONCHA DEL RÍO, MEZCLA DE LOLA FLORES Y ROCÍO JURADO, RECIBE LOS MIÉRCOLES. UN LUJO.Noralih Gago cuenta cómo creó a Concha del Río Una estrella decadente y entrañable que brilla en el Anfitrión.
Por: Sandra Commisso
Como salida de una postal de otra época, Concha del Río es dueña y señora de la escena. Ese es su mundo y ella lo domina a la perfección. Es más, lo extiende hasta llegar directo al corazón del público. En Anfitrión Cabaret, Concha del Río (el personaje creado por Noralih Gago) sigue alimentando su leyenda porque es un show, hecho a su medida, más allá de la excelente compañía de otros actores con sus deliciosas creaciones.
¿Cómo es posible que una diva en plena decadencia, egocéntrica, vanidosa y con cierto desdén hacia el mundo, atraiga tanto? ¿Será que esas son las cualidades que debe tener toda diva? Como sea, Noralih logra hacer de esta mujer con todos los elementos como para detestarla, un ser absolutamente seductor y querible. De blanco, con brillos, con plumas, con pestañas postizas y turbante, Concha es un ser atemporal. A Noralih le alcanza con pocos gestos y frases acotadas para delinear con minuciosidad a esta criatura. Su modo de hablar afectado, petulante, por donde se escapan indicios de su origen (falsamente centroamericano), su risa (casi tos) un tanto diabólica que ya es su marca registrada y, eso sí, una brillante voz para interpretar algunas desgarradas canciones de amor, todo contribuye para convertirla en desopilante.
Concha del Río nació de la imaginación de Gago en 2001 como uno de los personajes del unipersonal Solita para todo, que dirigía Juan Parodi. Pero pegó y creció tanto que ya hace tres años, en el 3340, con humos de cabaret, tomó más protagonismo como presentadora. Y ahora, en el Anfitrión Cabaret, es el hilo conductor del resto de los personajes interpretados, entre otros, por Marcelo Keller, Mónica Cabrera, Pablo Palavecino, Gimena Riestra, Silvit Yori, Teresa Murias, Matilde Campilongo, Meery Hernández, Leo Bosio y Mariela Acosta que se van rotando en diferentes personajes y en distintas funciones.
"A mí me sigue sorprendiendo Concha en cada función", dice Noralih y se sorprende a sí misma hablando en tercera persona, lo cual indica lo avasalladora que resulta la diva. "Es increíble la interacción con el público; la gente participa muchísimo del show y hace entrar enseguida a cualquiera en su juego", dice. Inspirada, en algunos trazos en Lola Flores en una cruza con Rocío Jurado y otras autoproclamadas estrellas, de menor categoría, Concha se va transformando en cada función con lo que sucede dentro y fuera del escenario. "Recuerdo que una vez, por la televisión española, vi un homenaje a Lola Flores en el que Rocío cantaba con un pimpollo de rosa en la mano y cuando decía se rompió nuestro amor, destrozaba el pimpollo. Eso me impactó y lo incorporé para Concha". Ella podría ser un alter ego femenino del Chino Amado (líder de Los Amados), con los clichés a flor de piel y la desmesura como medida.
En cada función, se desarma el teatro para convertirse en cabaret, con las meseras y acomodadores recibiendo al público, invitado de lujo de la sala iluminada con luces rojas y ambiente kistch. Y empieza el viaje al mundo empalagoso y estridente de una mujer sin igual, Concha del Río.
Anfitrión
Venezuela 3340 - Capital Federal
4931-2124
Horarios: miércoles 21:00.
Como salida de una postal de otra época, Concha del Río es dueña y señora de la escena. Ese es su mundo y ella lo domina a la perfección. Es más, lo extiende hasta llegar directo al corazón del público. En Anfitrión Cabaret, Concha del Río (el personaje creado por Noralih Gago) sigue alimentando su leyenda porque es un show, hecho a su medida, más allá de la excelente compañía de otros actores con sus deliciosas creaciones.
¿Cómo es posible que una diva en plena decadencia, egocéntrica, vanidosa y con cierto desdén hacia el mundo, atraiga tanto? ¿Será que esas son las cualidades que debe tener toda diva? Como sea, Noralih logra hacer de esta mujer con todos los elementos como para detestarla, un ser absolutamente seductor y querible. De blanco, con brillos, con plumas, con pestañas postizas y turbante, Concha es un ser atemporal. A Noralih le alcanza con pocos gestos y frases acotadas para delinear con minuciosidad a esta criatura. Su modo de hablar afectado, petulante, por donde se escapan indicios de su origen (falsamente centroamericano), su risa (casi tos) un tanto diabólica que ya es su marca registrada y, eso sí, una brillante voz para interpretar algunas desgarradas canciones de amor, todo contribuye para convertirla en desopilante.
Concha del Río nació de la imaginación de Gago en 2001 como uno de los personajes del unipersonal Solita para todo, que dirigía Juan Parodi. Pero pegó y creció tanto que ya hace tres años, en el 3340, con humos de cabaret, tomó más protagonismo como presentadora. Y ahora, en el Anfitrión Cabaret, es el hilo conductor del resto de los personajes interpretados, entre otros, por Marcelo Keller, Mónica Cabrera, Pablo Palavecino, Gimena Riestra, Silvit Yori, Teresa Murias, Matilde Campilongo, Meery Hernández, Leo Bosio y Mariela Acosta que se van rotando en diferentes personajes y en distintas funciones.
"A mí me sigue sorprendiendo Concha en cada función", dice Noralih y se sorprende a sí misma hablando en tercera persona, lo cual indica lo avasalladora que resulta la diva. "Es increíble la interacción con el público; la gente participa muchísimo del show y hace entrar enseguida a cualquiera en su juego", dice. Inspirada, en algunos trazos en Lola Flores en una cruza con Rocío Jurado y otras autoproclamadas estrellas, de menor categoría, Concha se va transformando en cada función con lo que sucede dentro y fuera del escenario. "Recuerdo que una vez, por la televisión española, vi un homenaje a Lola Flores en el que Rocío cantaba con un pimpollo de rosa en la mano y cuando decía se rompió nuestro amor, destrozaba el pimpollo. Eso me impactó y lo incorporé para Concha". Ella podría ser un alter ego femenino del Chino Amado (líder de Los Amados), con los clichés a flor de piel y la desmesura como medida.
En cada función, se desarma el teatro para convertirse en cabaret, con las meseras y acomodadores recibiendo al público, invitado de lujo de la sala iluminada con luces rojas y ambiente kistch. Y empieza el viaje al mundo empalagoso y estridente de una mujer sin igual, Concha del Río.
Anfitrión
Venezuela 3340 - Capital Federal
4931-2124
Horarios: miércoles 21:00.
No hay comentarios:
Publicar un comentario