El acto de presentación fue dirigido por Lito Cruz Explicó los mecanismos para que los artistas reciban ayuda económica Y dijo que este año harán un censo de salas y grupos Anunciaron distintos festivales
PATRICIA KOLESNICOV
El objetivo fundamental es recuperar al público que perdimos. Conseguir que la gente cierre la puerta de su casa del lado de afuera y venga a ver un espectáculo, dijo ayer el señor Oscar A. Cruz, Director Ejecutivo del Instituto Nacional del Teatro. El mismo hombre, que también es el actor Lito Cruz, agregó ayer en la presentación de la entidad: Tenemos que gastar toda la plata para que el año que viene no nos den menos.El acto tuvo el clima de Lito, no el del señor Oscar A. De manera informal y relajada, todos parados alrededor de una mesa, Cruz presentó al consejo de dirección de este organismo creado por la Ley del Teatro y que tendrá entre sus funciones una fundamental: repartir dinero -subsidios, préstamos, becas- para hacer crecer la actividad teatral en todo el país.Seguramente el corazón era grande, porque la sala era bastante chica para todos los que querían estar en la largada del Instituto. Actores como Pepe Novoa (presidente de la Asociación Argentina de Actores) o Cipe Lincovsky, entre muchos otros. Gente de CoCoa (Coreógrafos Contemporáneos Asociados). Gente del MATE (Movimiento de Apoyo al Teatro) y de otras agrupaciones de teatristas.El INT funcionará, por ahora, en el séptimo piso de la Casa del Teatro, que está recién pintado y con los pisos brillosos. Allí, Cruz habló de su emoción por la puesta en marcha de algo por lo que se venía peleando desde hacía tiempo y explicó por qué caminos se usarán los aproximadamente 11.143.000 pesos con los que cuenta este año. Parece mucha plata -aclaró el Consejo de Dirección- pero es menos de la mitad de lo que tiene el Teatro San Martín.En 1998 no habrá préstamos ni becas, sólo subsidios. Los aspirantes deberán presentar sus pedidos hasta el 31 de mayo. En ese período también harán un censo para saber cuántas salas y cuántos grupos hay. Mientras tanto, ya se abrió el concurso para elegir jurados. Los que ganen formarán un cuerpo que evaluará los proyectos presentados.Además del director ejecutivo, el Consejo está formado por dos secretarios generales -Rafael Barrientos y César Carducci-, cuatro representantes nacionales del Quehacer Teatral -Rafael Bruzza, Rubens Correa, Carlos Catalano y Alejandro Finzi, una representante por Secretaría de Cultura de la Nación -Alicia Saab- y seis representantes regionales: Rafael Barrientos (Región Centro), Luis Andrada (Nordeste), José Asfora (Noroeste), Alejo Sosa (Cuyo), César Carducci (Centro-Litoral) y Concepción Roca (Patagonia).En cada región habrá una delegación del Instituto. Los proyectos llegarán a través de estas delegaciones y pasarán al jurado, que les dará un orden de prioridad. Como criterios, ya se sabe que los autores nacionales y regionales están primero y que se evaluará cuál es el interés cultural de cada propuesta, cuando el Consejo se ponga de acuerdo en el significado de esta expresión.En el Consejo -confesó Rafael Bruzza- nos llevamos mal. Eso garantiza que las resoluciones son el resultado de un equilibrio de fuerzas. Por ahora, se pusieron de acuerdo en unas cuantas cosas. En que abrirán concursos para editar obras de teatro, unos 25 libros por año. En que declaran de interés cultural todas las salas reconocidas de teatro independiente. En que harán la Fiesta Nacional del Títere, en La Pampa; la del teatro danza, en la Capital; la nacional del teatro, en Córdoba; el festival latinoamericano de mimo, en Santa Fe y el evento 300 ciudades cuentan su historia, sus mitos y sus leyendas, en todo el país.
Fuente: Clarín
PATRICIA KOLESNICOV
El objetivo fundamental es recuperar al público que perdimos. Conseguir que la gente cierre la puerta de su casa del lado de afuera y venga a ver un espectáculo, dijo ayer el señor Oscar A. Cruz, Director Ejecutivo del Instituto Nacional del Teatro. El mismo hombre, que también es el actor Lito Cruz, agregó ayer en la presentación de la entidad: Tenemos que gastar toda la plata para que el año que viene no nos den menos.El acto tuvo el clima de Lito, no el del señor Oscar A. De manera informal y relajada, todos parados alrededor de una mesa, Cruz presentó al consejo de dirección de este organismo creado por la Ley del Teatro y que tendrá entre sus funciones una fundamental: repartir dinero -subsidios, préstamos, becas- para hacer crecer la actividad teatral en todo el país.Seguramente el corazón era grande, porque la sala era bastante chica para todos los que querían estar en la largada del Instituto. Actores como Pepe Novoa (presidente de la Asociación Argentina de Actores) o Cipe Lincovsky, entre muchos otros. Gente de CoCoa (Coreógrafos Contemporáneos Asociados). Gente del MATE (Movimiento de Apoyo al Teatro) y de otras agrupaciones de teatristas.El INT funcionará, por ahora, en el séptimo piso de la Casa del Teatro, que está recién pintado y con los pisos brillosos. Allí, Cruz habló de su emoción por la puesta en marcha de algo por lo que se venía peleando desde hacía tiempo y explicó por qué caminos se usarán los aproximadamente 11.143.000 pesos con los que cuenta este año. Parece mucha plata -aclaró el Consejo de Dirección- pero es menos de la mitad de lo que tiene el Teatro San Martín.En 1998 no habrá préstamos ni becas, sólo subsidios. Los aspirantes deberán presentar sus pedidos hasta el 31 de mayo. En ese período también harán un censo para saber cuántas salas y cuántos grupos hay. Mientras tanto, ya se abrió el concurso para elegir jurados. Los que ganen formarán un cuerpo que evaluará los proyectos presentados.Además del director ejecutivo, el Consejo está formado por dos secretarios generales -Rafael Barrientos y César Carducci-, cuatro representantes nacionales del Quehacer Teatral -Rafael Bruzza, Rubens Correa, Carlos Catalano y Alejandro Finzi, una representante por Secretaría de Cultura de la Nación -Alicia Saab- y seis representantes regionales: Rafael Barrientos (Región Centro), Luis Andrada (Nordeste), José Asfora (Noroeste), Alejo Sosa (Cuyo), César Carducci (Centro-Litoral) y Concepción Roca (Patagonia).En cada región habrá una delegación del Instituto. Los proyectos llegarán a través de estas delegaciones y pasarán al jurado, que les dará un orden de prioridad. Como criterios, ya se sabe que los autores nacionales y regionales están primero y que se evaluará cuál es el interés cultural de cada propuesta, cuando el Consejo se ponga de acuerdo en el significado de esta expresión.En el Consejo -confesó Rafael Bruzza- nos llevamos mal. Eso garantiza que las resoluciones son el resultado de un equilibrio de fuerzas. Por ahora, se pusieron de acuerdo en unas cuantas cosas. En que abrirán concursos para editar obras de teatro, unos 25 libros por año. En que declaran de interés cultural todas las salas reconocidas de teatro independiente. En que harán la Fiesta Nacional del Títere, en La Pampa; la del teatro danza, en la Capital; la nacional del teatro, en Córdoba; el festival latinoamericano de mimo, en Santa Fe y el evento 300 ciudades cuentan su historia, sus mitos y sus leyendas, en todo el país.
Fuente: Clarín