RIESGO PUBLICO. "El rol del teatro público es correr riesgos" dijo hace poco Py en una entrevista con la televisión francesa.A partir de mañana, el polémico director francés Olivier Py presentará una versión "roja" de la obra en la que sitúa a los personajes en un cine pornográfico. Así, Py repite una controversia que había iniciado con su puesta de "Tannhauser" de Wagner, en 2005 y en el mismo teatro, en la que un actor porno salía a escena con su pene erecto.
El Gran Teatro de Ginebra presenta a partir de mañana, jueves, la ópera de Alban Berg "Lulú", precedida por la polémica ante la puesta en escena del francés Olivier Py, que incluye una escena pornográfica y que ha obligado a los responsables de la sala a desaconsejarla a los menores de 16 años.
La dirección del teatro ha colgado, tanto a la entrada del mismo, como en su página de internet, la advertencia de que "para traducir las intenciones del compositor y de su inspirador Frank Wedekind, Olivier Py y su equipo han recurrido a imágenes que, si bien son cada vez más frecuentes, siguen siendo raras y poco habituales sobre un escenario lírico y podrían chocar a un espectador no advertido".
El aviso se refiere a una escena del tercer acto, donde se proyecta un vídeo sobre la "Canción del proxeneta" de Wedekind, dado que Py ha situado a los personajes en un cine de un barrio rojo, donde están viendo una película pornográfica.
La ópera de Alban Berg (1885-1935) narra la ascensión social y la caída de una joven seductora, que termina como prostituta y muere asesinada a manos de Jack el Destripador. El papel protagonista lo encarna la soprano francesa Patricia Petibon, y la música estará a cargo de la Orquesta de la Suiza Romanda, bajo la batuta de Marc Albrecht.
Esta es la segunda vez que el Gran Teatro de Ginebra se siente obligado a advertir a su público sobre el contenido de un espectáculo. El mismo Olivier Py había montado, en 2005, una controvertida ópera "Tannhauser" de Wagner, en la que un actor de cine pornográfico salía a escena en erección pero con la cara oculta bajo una máscara de toro.
Fuente: EFE. Revista Ñ
No hay comentarios:
Publicar un comentario