El director y dramaturgo argentino adujo que es difícil llevar el día a día de la sala Villarroel, ubicada Barcelona, desde Buenos Aires, donde vive. El director de Automáticos supo imprimirle su sello y por eso ya lo extrañan. Por: Justo Barranco*
Javier Daulte deja la Villarroel. El dramaturgo y director, una de las grandes figuras del teatro argentino contemporáneo, aceptó la dirección de la sala en el 2006, y la dejará tras programar la próxima temporada y después de haber logrado durante estos años reformar completamente la estructura de la sala - se redujeron las localidades y se levantó la gradería-y consolidar una línea de programación "donde prevalece el autor vivo, especialmente el creador local con su propia compañía, que realiza tanto la dramaturgia como la dirección de la obra", según explicaba ayer Daulte a La Vanguardia desde Buenos Aires. Precisamente su residencia habitual en la capital argentina ha sido uno de los motivos que, señala, le han llevado a dejar la dirección de la Villarroel, ya que le resultaba complicado seguir el día a día de la sala teatral barcelonesa.
Según afirmaba ayer Daulte (Buenos Aires, 1963) en conversación telefónica, "se cumple el plazo que nos habíamos puesto con Focus (empresa que programa la Villarroel y los teatros Romea, Condal y Goya) y siempre está, por supuesto, la alternativa de continuar, pero la distancia es un tema decisivo. Vivo en Buenos Aires y ya dije cuando asumí este cargo que la condición que configuraba mi contrato era que el lugar de residencia seguiría siendo Argentina, y eso hace complicado seguir el día a día. La idea de dar una nueva línea de programación a la Villarroel durante este primer periodo ha ido muy bien, pero ahora que ya la tiene hay un día a día que me es muy complicado, casi imposible, controlar desde tan lejos. Pero estoy muy contento con lo hecho y con el periodo que termina. Y todavía tengo que dirigir un espectáculo en la Villarroel esta temporada, Caperucita, que estreno dentro de un mes en Argentina, una versión contemporánea y adulta que se basa un poco en el cuento clásico y que en enero comenzaremos a preparar en Barcelona con elenco de allí para estrenarla hacia marzo".
"La verdad - añade Daulte-es que la gestión no es mi vocación, está bien haberlo hecho un tiempo, ya lo hice antes en una sala bonaerense, pero lo que quiero es escribir y dirigir, y ahí sí tengo muchos proyectos. Así que tras el verano anunciaremos la programación 2009-2010 y al final del año llegará un nuevo responsable para la sala, que no tengo la menor idea de quién será".
Aunque hay quien señala a Carol López (Barcelona, 1969), que precisamente bajo el mandato de Daulte logró un gran éxito con la obra Germanes,estrenada en el 2008 y que se repuso de nuevo esta temporada. Ayer, el autor de obras como La felicidad o Nunca estuviste tan adorable se mostraba muy contento de haber podido ayudar durante este tiempo "a que aparezcan nuevas poéticas en el teatro catalán" tras haber programado a autores directores como Jordi Casanovas, Albert Espinosa o la propia López. La Villarroel abrirá la nueva temporada con la Utopía de Leo Bassi.
© La Vanguardia y Clarín- Revista Ñ
Según afirmaba ayer Daulte (Buenos Aires, 1963) en conversación telefónica, "se cumple el plazo que nos habíamos puesto con Focus (empresa que programa la Villarroel y los teatros Romea, Condal y Goya) y siempre está, por supuesto, la alternativa de continuar, pero la distancia es un tema decisivo. Vivo en Buenos Aires y ya dije cuando asumí este cargo que la condición que configuraba mi contrato era que el lugar de residencia seguiría siendo Argentina, y eso hace complicado seguir el día a día. La idea de dar una nueva línea de programación a la Villarroel durante este primer periodo ha ido muy bien, pero ahora que ya la tiene hay un día a día que me es muy complicado, casi imposible, controlar desde tan lejos. Pero estoy muy contento con lo hecho y con el periodo que termina. Y todavía tengo que dirigir un espectáculo en la Villarroel esta temporada, Caperucita, que estreno dentro de un mes en Argentina, una versión contemporánea y adulta que se basa un poco en el cuento clásico y que en enero comenzaremos a preparar en Barcelona con elenco de allí para estrenarla hacia marzo".
"La verdad - añade Daulte-es que la gestión no es mi vocación, está bien haberlo hecho un tiempo, ya lo hice antes en una sala bonaerense, pero lo que quiero es escribir y dirigir, y ahí sí tengo muchos proyectos. Así que tras el verano anunciaremos la programación 2009-2010 y al final del año llegará un nuevo responsable para la sala, que no tengo la menor idea de quién será".
Aunque hay quien señala a Carol López (Barcelona, 1969), que precisamente bajo el mandato de Daulte logró un gran éxito con la obra Germanes,estrenada en el 2008 y que se repuso de nuevo esta temporada. Ayer, el autor de obras como La felicidad o Nunca estuviste tan adorable se mostraba muy contento de haber podido ayudar durante este tiempo "a que aparezcan nuevas poéticas en el teatro catalán" tras haber programado a autores directores como Jordi Casanovas, Albert Espinosa o la propia López. La Villarroel abrirá la nueva temporada con la Utopía de Leo Bassi.
© La Vanguardia y Clarín- Revista Ñ
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