Bebe: 'He aprendido a no tomarme muy en serio'

La cantante Bebe en Las Vegas. |AFP

Si no hubiera vivido lo que viví, no estaría como estoy ahora

Pablo Scarpellini | Las Vegas

El éxito la golpeó con tanta fuerza que se tuvo que tomar un respiro de la vorágine, mandarlo todo a paseo durante un tiempo. No quería que nadie la reconociera por las calles y por eso se marchó un año de viaje con una furgoneta, a conocer mundo, a dormir bajo los pinos, como ella misma cuenta.

Ahora, más de cinco años después de arrasar con su primer álbum, 'Pa fuera telerañas', Bebe, la cantante española, ha vuelto a recuperar la sonrisa y el gusto por el circo que rodea la industria musical con 'Y.', un trabajo con “canciones divertidas” y lejos de su anterior tendencia de convertirse en bandera del feminismo o de cualquier otra cosa.

Aunque no espera alcanzar ni de cerca el nivel de éxito de su primer trabajo, ya ha obtenido una nominación para un Grammy latino —ceremonia celebrada en Las Vegas hace unos días— y lo que le queda. El camino es largo para esta extremeña universal.

Pregunta: Creo que es tu primer viaje a Las Vegas. ¿Qué te parece esta locura?

Respuesta: Bien, está bien, es un parque temático curioso.

P: ¿Qué has aprendido del éxito que te ha traído hasta aquí?

R: Pues bastantes cosas (risas). A tomarme las cosas con mucha más filosofía, a volver a recuperar el humor y no tomarme muy en serio.

P: ¿Te sigue agrediendo el entorno?

R: Ahora ya no me agrede nada. En su momento sí, y porque fue un bombardeo constante y un trabajo a un nivel para el que no estaba preparada. Fue un exceso. Ya me lo tomo como que he reposado todas las cosas y las he transformado. Alguna vez me han preguntado qué anularía de aquel momento, y yo digo que no anulo nada. Todo me ha servido y si no hubiera vivido lo que viví no estaría como estoy ahora. Tranquilita. Lo que vives te hace ser de una manera y ser más optimista.

P: Pero parece que lo echabas de menos porque has vuelto.

R: Claro joder, porque si jugamos, jugamos. Lo que no me gusta es retirarme a la mitad del juego. Me gusta jugar.

P: ¿Tenías presión por volver a superar lo que ya hiciste?

R: En realidad la presión vino de fuera. La compañía discográfica tenía prisa por sacar el disco, pero no me presionaba demasiado el hecho del chispazo que pegué antes porque sabía que no iba a hacer algo similar, y el efecto fue todo lo contrario. Me aliviaba que te cagas, para que nos vamos a engañar. Y eso me ayudó a estar tranquila y componer.

P: Decía la periodista Elvira Lindo en un libro que cuando los periodistas empezamos a hacer historias pensando en los gustos del público perdimos la batalla. ¿Qué opinas?

R: Estoy totalmente de acuerdo. En la música es lo mismito.

P: Pero eso es lo que hace la mayoría…

R: Cada uno puede hacer lo que quiera. Pero lo que hace la mayoría a mí no me afecta.

P: Debe ser una ventaja para ti, destacar por ser más auténtica.

R: A mí me da igual, ni me lo planteo, hago lo que me da la gana y punto.

P: ¿Te gustas más en este disco que en el anterior?

R: Sí, porque estoy más evolucionadita, más contenta con muchas cosas. Las canciones son muy divertidas. Era otro momento de mi vida. Recogí la experiencia de los dos últimos años, cuando me fui de viaje. Está la parte más bonita, más alegre. Los años anteriores eran un poco más oscuros. Estaba peleada con el mundo. En este disco me lo he pasado muy bien.

P: ¿Tiraste mucho a la basura?

R: No, a la basura no tiro nada. Luego lo releo, vuelvo a analizar las cosas. Cuando lees cosas antiguas te recuerdas los estados en los que has estado y eso sirve. Tengo muchas cosas en el tintero.

P: El otro día sonaba tu música en una fiesta en Hollywood. ¿Cómo le sienta a tu ego escucharte en tantos sitios del mundo?

R: Me sigo quedando flipada, y ya no tanto en Estados Unidos o América Latina, donde hay hispanohablantes, pero cuando me llaman de Grecia, o de Polonia, alucinas. No es que le afecte a tu ego, es que te quedas sorprendido. Va a ser verdad que la música es sólo música y se puede disfrutar en cualquier parte.

P: ¿Pasarías de los premios si pudieras?

R: Sí, la verdad es que me dan igual, pero me siento agradecida cuando me los dan o me nominan, no los rechazo. No entiendo mucha toda esta película. Uno hace las cosas porque las quieres hacer.

P: ¿Qué opinas del movimiento latino en Estados Unidos?

R: No lo conozco mucho. Pero tengo que reconocer que cuando estuve en la entrega de los Grammys latinos en 2005 aluciné con la fiesta. Está muy bien montada. Está bien que seamos latinos, es una manera de reafirmarse. Estamos en un mundo donde necesitamos reafirmarnos constantemente.

P: ¿Qué opinas de EEUU?

R: Geográficamente maravilloso. No conozco mucho. También hay muchas cosas que están pasando en mi país que no me gustan. Prefiero no entrar en política. Hay gente agradable, pero en todas partes se cuecen habas. La gira por Estados Unidos fue maravillosa, nos cogimos un autobús y tocando en baretos donde no siempre llenábamos. Estuvo guay.

P: ¿Te has planteado dejar Madrid y marcharte de España?

R: Si, y lo haré. Tampoco mucho tiempo. Soy muy inquieta, aunque mi vínculo está en España. Todavía no he encontrado nada mejor.

P: ¿Te tomarás otro descanso después de este disco?

R: Todavía no lo sé. El anterior lo hice porque me apetecía, lo necesitaba. Es un lujo, pero se corren riesgos. Había gente que no estaba de acuerdo, pero es una decisión personal. Y nos vendrían bien a todo el mundo desconectarnos de nuestras vidas un rato.

P: Ojalá fuera tan fácil.

R: ¿Quién dijo que fuera fácil?

Fuente: El Mundo