Para hacer flotar deseos en los clásicos barcos de papel

Marcela Cabutii y sus deseos echados al mar

Con "Proyecto Barcos-Deseos", la artista platense Marcela Cabutti pretende recurrir al simple juego de la memoria en la construcción de barquitos de papel y "ponerlos a flotar". Con este objetivo, hoy a las 19, en la Sala A del Centro Cultural Islas Malvinas, 19 y 51, quedará inaugurada una interesante instalación interactiva que se podrá visitar hasta el 29 de este mes.

"Para quienes lo hayan olvidado, existirá un instructivo del plegado del papel colocado frente a una mesa con resmas de papel oficio para realizarlos y así obtener la colaboración del público", explica Marcela Cabutti sobre su experiencia y agrega: "en alguna parte de la superficie de papel del barquito les pediré que escriban una palabra u oración que sintetice un deseo, un sueño que les gustaría cumplir e indiquen su nombre".

Así, los barquitos, que acompañarán el movimiento formal de las aguas, serán colocados en el piso, como en un lago ficticio, donde se colocará un barco de papel gigante, realizado por operarios del Astillero Río Santiago de Ensenada.

"El público podrá ir observando el cambio de densidad en las texturas de este mar de deseos a medida que se sumen más barquitos de papel. Todos tenemos e imaginamos nuestros propios deseos, pero no podemos visualizar el conjunto de deseos de las demás personas. Este trabajo es solo un intento de ello", apunta la artista local.

ALGUNAS REFLEXIONES

Sobre esta experiencia, Cabutti sostiene que "tiene la intención de ser repetida varias veces en lugares muy diferentes desde lo social, lo político, lo económico y lo territorial. Espacios públicos y privados. Propone simultáneos campos de lecturas y significados, a partir de un objeto".

Para finalizar, la artista reflexiona sobre el objetivo de esta instalación, que va un poco más allá de las superficies de los lagos: "Me interesa indagar las identificaciones mutuas que se pueden generar a partir de los deseos, exactamente allí donde el nexo de cómo se produce la identificación del propio espectador con la imagen se vuelve confuso gracias a la ayuda de la utopía y de cierto idealismo: el objeto arte, el barquito de papel, en este caso actúa como invitación pensar y escribir. Acciones inndividuales e íntimas, que conllevan a reflexionar acerca de los otros".

Fuente: El Día (El Cubo)