Música en el Planetario y en el hospital Borda
Dos actividades del festival fuera del circuito habitual de espacios culturales, auditorios y teatros porteños
"Y ahora todos los bailarines van a estar juntos sobre el escenario para bailar «El internado» [de Canaro]. Casi nada", dice el presentador Omar Viola, con tono socarrón. Porque no sólo los internados del hospital Borda se divierten acá (ellos asustan a la fotógrafa de LA NACION en las escaleras del hospital).
Omar Viola es presentador desde hace ocho años del encuentro tanguero del Borda, que no es otra cosa que un festivalito dentro del Festival de Tango que cada año se realiza en Buenos Aires. Viola está allí -desde el primer encuentro- en perfecta sintonía con lo que sucede, incluso con las ganas de hacer un chiste inocente para los internos. Por ahí también anda el jefe del servicio. A él no se le borra la sonrisa de la cara durante lo que dura el espectáculo y los internos disfrutan de la música y de la milonga, porque también bailan frente al proscenio, entre un show y el siguiente.
Sería tonto pensar que esa situación ideal es la que reina durante todo el día en este lugar. Pero no es exagerado decir que en una mañana de miércoles, en el cuarto piso del Borda, donde está el teatro, se la pasa mucho mejor que en cualquier calle o avenida de una ciudad grande y de locos, como Buenos Aires.
Primero suben los bailarines. Son cinco parejas de profesionales que ofrecen estilos muy diferentes entre sí. Eso da una buena muestra de la variedad del tango danza. Al ratito llega el turno del espectáculo Tangos canallas , con Carlos Durañona y la cantante Jana Purita, que con tanta calidez se mete en el personaje de una cancionista que trae viejas perlas del repertorio criollo.
Más tarde llega la cantante Dolores Solá acompañada por un trío que anda por un repertorio similar y que también incluye rancheras y foxtrot.
El espectáculo está por terminar y el Borda se desborda un poco, de alegría, cuando algunos cantores aficionados que viven ahí se animan a subir a cantar, como si fuera una peña.
Y pensar que hay gente que quiere erradicar estas instituciones -el Borda, de los muchachos, y el neuropsiquiátrico Moyano, de las chicas, en la otra cuadra- para instalar otras dependencias estatales o darles usos comerciales a esos cotizados predios.
El último domingo el escenario era totalmente diferente. Los músicos eran el guitarrista Aníbal Arias y el bandoneonista Osvaldo "Marinero" Montes. La escenografía estaba compuesta por las constelaciones de imágenes que emitía el proyector del Planetario Galileo Galilei de Palermo, sobre la media esfera de su techo.
Primero fueron postales de Buenos Aires; luego, un firmamento de estrellas que el dúo de veteranos tangueros transitó en la penumbra con piezas como "Caserón de tejas", "Romance de barrio", "Los mareados" y, por supuesto, "Pedacito de cielo". Fue curioso ver como una nube de estrellas se movía como bailarines en una pista de milonga (girando en sentido contrario a las agujas del reloj) con la "Milonga de mis amores".
Luego, un VJ ofreció su performance tanguera, por momentos interesante, pero muy reiterativa en sucesivos temas. Con un par habría sido suficiente.
Mauro Apicella
Agenda del día
17 Ronda clasificatoria de baile Tango Escenario. Pase a semifinales del Mundial. En La Trastienda, Balcarce 460.
20 Quinteto Pirincho y un set del Dj Tarantino. En Harrods, Florida 877.
21 Milonga y Tango Garage. Con Milena Plebs, Ezequiel Farfaro, La Guardia Hereje, Javier Cardenal Dominguez y Pablo Banchero, entre otros. Centro Cultural Konex, Sarmiento 3131.
El ingreso a Harrods es libre, para el resto de las actividades se necesita presentar las entradas gratuitas previamente adquiridas.
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